La potencia industrial de Italia y el entramado productivo de sus pymes, admirado y estudiado a nivel mundial, estuvieron presentes en Expoagro. En un pabellón de 600 metros cuadrados, que duplicó al de 2018, se presentaron 11 empresas de autopartes y componentes para maquinaria agrícola, que incluyeron la agricultura de precisión, para buscar asociaciones con empresas argentinas e intercambio comercial.
Además, hubo otras empresas que expusieron en forma individual, por fuera del pabellón oficial que se presentó por medio del "Sistema Italia", que promueve misiones de intercambio económico-comercial y cultural.
Para dar una idea de la dimensión de la maquinaria agrícola y sus autopartes y equipos para jardinería alcanza con citar el dato de su facturación anual: 11.000 millones de euros en 2017, con exportaciones a 170 países. De ese total, 7800 millones de euros corresponden a tractores y máquinas agrícolas, 2500 millones a componentes y 800 millones a máquinas de jardinería.
En Expoagro, las firmas expositoras llegaron por la Agencia Italiana para el Comercio Exterior (ICE, en sus siglas en italiano) y la Federación Nacional Italiana de Maquinarias para la Agricultura (FederUnacoma, en sus siglas en italiano). Esta entidad, a su vez, interviene en la promoción de ferias como la Exposición Internacional de Máquinas para la Agricultura y Jardinería (EIMA International), que se realiza cada dos años en la ciudad de Bolonia, una exposición del nivel de Agritechnica, de Alemania, o el Salón de la Agricultura de París.
"El 75% de las empresas italianas son pymes", dice Luigi D'Aprea, director de la oficina de la Argentina, Uruguay y Paraguay del ICE. "El mercado global exige asociaciones en la fabricación de productos e Italia es líder en la fabricación de componentes", destaca y elogia el nivel de las empresas de maquinaria agrícola argentina muchas de las cuales utilizan partes elaboradas por empresas italianas.
D'Aprea explica que el gobierno italiano tiene un conjunto de programas para favorecer la asociación y el comercio con empresas de otros países como el Sace y el Simest, con diferentes propuestas de seguros, financiamiento para la exportación, importación y fabricación de equipos.
El interés de las empresas italianas no solo alcanza a la agricultura extensiva sino también a la intensiva en la que el país europeo tiene un amplio desarrollo. Desde la fruticultura hasta la vitivinicultura ofrecen diferentes equipos para la producción.
"Estamos insertos en un proceso de modernización en la fabricación de maquinaria agrícola y sus componentes con los avances de la electrónica y la robotización", agrega Alessandro Malavolti, presidente de la FederUnacamoma. El entramado de la industria italiana ofrece soluciones para los diferentes tipos de agricultura que se practican en el mundo. Desde siembra directa y tradicional hasta la protección de cultivos, riego, procesamiento, forestación y tratamiento de biomasa. El 67% de las exportaciones italianas van para Europa, mientras que América lleva el 16%, Asia el 8%, Africa el 5,5% y Oceanía, el 3,4 por ciento.
"Hay un mercado amplio para la maquinaria agrícola de origen argentino e Italia está disponible para contribuir con ese crecimiento", sostiene D'Aprea.