El servicio de pasajeros llegaba hasta Junín, desde Retiro, y ahora lo hará hasta Rufino; también prevén reanudar las cargas
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SANTA FE.- El servicio ferroviario de carga y de pasajeros de la línea San Martín, que une las estaciones de Rufino, en Santa Fe, y Junín, en Buenos Aires, volverá a circular en las próximas semanas. El anuncio de la reanudación del servicio fue oficializado en un acto en el que participaron el ministro de Transporte, Alexis Guerrera, y el gobernador santafecino, Omar Perotti.
“Hay una pertenencia al ferrocarril”, dijo el gobernador de Santa Fe. “Cuando necesitamos que el país se ponga en marcha y crecer en la generación de divisas, aparecen las posibilidades del potencial de nuestro sector agropecuario, agroindustrial y agroalimentario”, añadió y expresó: “Allí tenemos la capacidad, el conocimiento y la fortaleza de nuestros productores para hacerlo. Para que ese esfuerzo rinda y vuelva de la mejor manera, aparece la logística y los costos. La combinación de camión, ferrocarril e hidrovía es la que nos permite menores costos de logística”.
La conexión había sido cerrada por Carlos Menem en 1993 pero reactivada por Cristina Kirchner en 2014. Sin embargo, en 2017 volvió a ser cancelada por el desborde de la laguna La Picasa, cuyas aguas superaron las vías. Esa misma crecida, como se recordará, interrumpió la circulación vehicular por la Ruta Nacional 7, que une Buenos Aires con la región de Cuyo.
Las obras para la recuperación del servicio ferroviario en esa zona del extremo sur santafecino, próxima a las provincias de Buenos Aires y Córdoba, fueron realizadas por Trenes Argentinos Cargas, que es el operador vigente. En tanto, el tren de pasajeros será operado por Trenes Argentinos Operaciones.
En julio pasado se había anunciado la inminente rehabilitación de la conexión, pero continuaron las pruebas y ahora se anunció la reanudación del servicio de cargas y el de pasajeros.
Actualmente, el tren de pasajeros que parte de Retiro todos los viernes llega únicamente hasta la ciudad bonaerense de Junín. Con la reactivación de las obras llegará a Rufino haciendo un recorrido de 170 kilómetros.
Las formaciones de la Línea San Martín no circulan por ese trayecto hace más de cuatro años, debido a una crecida extraordinaria de los volúmenes hídricos de la laguna La Picasa. Los trabajos de reparación de 13 kilómetros de vía comenzaron en diciembre de 2019.
Según los informes recientes a los que tuvo acceso LA NACION, la reanudación del servicio posibilitará ahorros significativos de tiempo y costos logísticos en el traslado de carga, ya que por este trayecto circula más del 20% de la carga de la línea San Martín. El proyecto planteado para esta obra prevé un ahorro de tiempo de hasta un día y medio en el recorrido que realizan los trenes de carga.
Con una inversión de 117 millones de pesos, las tareas que se llevaron adelante contemplaron el tratamiento de la plataforma, acondicionamiento del pedraplén mediante el relleno de balasto, el desarme y armado de la vía, el reemplazo de la totalidad de fijaciones y del 10% de los durmientes y rieles así como también el mecanizado de vía.
Además de reducir el costo y el tiempo en el traslado de materia prima, el tren impulsa una menor contaminación por parte de los camiones y reduce la circulación de vehículos por rutas internacionales como la 7 que acompaña las vías del tren San Martín.
La línea San Martín transporta carga relacionada al consumo (cemento, envases, mercadería, pallets, agua mineral, cerámicos, vino y polipropileno); áridos (arenas, caliza, finos de caliza, carbón de coque, piedra partida, cal cálcica y cales); agrícolas (cebada, maíz, soja, trigo, aceite de girasol, pallets de girasol, harina de soja, pallets de soja); carga general (durmientes) y contenedores (bronce, cobre, estaño y vino en cajas).
Así, entre enero y mayo del 2021, se transportaron un total de 1.779.353 de toneladas, lo que significa un 31% más que el 2020 y un 69% más que en 2019. Aproximadamente el 20% de la carga que hoy se transporta pasaría por La Picasa.
La obra
Los trabajos para reconstruir el terraplén ferroviario en La Picasa, destruido por la inundación de 2017, se iniciaron en diciembre de 2019 con una inversión de 200 millones de pesos, y actualmente tiene una concreción del ciento por ciento.
Diariamente, en las últimas semanas, se realizaron dos recorridos de prueba a una velocidad de 25 kilómetros por hora para asentar bien las vías y el terraplén, a los efectos de lograr una velocidad final de 40 km/h.
En 2017, la estabilidad de las vías se vio comprometida por una crecida extraordinaria de la laguna ubicada entre Aarón Castellanos y Diego de Alvear, ambas comunas del departamento General López, en el sur de Santa Fe, casi en el límite con la provincia de Buenos Aires.
El anegamiento de las vías provocó que las formaciones del San Martín no pudieran volver a circular por la zona obligándolas a realizar un circuito alternativo bordeando el norte de la laguna para mantener la marcha.
Dicho recorrido representa un incremento en el tiempo de viaje y una reducción de la velocidad de la circulación, pues se trata de una vía secundaria de la traza de Trenes Argentinos Cargas (TAC).
Las obras de reparación del pedraplén sobre la laguna comenzaron en diciembre de 2019 y se mantuvieron durante todo el 2020 y 2021, pese a la pandemia.
Cuando se rehabilite la circulación de trenes en el sector, beneficiará a la operación porque se reducirán los tiempos de viaje y se recuperará el recorrido original de las formaciones de carga entre las estaciones de Rufino, en Santa Fe, y Junín, en Buenos Aires.
Actualmente, las formaciones deben tomar una vía alternativa al llegar a la localidad cordobesa de Laboulaye y desde allí rodear la laguna pasando por Melincué y Hughes hasta llegar a Junín, donde retoma la traza troncal con destino a la base Alianza, en el partido bonaerense de Tres de Febrero.
Trenes Argentinos informó oportunamente que se colocaron más de 10.000 toneladas de piedra (balasto) para los trabajos de recuperación del trayecto. Las obras consistieron en colocación de rocas, consolidado; y reparación y renovación de vías, y también el pedraplén, incorporando el balasto.