Herramientas disponibles para calcular la dosis de fertilizante

Dentro de los factores que afectan la productividad de los cultivos el suelo es el disparador clave a la hora de establecer un manejo adecuado. Las propiedades físicas, químicas y biológicas del mismo son las que determinan un marco de referencia para alcanzar un manejo óptimo del recurso que permita reducir las brechas de rendimiento mediante el incremento vertical de la producción.

Ya no hay recursos disponibles para expandir fronteras agrícolas e incrementar la producción por esta vía en el corto plazo, sólo nos resta mejorar la productividad de la superficie existente por lo que debemos utilizar el mejor criterio agronómico, la inversión intelectual y, que el conocimiento fluya entre los involucrados.

La fertilización es una práctica de impacto a la hora de optimizar la eficiencia de uso de los recursos y alcanzar los rendimientos máximos. Es por ello que, la importancia en la decisión de la cantidad de fertilizante a utilizar debe seguir un manejo responsable de nutrientes basado en la Fuente, Dosis, Momento y Forma correcta.

Existen numerosas herramientas para determinar las dosis adecuadas de fertilizantes a utilizar y todas deben iniciarse en un certero diagnóstico de fertilidad. El análisis de suelo continúa siendo el enfoque más utilizado para ello a nivel mundial.

El correcto muestreo y análisis de suelo indican no sólo la disponibilidad de los nutrientes y las características del suelo sino que contribuyen a la predicción de las probabilidades de respuesta y a la protección ambiental mediante la auditoria edáfica permanente. Es bueno agregar que gracias al GPS, existen actualmente numerosas herramientas que ayudan a las tareas de muestreo y a la mejor comprensión de los datos analíticos mediante la representación gráfica de los mismos. Un buen diagnóstico de fertilidad es el comienzo y final de una adecuada recomendación. Hoy en la Argentina, el productor de trigo cuenta con una herramienta de clase MS denominada Triguero.

Triguero, que resulta de un convenio entre AACREA, FAUBA y Profertil, se basa en un modelo de simulación y permite evaluar el comportamiento productivo del cultivo con un enfoque multi-escenario, lo que da a conocer las respuestas productivas a la aplicación de Nitrógeno, Fósforo y Azufre, buscando de esta forma, cuantificar brechas. Los parámetros utilizados son factores edáficos y climáticos que definen el escenario, manejo del cultivo y análisis de suelos. Su uso es público ya que se baja en forma gratuita y es una herramienta de enorme utilidad en trigo.

Además es muy importante contar con experiencias de fertilización cercanas para tomar como referencia. En este sentido, la Red de Nutrición de la Región CREA Sur de Santa Fe -IPNI-ASP es un excelente ejemplo del efecto de las rotaciones en el mediano plazo. Transitando ya casi 16 años se han determinado respuestas directas y residuales al uso de fertilizantes, evaluado metodologías de diagnóstico y considerado parámetros relacionados a la calidad y productividad de los suelos en el tiempo para secuencias de cultivos típicas.

Por último, cabe mencionar a la agronomía con tecnología conocida como Agricultura de Precisión. Tal vez la mayor importancia radica en conocer con exactitud mensurable la variabilidad intra-lote de las brechas productivas y poder direccionar los planes para su disminución. Hoy en día el cálculo de extracción de nutrientes a partir de mapas de rendimiento, el monitoreo con imágenes satelitales de alta resolución, los análisis multianuales o las prescripciones de fertilización utilizando la Fuente, Dosis, Momento y Forma adecuadas están a un clic de distancia. La conectividad y la adopción masiva de computadoras, smartphones y tablets, las app y la web 2.0 son algunos de los ejemplos de cómo la tecnología que nos rodea es útil para simplificar revolucionariamente las cosas y facilitar el éxito de las tareas a campo.

Carlos Faricelli

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