Más de 45.000 personas pasaron por la exposición en busca de novedades en tecnologías de maquinaria, semillas y servicios de financiamiento
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SAN NICOLÁS.- Es una jornada extra large y los visitantes la aprovechan a pleno. Con un horario extendido hasta las 21, por la suspensión de las actividades ayer por la lluvia, fue una multitud la que se acercó a Expoagro Edición YPF Agro hoy y se dispuso a sacarle el jugo a su visita. Según datos de los organizadores, llegaron más de 45.000 visitantes, una cifra histórica, indicaron.
Desde temprano y, con un sol que poco a poco comenzaba a asomarse entre las nubes, eran filas interminables de vehículos sobre la ruta 9 que empezaba en la entrada al estacionamiento y continuaba por varios kilómetros hacia atrás. Así, el público comenzó a fluir de manera firme por el predio. Las recorridas y las consultas en los distintos stands de innovación, tecnología, maquinaria agrícola y entidades bancarias tenían un recambio constante.
En rigor, el Banco Nación en lo que va de la muestra, otorgó asistencia crediticia por $14.000 millones, sobre una disposición inicial de $16.300 millones. “Eso motivó a que el banco decidiera ampliar este fondeo a $25.000 millones porque hay más demanda de la prevista”, informaron en la entidad bancaria.
Cerca del mediodía, un grupo de 35 pequeños y medianos productores, integrantes de la Cooperativa Agrícola Los Cóndores, en el departamento cordobés de Calamuchita, decidió hacer un alto en la recorrida para comer un “buen asado” de camaradería. Uno de ellos es Mateo Gioda, tercera generación de familias de productores. Básicamente en la zona siembran soja y maíz, combinado con algo de ganadería.
Para el productor, de 51 años, el panorama que tiene el campo por delante es complejo y ambiguo por donde se lo mire. “A los problemas locales, típicos de la Argentina que vienen de larga data, estamos transitando una sequía muy importante y ahora se suma el contexto internacional de la invasión de Rusia a Ucrania, que si bien y en enhorabuena sube el precio de los granos, por otro nos altera los costos de los insumos que traerá consecuencias que serán negativas”, dijo en diálogo con LA NACION.
Con este contexto, las cosas que más lo preocupan es la enorme carga impositiva que tiene el campo y la falta de previsibilidad, de reglas claras. “Necesitamos más libertad a la hora de producir, no tantos palos en la rueda. Siempre somos sospechosos de todo lo malo que ocurre en la Argentina y en realidad pertenecemos al selecto grupo que a la vuelta de seis meses al año le ponemos 100 millones de toneladas al Tesoro del Estado y a la mesa de los argentinos. Estamos orgullosos de hacerlo pero siempre estamos condicionados y hasta estamos mal vistos por el Gobierno, que es socio en las ganancias y cuando hay pérdidas no las compartimos con nadie. Liquidamos nuestra cosecha a un dólar de $70 y los insumos los compramos a un dólar de $200″, describió.
Según contó, el arreglo con el FMI tiene expectante al campo ya que, “para bien o para mal puede perjudicar” y es por eso por lo que se mantienen “en guardia” porque no tienen claro cuáles serán las consecuencias y de eso depende el futuro: “Normalmente, estos acuerdos no han traído beneficios para el campo, ni para el común de los argentinos, pero ojalá que nos vaya bien a todos”.
Gerónimo Uriburu llegó temprano junto a otros dos productores de La Paz, Entre Ríos, y se dedicó a recorrer los stands de la maquinaria agrícola. En su zona produce arroz. En un año complicadísimo para la actividad por el efecto climático de una profunda sequía, sigue “para adelante”.
“Hay que seguir trabajando, no se puede esperar nada del Gobierno. Solo hay que concentrarse en lo que uno hace y hacerlo cada vez mejor”, indicó.
Por otro lado, coincidió con Gioda al entender que, si bien el precio de los granos en el mundo está en alza, los insumos son cada vez más altos. “No sabemos que van a pasar con los precios de los fertilizantes, los herbicidas es una incertidumbre grande sobre todo para la próxima campaña, cuando ya ahora los vendedores de insumos te corren con que no va a haber, con que suben los precios, con los problemas que tenemos de la importación y ahora de la guerra. Son problemas por todos lados”, dijo.
La innovación y la tecnología en el campo es algo que apasiona y atrapa al ingeniero agrónomo Juan Facundo Rodríguez. Por eso toda la mañana se dedicó a caminar los distintos espacios especiales de plataformas de agricultura digital que había en la muestra. Vive en la localidad bonaerense de Vedia y trabaja en asesoramiento a distintos productores de la zona núcleo.
“El ánimo de los productores en el inicio de campaña por la seca era negativo, malo pero después de las primeras lluvias que los cultivos se recompusieron el ánimo comenzó a mejorar pero ahora estamos llegando a cosecha con una enorme incertidumbre de lo que son los precios, insumos y la campaña siguiente”, expresó.
“No tenemos forma de planificar qué vamos sembrar, a qué cultivo apuntar, porque la realidad es que no sabemos dónde estamos parados porque el Gobierno siempre va a la última olla que tiene para raspar que es el agro, que es de donde se hacen rápidamente de plata líquida”, añadió.
Desde Los Toldos, en la provincia de Buenos Aires, arribaron los productores Eduardo Oliver y Adrián Vandamme, para ver la parte dinámica de la muestra, las herramientas y sobre todo los beneficios financieros que ofrecen las entidades bancarias.
“El productor es un hombre de trabajo pero está preocupado por un mercado enrarecido por las transparencia de los precios y la incertidumbre del país”, dijo Oliver y repitió: “Lo único que necesitamos es certidumbre, certidumbre y más certidumbre”. En esa línea, para Vandamme, “pase lo que pase el productor trata de innovar, pero hoy necesita reglas claras a nivel nacional”.
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