El nuevo presidente del Matba quiere duplicar el volumen operado por medio de más jugadores y traders
A pocas semanas de asumir la presidencia del Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), el corredor de cereales Marcos Hermansson apunta a duplicar el volumen que se opera en esa plaza y a captar nuevos operadores mas allá del sector agroindustrial para aumentar la liquidez del mercado. El Matba es una herramienta fundamental y lo ha sido desde su creación en 1907. Durante la campaña 2015/16 se tradearon unas 27 millones de toneladas, aproximadamente un 30% de la cosecha. Del total negociado, el 62% está representado por soja, el 28% corresponde a maíz y 6% a trigo.
-¿Cuál será el objetivo de su gestión?
-Mi sueño es duplicar el volumen que pasa por el Matba.
-¿Y cómo lo piensa lograr?
-Soy un convencido de que la docencia es fundamental, un círculo virtuoso. El Matba tiene que estar en permanente contacto con sus clientes y en la búsqueda de nuevos clientes. Hablo de compradores naturales de granos como son los molineros, los feedlots y del productor como vendedor natural. En el medio, tenemos que buscar a los especuladores, a los que ni compran ni venden granos sino que simplemente operan un producto y aportan liquidez al mercado. Esto es fundamental. Tenemos que apuntar a ser un mercado de trading, y que quienes operen no sean solamente los que quieren comprar y vender granos. Apostamos a ser una alternativa más al mercado
-Muchos dirían que la entrada de especuladores puede llegar a desvirtuar un mercado de cobertura y entrega física
-De ninguna manera. Primero tenemos que hacernos fuertes en esos mercados, pero no tenemos que mirar con malos ojos que vengan jugadores del sector bancario y bursátil. Hace muchos años hicimos un trabajo para que las AFJP pudieran invertir en el Matba. Como mercado tenemos que apuntar a ser una herramienta para que, además del que compra para recibir y del que vende para entregar podamos ser también una alternativa para el trading.
-Para lograr más volumen, ¿van a pedir que se reduzcan las exigencias patrimoniales para los operadores?
-Estamos en conversaciones con la Comisión Nacional de Valores (CNV) para explicarles cómo funcionan los mercados de futuros. El Matba es de 1907 y tiene un nivel de quebranto literalmente nulo porque opera con un sistema de coberturas de márgenes que se deben depositar para poder operar. Por eso, el riesgo patrimonial del operador no incide en el mercado.
-Si tuviera que vender la herramienta a un productor o a un operador que compra granos, ¿qué le diría?
-Lo llevaría tres meses atrás y le mostraría el valor del trigo enero ese día, que llegó a tocar niveles de casi 180 dólares la tonelada, hoy vale 160 dólares aproximadamente. Con una herramienta como el Matba, sin asumir riesgo, se podía hacer una estrategia combinada para captar ese valor. No conozco a nadie que me haya dicho: pagué el seguro del auto pero no me sirvió porque no atropellé a nadie. Lo pagás para dormir tranquilo. Nunca es una plata perdida, igual que la prima para asegurar un precio de una cosecha. Y ojalá que esa prima sea una plata perdida, porque quiere decir que ganaste por otro lado.
-¿Cuál es el volumen de cosecha que se debería cubrir en los mercados?
-Muchas veces, un productor se cubre por un 20 o 30% de la cosecha y se obsesiona con ese porcentaje de la cosecha, haciendo una ingeniería muy fina sobre ese porcentaje. Pero se olvida del otro 80%. Nosotros lo que recomendamos es trabajar sobre el total de la cosecha esperada. De otra forma es como si un padre se concentrara en dos de sus hijos cuando tiene ocho. Por eso, la docencia en el Matba no es solamente explicar que es un put o un call, sino también explicar el concepto comercial global.
-¿Ustedes observan que los productores trabajan con objetivos comerciales?
-En general, el productor mira el rinde pero no a la comercialización donde puede perder 40 dólares por tonelada por no haber cubierto correctamente su producción. No se puede dejar librada al azar.
-¿Tienen pensado desarrollar nuevos productos?
-Sí, hay seis productos nuevos en agenda para desarrollar como un contrato futuro de arroz, de azúcar, de algodón o de limón. Pero para poder desarrollar algo lo fundamental es que sean muchos los participantes y esto es lo que le queremos explicar a la CNV para que aliviane las exigencias patrimoniales de los operadores. Cuando el mercado está atomizado, funciona. Cuando está en manos de dos o tres, como pasó lamentablemente con el mercado del girasol, el mercado desaparece.