Se trata de un recorte del 10% en la superficie en esa zona; están en riesgo otras 400.000 hectáreas
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En la zona agrícola núcleo del país, que comprende el sur de Santa Fe, el norte bonaerense y el sudeste de Córdoba y es donde están las tierras más productivas, ya se perdieron 130.000 hectáreas de trigo por la sequía. Además, hay 400.000 hectáreas “malas”, por el estado en que se encuentran los cultivos, que enfrentan un panorama complicado porque las últimas lluvias dejaron bajos registros. Vale recordar que, a nivel país, en tanto, con una menor producción proyectada ya se vienen calculando menores ingresos por exportaciones por unos US$740 millones. Luego del dólar soja que permitió el ingreso de más de US$8100 millones, son menores recursos que con trigo no estarán a fin de año para el país.
El cuadro específico de situación sobre el cereal de la campaña 2022/2023 en la zona agrícola núcleo se desprende de un relevamiento de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR). Las hectáreas que la entidad ya da por descontadas que no se cosecharán representan el 10% del área cubierta con el cultivo en esa región agrícola.
“Es efectiva la pérdida del 10% de la superficie triguera. Restan 400.000 ha, un 34%, en muy malas condiciones que podrían seguir el mismo destino”, advirtió.
“Las lluvias llegaron para muy pocos, solo 3 estaciones del norte de la región registraron lluvias en torno a los 15 mm: Pellegrini, Classon y Pozo del Molle. Y solo un 30% de la región superó los 5 mm”, indicó el reporte de la entidad.
La semana pasada, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires descontando un impacto general de la sequía sobre la campaña 2022/2023 proyectó en 127,7 millones de toneladas la cosecha global de todos los granos, un 1,6% menos versus el ciclo pasado. En tanto, pronosticó que, con US$40.900 millones, las exportaciones agrícolas retrocederían un 9,2%. En el caso puntual del trigo, la producción se ubicaría, para la Bolsa de Cereales porteña, en 17,5 millones de toneladas, por debajo de las 22,4 millones de toneladas del año pasado. Por la menor producción, las exportaciones del cereal bajarían de 15 millones de toneladas el último ciclo a 11 millones de toneladas. Las exportaciones del cultivo están calculadas en US$3760 millones, inferior a los US$4500 millones de 2021/2022. Con menor producción y recorte en los precios se perderían unos US$740 millones.
Escenario
“Actualmente, un 46,3% del área presenta condición de cultivo regular/mala, 89,3 % de la misma se distribuye entre el centro y norte del área agrícola. No obstante, de no registrar lluvias durante los próximos siete días la situación podría agravarse, extenderse al sur del área agrícola afectando la actual proyección de producción de 17,5 millones de toneladas”, dijo la entidad porteña en un informe de ayer.
En este contexto, la Bolsa de Comercio rosarina alertó por la situación del trigo en la zona agrícola núcleo. “De las 1,2 millones de hectáreas sembradas con trigo que siguen hacia cosecha, un 34% está en mala condición, 46% regular, 18% bueno y 2% muy bueno”, indicó.
Esta entidad trazó un panorama sobre lo que pasa en algunas zonas. “Seguimos sin lluvias, y se agrava todo. Ya hay un 20% de los lotes perdidos. Irán a soja de primera, si llueve”, apuntó sobre lo que dicen los técnicos en la zona de Bigand, Santa Fe. “Desde San Gregorio la situación es igual de crítica: 35% de los trigos perdidos”, agregó.
Según el reporte, en el norte de la región núcleo la situación mejora gracias “a algunos milímetros extras que recibieron en El Trébol. Pero incluso muy cerca, en Carlos Pellegrini advierten que tiene que llover más de 30 mm dentro del mes de octubre”.
Juan Pablo Ioele, asesor, dijo a LA NACION que en la zona de Marcos Juárez hay trigos ya espigados que “no llegan ni a la mitad de la tibia”.
En esta línea, ya se prevén fuertes bajas en los rindes. La BCR lo expresó así: “Los picos de la 2022 están entre 15 y 20 quintales por debajo de los peores del 2021″.
“El año pasado a esta misma fecha se hablaba de “pisos” de rinde de entre 35 a 40 qq/ha. Hoy en la región núcleo los techos de rinde esperables están en 30 a 35 qq/ha y en las mejores localidades. Los agrónomos coinciden en que con cada semana que pasa sin lluvias importantes, los rindes se ajustan hacia abajo y cada vez es más difícil pensar en una recuperación”, remarcó.
Lo que viene no parece ser muy alentador. El informe habla de “sin agua durante los próximos siete días” y consigna otra amenaza: “Se espera una circulación muy importante de aire frío y seco que va a afectar severamente a Córdoba y Buenos Aires, y en menor medida en Santa Fe. Hay riesgos de heladas moderadas en un momento clave del trigo: el cultivo está emitiendo la espiga que es susceptible y define la cantidad de granos a formar y también el peso potencial. También esta circulación fría aleja la positividad de lluvias en los próximos 7 días”.
La suerte del maíz
En este contexto, la Bolsa rosarina indicó que por efecto de la sequía en la zona agrícola núcleo solo se implantó el 9% de la superficie total “intencionada”. Señaló que hoy hay sembradas allí 135.000 hectáreas con maíz temprano, que corresponde a la siembra a esta altura del año. “En siete días solo se avanzó un 4%”, alertó. Con la falta de lluvias, más del 90% del cereal en la región se haría como siembra tardía, más adelante si llegan las precipitaciones. A nivel país la BCR prevé un recorte de 8,64 a 8 millones en las hectáreas implantadas con este cereal.
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