En Twitter se viralizó una comparación sobre la evolución de la producción de la oleaginosa en el mundo, pero también se planteó la gran incógnita del lugar que ocupará el país este año por la sequía
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La soja es un cultivo clave para la Argentina y también lo es para Estados Unidos y Brasil, donde las políticas macroeconómicas les han permitido crecer exponencialmente. Esta situación que constantemente se refleja en las estadísticas oficiales se mostró a través de un video que compartió una analista de mercados de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), donde se puede observar el crecimiento que hubo en la producción de la oleaginosa en el mundo y el lugar que ocupa el país.
En un ranking virtual se pudo ver que de 1960 hasta 2022 la nación que mayor relevancia tuvo en ese sector fue Estados Unidos, pero Brasil llegó a un momento de quiebre en los últimos años. “Ranking de los mayores productores de soja mundiales desde 1960 a 2022. ¿En qué puesto creen que terminará la Argentina en este 2023?″, planteó Natalia Marín, una experta de esa entidad.
El interrogante está abierto por el efecto que dejará la sequía en la Argentina, que tendrá el peor rendimiento mínimo de soja del que se tienen registros, de acuerdo con el último informe de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires. La entidad pasó de calcular 29 millones de toneladas de cosecha a 25 millones de toneladas.
En tanto, en las imágenes se pudo ver que en 1960, uno de los mayores productores de soja en el mundo era EE.UU. con 17.359.920 toneladas, mientras que China ese mismo año alcanzó las 5.888.066 toneladas. Indonesia ocupaba el tercer lugar con 400.722 toneladas y el país vecino aparecía en el sexto lugar con 255.199 toneladas, que poco a poco fue escalando hasta ubicarse en el tercer lugar y finalmente convertirse en el gran líder.
Recién en 1971 la Argentina hizo su gran aparición en este cultivo con 74.985 toneladas de la oleaginosa, dos años después se ubicaba en la posición sexta con 439.215 toneladas. Mientras que Brasil conseguía “destronar de la tabla” a China con 8.729.777 toneladadas. Así, la Argentina hacía lo propio con México, la Unión Soviética e Indonesia con 674.220 toneladas.
Envalentonado, en los 1990, la Argentina comenzó a pelear el tercer lugar con el gigante asiático con más de 14 millones de toneladas. Así se ubicó por detrás de Brasil con 17,5 millones y Estados Unidos que entonces producía más de 50 millones, y era amo y señor. La soja transgénica resistente a glifosato (1996) y la siembra directa le dieron un empujón al cultivo en la Argentina.
No obstante, en 2018, Brasil dio el gran batacazo y pasó a producir más que Estados Unidos con más de 116 millones de toneladas, contra 107 millones de norteamérica. La Argentina seguía en el tercer lugar con 47 millones de toneladas y siguió así hasta 2022, que cerró en 52,7 millones toneladas (entre oferta del ciclo previo y producción). La gran duda será la producción para este año en medio del panorama desolador que enfrenta el campo.
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