“Pronóstico reservado”: anticipan cuántos días pasarán sin nuevas tormentas y cómo serán los próximos temporales

Los días de intensas precipitaciones parecieran haber llegado a su fin, mientras los productores empiezan a preparar las cosechadoras para avanzar con la recolección de los cultivos de soja y de maíz, que viene retrasada. En este contexto, el experto en agroclimatología Eduardo Sierra señaló que, en el mediano plazo, no se esperan nuevos eventos meteorológicos, por lo que se podrá avanzar con la cosecha.

Asimismo, se refirió a la posible llegada de una fase La Niña para la segunda mitad de año. Al respecto, Sierra indicó que ese fenómeno, que provoca lluvias por debajo de lo normal, se va a poder confirmar hacia abril y mayo. Aseguró que, en caso de que se produzca su impacto en la campaña fina, será mínimo hasta octubre, aunque podría complicar la temporada de cultivos de granos gruesos en verano. Se requiere esperar para obtener más detalles.

“En el mediano plazo no se esperan nuevos eventos climáticos, lo que podría permitir al menos dos semanas adicionales, e incluso podrían ser más, para avanzar sin problemas con la recolección de los cultivos”, dijo Sierra. La Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) informó hoy que que la cosecha se mantiene “cerca de la línea de largada” con tan solo un 11% de avance. La entidad advirtió que las lluvias recurrentes han mantenido frenadas las labores, con casi 100.000 hectáreas trilladas en la región núcleo.

Próximos meses

En lo que respecta a los pronósticos para los próximos meses, Sierra indicó que “a lo largo del otoño se van a alternar períodos medio largos de buen tiempo, pero ya sin calor, con temporales de lluvia, pero de menor intensidad a la que tuvimos esta última semana”.

Por otro lado, destacó que estos eventos dejaron el suelo en óptimas condiciones para la siembra de los cultivos de la campaña fina, trigo y cebada, que comenzará en mayo. “Me dicen que el 2024-25 podría ser un récord de trigo, cebada y centeno, porque lo que le hizo un poco de mal a los cultivos de la gruesa, dejó el suelo en buen estado para sembrar a la fina; si la sembrás con humedad, ya después está hecha”, comentó.

Aseguró que entre abril y mayo próximo se va a poder confirmar si lo que viene es una Niña, ya que los “rumores” dicen eso, pero esto no se puede saber hasta dentro de uno o dos meses.

En las últimas semanas hubo varios informes en donde se advertía de esto. Ayer, el Informe Agrometeorológico Semanal del INTA detalló que se prevé que El Niño continúe durante el inicio del otoño. Luego se espera una transición hacia la fase neutral del ENSO para el trimestre abril-junio de 2024. Para el trimestre junio-agosto 2024, según la información a la fecha, habría una transición hacia La Niña con una probabilidad superior al 60%.

“En caso de que se confirme la llegada de una Niña esto implicaría que podría producirse sequía durante la primavera, verano y otoño de 2025 porque estos episodios toman poder en octubre, pero lo que quedaría de este año de otoño e invierno aún estará bajo la influencia del Niño”, dijo el experto y agregó: “Por eso, para la campaña fina, ya no sería un problema serio, porque con un poco más de agua ya se ha completado; sin embargo, esto podría representar un problema serio para la gruesa de 2024-25. Esa campaña estaría con pronóstico reservado”.

En lo que respecta al temporal de los últimos días sostuvo que es común que, al finalizar un episodio El niño, se produzca una racha de tormentas. “Es como la despedida”, comentó sobre el temporal de los últimos días. Dio como ejemplo que algo similar ocurrió en 2003 con una gran inundación en Santa Fe, luego un fenómeno en Rosario en 2006 y en 1985 con los anegamientos en la Cuenca del Salado.

En este marco, anticipó que las tormentas que puedan venir no tendrán la intensidad de las últimas. “Este tempranal liberó mucha energía que estaba acumulada en la atmósfera; ahora vamos a cosas que van a ser bastante más tranquilas”, sostuvo el experto.

Informe

La BCR informó hoy que las tormentas afectaron principalmente el extremo nordeste de Buenos Aires, el sudeste de Santa Fe y el centro sur de Entre Ríos, con acumulados de 70 a 200 milímetros. En otras regiones como Córdoba, La Pampa y el oeste bonaerense las precipitaciones fueron mínimas, representando solo el 10% de las registradas en la franja este. En la región núcleo, las lluvias se concentraron principalmente en la porción centro-este, con acumulados entre 80 y 140 mm. El valor más alto registrado fue en Santa Teresa (sur de Santa Fe) con 238,8 mm, mientras que el mínimo se registró en Noetinger (Córdoba) con 3,4 mm.

Respecto de los pronósticos, igual que Sierra en la BCR informaron que “son alentadores”. Precisó: “Los pronósticos son alentadores, ya que para los próximos días no se esperan lluvias, hasta al menos el miércoles 27 por la tarde, con presencia de viento intenso, que permitirá el secado de los cultivos y de esta manera comenzar una fuerte actividad de recolección hacia el fin de semana”.

“Todo parece indicar que la última década de marzo será un período significativamente más seco que los primeros dos tercios del mes”, dijo el consultor Alfredo Elorriaga, citado por la entidad.

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