A sus 92 años, dejó este mundo el Dr. Otto Solbrig. Su extraordinario legado a la humanidad toda perdurará para siempre. Constituye una obra fenomenal y un extraordinario aporte al progreso de la ciencia y de la agricultura global.
Luego de haber transitado parte de su formación profesional en la Universidad de La Plata, se radicó en Estados Unidos en los años 50 y comenzó su carrera en la Universidad de California, Berkeley, donde obtuvo su Doctorado profundizando sus estudios en las áreas de la botánica y de la genética. Después pasó a incorporarse a la mundialmente prestigiosa Universidad de Harvard, donde por los últimos 41 años desarrolló la mayor parte de su brillante carrera profesional como docente y profesor emérito e investigador haciendo aportes científicos y humanitarios de altísima relevancia y alcance global.
Fue galardonado con una larga lista de distinciones internacionales del más alto nivel y en reconocimiento a su destacadísima labor profesional y aportes a la ciencia y al progreso de la biología y de la agricultura.
El accionar de Solbrig fue siempre fuertemente caracterizado no solo por la excelencia, profundidad e impacto de sus investigaciones y trabajos, sino también por su generosidad como entusiasta motivador y formador, además de promotor del progreso de la agricultura global.
Contribuyó en forma relevante a la creación y accionar de instituciones como Aapresid, a cuyos congresos fue un asiduo asistente y destacadísimo orador enriqueciendo sus eventos con sus aportes de visiones y conocimientos de gran profundidad y relevancia. Generó un alto impacto positivo sobre la transformación de la agricultura hacia una meta de mejora continua por medio de la aplicación de los más modernos y revolucionarios avances de la ciencia.
También fue un entusiasta y firme promotor de la biotecnología, llegando a promover y materializar dos eventos decisivos para el cambio de visión y percepción de este relevante progreso científico y su aplicación en la Agricultura. Aportó a la gestación y realización de dos eventos conjuntos a los congresos de Aapresid, desarrollados en 2000 y 2001 que se denominaron Harvard-Aapresid por la biotecnología. Fueron decisivos para el afianzamiento de la adopción de estas nuevas y revolucionarias tecnologías.
La fuerte motivación que Solbrig aportaba a la idea de avanzar con el desarrollo de la ciencia biotecnológica a nivel nacional reforzó fuertemente la idea de establecer una compañía nacional que, apoyando a grupos de investigación que venían trabajando en biotecnología en la Argentina, apuntaran a avanzar con sus estudios y desarrollos de líneas de investigación y trabajos. Esto para aportar soluciones para la agricultura y otras áreas como la industria, la salud, etcétera.
Trabajando sobre estas ideas y motivaciones, un grupo de productores y técnicos fuertemente ligados a Aapresid y liderados por el Dr. Victor Trucco llevaron adelante la idea que en 2001 concluyó con la fundación de la compañía Bioceres.
El autor es productor agropecuario
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