Para la Cámara de Industriales Molineros se debe “cambiar el mecanismo, compensando la demanda” y orientar “el subsidio solo a la harina para producir pan”
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Luego de que ayer la Secretaría de Comercio fijara nuevos precios de referencia sin impuestos de la harina, la industria molinera manifestó su rechazo a que el fideicomiso creado para subsidiar la bolsa de harina que llega a las panaderías, continúe como una compensación a la industria molinera, en lugar de ser redireccionado para entregarlo directamente a los comercios.
A fines de agosto, a través de su cuenta de Twitter, el secretario de Comercio, Matías Tombolini, admitió que el Gobierno buscaba modificar el Fondo estabilizador del trigo argentino (FETA porque funciono “parcialmente”. Es por ello que indicó: “propusimos, como alternativa, cambiar el mecanismo compensando la demanda y orientando el subsidio solo a la harina para producir pan”.
En esa linea, en un comunicado, la Cámara de Industriales Molineros, indicó que dicha cartera les habia asegurado que “el subsidio se trasladaría a las panaderías a partir del 1° de octubre”. Con esa promesa, según manifestaron, habían entendido que la secretaria había comprendido “la veracidad” de su postura de que “subsidiar a los molinos en cambio de hacerlo con los destinatarios finales de esa ayuda era un grave error conceptual que gastaría inútilmente valiosos recursos del Estado sin lograr los resultados pretendidos”.
Sin embargo, indicaron que ayer se encontraron con la “sorpresa” de que en el boletín oficial, a través de la resolución 29/2022, estaban publicados los nuevos valores para la harina, que lo consideraron como una “prórroga tácita, sin mediar ninguna explicación” del FETA.
“Pareciera desprenderse que el Gobierno está dando marcha atrás con lo que públicamente se había comprometido, que era terminar con el subsidio a la molinería, ya que no había dado resultados”, indicaron fuentes de los molineros a este medio.
“Ninguna autoridad ha explicado ni en privado ni públicamente cuáles son los motivos por los que lo anunciado en agosto no se ha cumplido, a pesar de que el precio del pan no ha detenido la suba, influenciado por otros costos que lo componen”, por otro lado expresaron en el comunicado.
Para los molineros, el FETA “sólo ha causado ingentes perjuicios en la cadena comercial triguera y el pan no ha parado de subir”.
Asimismo, sostuvieron que la intervención del mercado de trigo a través del Fideicomiso “ha vulnerado la competencia natural, ha creado graves distorsiones y bruscos cambios relativos, alterando también la cadena de pagos, y poniendo en riesgo el desarrollo de un sector vital que da trabajo a todo lo largo y ancho de nuestro país”.
Por otro lado, entendieron que el subsidio a la harina y a la molinería, dada su muy baja incidencia en el precio del pan, “no es el camino para llegar con un precio de pan subsidiado a los sectores vulnerables que realmente lo necesitan, sino que supone un gasto que sólo dilapida recursos imprescindibles para una economía como la Argentina”.
Vale recordar que el fideicomiso se dispuso mediante el decreto 132/2022 del 19 de marzo pasado, fue impulsado por el entonces secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti, con la suba de las retenciones a la harina y el aceite de soja, del 31 al 33%. Se pensó para recaudar unos US$400 millones para subsidiar la harina que llega a las panaderías.
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