En Nueve de Julio, Guillermo Massaccesi largó las vacas a un trigo que no tendrá el rinde esperado; su caso se repite en otros agricultores por la falta de lluvias y fuertes heladas
- 4 minutos de lectura'
Guillermo Massaccesi inició la campaña de siembra con un dejo de esperanza. Después de las lluvias de fin de mayo pasado, sembró 50 hectáreas de trigo en el partido bonaerense de Nueve de Julio. El cultivo comenzó a desarrollarse con éxito y todas las señales indicaban un rendimiento de poco más de 5000 kilos. Aunque esta cifra era inferior al promedio, no obstante alentadora después de tres años de sequía. Sin embargo, este panorama optimista sufrió un vuelco a mediados de octubre que lo obligó a tomar una difícil decisión.
En la zona los pronósticos de lluvia empezaron a fallar, el cultivo comenzó a deteriorarse y el 12 de octubre último llegó el golpe final: una sucesión de heladas que terminaron por deteriorar el trigo. De los más de 5000 kilos esperados, en 36 hectáreas pasó a proyectar apenas 1000.
“Fue terrorífico para el cultivo, lo terminó de destruir. Así que tuvimos que tomar la decisión de largar los animales en el lote porque no se justificaba ingresar con las cosechadoras. En las condiciones en las que estaba el trigo, el rendimiento iba a ser menor a 1000 kilos”, comenta. Fue así que el productor, que hace agricultura y ganadería junto a su padre, distribuyó 160 vacunos en las 36 hectáreas, de a cuatro por hectárea.
“Veníamos entusiasmados; veíamos que, a pesar de la escasa cantidad de agua, los cultivos estaban prosperando. Además, manteníamos la esperanza de que en septiembre y octubre, períodos en los que normalmente llueve, las condiciones mejorarían aún más. Por eso, invertimos y destinamos una considerable cantidad de recursos. Nunca imaginamos que nos veríamos obligados a llevar el ganado al cultivo”, detalla.
Hugo Enriquez, vicepresidente de la Sociedad Rural local, explicó que el testimonio de Massaccesi se replica en todo el partido del nordeste bonaerense en donde la combinación de las heladas y la sequía dejó a muchos productores en una situación crítica.
“En octubre se registraron cinco heladas sin precedentes, no solo por la cantidad sino también por la intensidad. Eso, combinado con la escasez de agua, fue un factor detonante y se perdieron muchas hectáreas de trigo”, dice.
En el partido se sembró en torno del 40% del área original, aproximadamente 20.000 hectáreas de trigo, mientras que en un “buen año” suelen ser entre 40.000 y 50.000 hectáreas. De ese porcentaje, solo entre un 10% y 15% está en buenas condiciones. El resto se encuentra entre regular, malo e incluso “muy malo”.
En consecuencia, al igual que Massaccesi, muchos productores están utilizando al trigo para reserva forrajera o para consumo del ganado en pie, porque no se proyecta que rindan entre 800 y 1000 kilos.
El dirigente advierte que se vive un contexto de “fuerte incertidumbre”. Explica: “Los que están reverdeciéndose, que pueden llegar a dar 2000 kilos, se van a terminar cosechando a fines de diciembre. Pero hay que ver qué pasa con las temperaturas en los días subsiguientes porque nos puede generar un problema de calidad de llenado”.
En cuanto a la siembra de maíz temprano, se esperaba implantar alrededor del 80%, pero finalmente solo se sembró la mitad. El resto se está pasando a maíz tardío, y aproximadamente un 15% del área está siendo destinada a soja. Esto se debe a consideraciones económicas, como la disponibilidad y costos de fertilizantes, así como el margen de ganancia de los productores.
“Algunos campos están quedando con poca humedad en la superficie para seguir sembrando, alrededor de 80 cm a un metro, y en el resto ya no hay nada más. Si no llueve a partir de ahora, la cosecha podría complicarse nuevamente. Tenemos que ser precavidos, no podemos equivocarnos en esta cosecha; los productores están muy comprometidos económicamente”, advierte.
En cuanto a la ganadería, comenta que la primavera comenzó mejor y los campos se están recuperando, pero la mayoría de los rodeos han perdido condición corporal. “Aunque se hizo un esfuerzo considerable para tratar de mantenerla, se redujo la cantidad de vacas porque muchos campos hicieron limpieza de vacas; ahora estamos intentando ver cómo recuperamos el recurso forrajero para el próximo año”, concluye.
Otras noticias de Agricultura
- 1
Se vende: un fiscal detectó irregularidades en la inminente subasta de un edificio del INTA y pide evitar “posibles hechos de corrupción administrativa”
- 2
Opinión. Zonas de exclusión: no es el glifosato sino el asfalto el que mata la vida biológica de los suelos
- 3
Recuperación: las exportaciones del principal complejo argentino tocaron en volumen su nivel más alto en cinco años
- 4
Caliente en invierno y fresco en verano, el rancho mantiene su identidad cultural