Soy médico veterinario. Con mi hijo Ignacio, iniciamos la práctica de pastoreo precoz del sorgo en el partido de Tandil en 2008, un año caracterizado por una fuerte seca de verano. Desde entonces lo seguimos utilizando con excelentes resultados.
Este pastoreo precoz se realiza a 25 días de la siembra, aproximadamente. Con una carga animal de 5 a 10 cabezas de recría o invernada. El tipo de pastoreo es continuo, es decir que se eliminan las clásicas parcelas.
Este manejo lo mantiene verde y con alto porcentaje de proteína hasta fines de abril (primeras heladas), produciendo forraje de alta calidad durante 120-150 días. La duda que se plantea habitualmente es la toxicidad del sorgo. No es tóxico en esta etapa y esta fue la hipótesis inicial, corroborada por la experiencia de estos años. De todos modos, el método implica análisis de cianhídrico previo al ingreso de los animales.
Así manejado, provee forraje verde de excelente calidad desde diciembre hasta abril según zonas, con una digestibilidad del 77,7% en enero, 74,3% en marzo, y muy alta proteína con 21,6% en enero y 23,5% en marzo.
Es comparable a una alfalfa, pero sin peligro de empaste. Tiene una muy alta capacidad de rebrote y tolera el pisoteo y la sequía. Con el pastoreo precoz y continuo aumenta alrededor de 500% su cantidad de macollos, cubriendo bien el suelo y frenando las malezas. Al eliminar el uso de alambrado eléctrico, simplificamos el manejo y bajamos los costos. Cabe aclarar que admite el pastoreo rotativo, sobre todos en tambos. En este caso el monitoreo debe ser cuidadoso.
La proteína que supera el 20% lo hace ideal para recría y engorde, mediante suplementación a campo con silo autoconsumo de maíz o cebada. En tambos, permite reemplazar la proteína cara de los suplementos habituales y aún de la alfalfa. Consideramos que es la proteína más barata para el verano ya que un kilo de proteína de expeller girasol puede costar entre 5 y 10 veces más.
El único cambio introducido es la metodología de pastoreo. Se inicia a los 25-30 días de la siembra y previo análisis de cianhídrico negativo, nunca ingresar animales "hambreados". La hacienda no se retira una vez ingresada. El pastoreo continuo evita que haya dominancia apical de algunas plantas y mantiene bajo el requerimiento hídrico.
Considerando datos de 2019, la tasa de crecimiento diario de un sorgo forrajero Talero, de Tobin, medida por índice verde en bajo dulce de Azul fue de 106 kg MS/ha/día en enero, 171 kg MS/ha/día en febrero y de 160 kg MS/ha/día en marzo. En síntesis, es una práctica de bajo costo, se adapta a suelos de menos calidad que alfalfa o maíz. Provee los bienes escasos del verano, esto es proteína y energía.
Por su alta productividad, alcanza con hacer un 5% de la superficie ganadera para descansar pasturas en el rigor del verano. Resiste la sequía mejor que cualquier otro recurso implantado y provee altas ganancias de peso cuando la mayoría de los planteos ganaderos deben recurrir al encierre, suplementación, o conformarse con bajas ganancias de peso.
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