Para la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), las ventas al exterior de granos y subproductos se ubicarán en todo 2024 en 31.300 millones de dólares, por debajo de los US$35.800 millones esperados en diciembre pasado; fuerte impacto de la baja de los precios
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El valor de las exportaciones de granos y subproductos del agro previsto para 2024 se achicó en US$4500 millones versus diciembre pasado, según una estimación realizada por la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).
Según la entidad, la venta al exterior dejará al país 31.300 millones de dólares. En diciembre último la Bolsa rosarina había calculado US$35.800 millones. La estimación incluye soja, maíz, girasol, trigo, cebada y otros productos. El declive obedece a la caída de los precios de los granos y a que hubo recortes en la producción por una sequía de tres semanas entre parte de enero y febrero pasado. Vale recordar que hoy la Cámara de la Industria Aceitera y el Centro de Exportadores de Cereales (Ciara-CEC) informó que en los dos primeros meses de 2024 entraron al país divisas por US$3.021.760.548, un 92% más que igual período de 2023, marcado por los efectos de una fuerte sequía.
“Cuando el 2023 llegó a su fin, el agro respiraba aliviado. Las periódicas lluvias del último trimestre ponían fin a la peor sequía de la que se tuviera registro en los últimos 60 años. Dos meses después, sin embargo, no sólo la ola de calor de febrero cortó de un saque el potencial de rindes en la región, sino que la cotización internacional de los commodities sufrieron un derrotero bajista, que deja a los precios de exportación argentinos un 35% debajo de los que se registraban a la misma altura del año pasado”, indicó el reporte.
Respecto de esto último, la entidad señaló que la baja internacional de los precios -desde el máximo relativo en mayo de 2022 se desplomaron un 50%- tuvo un correlato en el plano local que describió de la siguiente manera: “Siguiendo la cotización real de los granos, según surge de actualizar los valores Cámara por el índice CER (coeficiente de estabilización de referencia), puede observarse que, desde mediados de diciembre a la fecha, el valor en términos reales de la Pizarra Rosario ha caído, en promedio, un 35%. Soja y maíz, en particular, alcanzan los valores más bajos desde agosto de 2023″.
En el informe se consignó que la entrada de dólares superará ampliamente a los US$25.300 millones de 2022/2023, que estuvo marcado por la sequía. No obstante, quedará por debajo de otras marcas como los US$39.500 millones de 2020/2021 o el récord logrado en 2021/2022 con US$41.900 millones.
Además de la merma en precios, hubo un declive versus las expectativas iniciales en materia de producción. En maíz, de aguardarse una cosecha de 59 millones de toneladas se pasó a 57 millones. En tanto, en soja el camino a la baja fue, hasta el momento, de 52 millones de toneladas a 49,5 millones de toneladas. Antes de la ola de calor la BCR esperaba un récord productivo, entre todos los granos, de 142,5 millones de toneladas.
Lluvias
Las últimas lluvias no alcanzaron para que se recupere por completo el potencial de rinde en los cultivos, algo que dejó en claro la entidad en otro reporte. “Las lluvias de febrero -que alcanzaron el promedio histórico de los últimos 30 años- no lograron compensar los efectos negativos de la ola de calor de fines de enero sobre la zona núcleo”, dijo. Añadió: “La esperanza depositada en estas lluvias se vio parcialmente cumplida, proporcionando un alivio crítico pero insuficiente para revertir los daños. La variabilidad en la distribución de las precipitaciones generó una recuperación heterogénea, beneficiando de manera desigual a los cultivos de la región”.
No obstante ello, hubo mejoras. De acuerdo con la organización, la soja de primera -de siembras de octubre- “mostró una recuperación notable en la última semana de febrero, con un 75% de los lotes en condiciones excelentes a muy buenas, un avance de 15 puntos porcentuales”.
La BCR señaló que la soja de segunda -se siembra luego de la cosecha de trigo- también exhibió mejoras “con un 40% de los lotes en condiciones excelentes a muy buenas y el rinde promedio estimado en la región se mantiene en 36 qq/ha [quintales por hectárea].
Respecto del maíz, los cultivos tardíos -de siembras de noviembre/diciembre- “que recibieron lluvias justo antes de la floración presentaron mejores condiciones, aunque no de manera uniforme en toda la región”.
Aparte de reflejar un deterioro en la estimación de las exportaciones, la BCR también evaluó los números del Valor Agregado Bruto del Agro, un indicador que considera el valor de la producción de granos menos el valor de todos los insumos y costos de producción. Al respecto, ahora este se proyecta en US$10.453 millones, US$4700 millones por debajo de la proyección del mes de diciembre último.
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