Según un estudio de la Universidad Austral, perciben un mayor cuidado del suelo y en el uso y manejo de agroquímicos, entre otros puntos
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Uno de los principales cuestionamientos al sector agropecuario es por el cuidado del medio ambiente. Recientemente, se difundió un video realizado por integrantes del ambiente artístico, periodístico y gastronómico en contra de la utilización de fitosanitarios. Hace un tiempo, además, el pastelero y cocinero Damián Betular protagonizó la campaña #TomateChallenge en la que sostenía que los tomates regulares pasan por herbicidas y otros procesos que degradan sus propiedades. Como estas, son numerosas las campañas, marchas y movimientos en las que se apunta contra el sector.
Sin embargo, en este contexto, los jóvenes visualizan un cambio positivo en la relación del agro con el ambiente y las preocupaciones centrales que ellos tienen. Esto es, perciben mayor cuidado en el uso y manejo de agroquímicos, disminución del uso de herbicidas, mejoras en las capacitaciones de manejo de productos y pruebas de nuevos métodos, como biofertilizantes y biodigestores.
Así surge del informe “Los alimentos en una sociedad cambiante. La agro-bio-industria escucha a los jóvenes”, elaborado por el Centro de Agronegocios y Alimentos de la Universidad Austral. Durante agosto de 2021 se hicieron 8 focus groups con un total de 70 jóvenes entre 18 y 29 años residentes en las provincias de Buenos Aires, Córdoba y Santa Fe. Los grupos fueron segmentados teniendo en cuenta el sector socioeconómico, el tamaño de la ciudad de residencia y el vínculo de los participantes con el agro.
Para los jóvenes, estos cambios se dieron a partir de distintos elementos, como los reclamos de consumidores, una nueva legislación, un cambio de paradigma entre productores agropecuarios.
“Empecé a notar que muchas empresas grandes empezaron a crear proyectos de capacitación, el uso correcto de productos para evitar consecuencias”, es uno de los testimonios de los jóvenes en el informe.
El medio ambiente es una preocupación e interés central en esta generación. “Es una materia que se transforma en nodal en la construcción de imagen del agro y que hoy presenta ciertos conflictos”, explicó Silvina Di Giano, líder del trabajo de campo del proyecto, en el marco de la presentación de los resultados de la segunda investigación sobre la percepción de los jóvenes sobre el agro.
Las dos temáticas recurrentes relacionadas al medio ambiente son la sobreexplotación del suelo y el uso de agroquímicos, además del impacto que eso pueda tener en el suelo, en las poblaciones cercanas y en los productos que llegan a la mesa de los jóvenes.
Otro asunto importante entre los jóvenes es por el adecuado cuidado de los animales. “Los jóvenes tienen escaso conocimiento sobre cómo es el proceso de producción. Perciben que la producción relacionada con animales está enfocada en la rentabilidad y carece de suficiente cuidado”, dijo Di Giano.
En rigor, son tres los ejes que preocupan a los jóvenes, que en el estudio definen como centrales y que forman parte de una misma militancia interconectada: el medio ambiente, el cuidado animal y la nueva conciencia alimentaria.
“Detrás hay una cosmovisión, un cambio en la mirada, que es el giro o pasaje de una concepción egocéntrica a una ecocéntrica. Es decir, los seres humanos ya no están puestos como eje o centro, con un valor mayor que la naturaleza no humana”, comentó Di Giano.
En lo que se refiere a la alimentación, emerge o se visualiza la “alimentación consciente”. En ese sentido los centennials expresaron: “Lo que comemos nos afecta de manera directa nuestra calidad de vida. No solo en el aspecto físico, sino también en nuestras dimensiones emocionales y psíquicas”.
Esta nueva mirada, detallan, se manifiesta en que prestan mayor atención a los componentes de los alimentos, leen las etiquetas, valoran lo ecológico, lo orgánico y que haya menos alimentos “ultra” procesados.
“La alimentación, como nutrición, era mejor antes porque había menos químicos, pero desde lo moral estamos mejorando muchísimo sobre cómo o de dónde salen los alimentos”, manifestaron.
Los jóvenes hablan de una relación del sector con el gobierno “compleja y en constante conflicto”. Pero destacan al agro como marca país. “Lo ven como la actividad económica más importante, la mayor fuente de ingreso de divisas, por lo tanto, se torna una actividad estratégica para el desarrollo. Se le otorga un carácter identitario y genera orgullo”, sostuvo Di Giano
“Nosotros producimos alimentos para el mundo, eso es lo más importante”, son algunas de las frases destacadas de los jóvenes.
Además de arrojar múltiples disparadores para el debate al interior del sector agroalimentario, el trabajo realizado por la Universidad Austral brinda algunas recomendaciones generales para el diseño de una comunicación más efectiva en el futuro. Entre ellas, sugiere que el agro debería ser más proactivo y comunicar a nivel cadena hacia la población general, ya que no está claro el aporte y el impacto del campo en la vida cotidiana. También recomienda buscar nuevos medios y modos de narrar para acercarse a los más jóvenes.
Por otra parte, los jóvenes sienten que las figuras del sector están muy asociadas a “lo viejo” y que “no muestran proactividad sino reacción frente al conflicto”.
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