China tiene un importante ahorro de recursos vinculados con la sustentabilidad al importar soja del Mercosur.
Esa es la síntesis de una exposición sobre este tema de China, entre otros, que hizo Ernesto Viglizzo, asesor ambiental del Grupo de Países Productores del Sur (GPS), tras disertar en el seminario anual de la Fundación Producir Conservando.
Según el experto, importando soja del Mercosur China se ahorra un 29% de tierra arable y un 33% de agua dulce. Pero no es lo único. También se ahorra un 12% de emisiones de carbono, 4% de potasio, 7% de fósforo, 4% de nitrógeno y un 9% de plaguicidas.
"Cuando exportamos soja exportamos seguridad alimentaria y servicios intangibles", señaló Viglizzo.
En el Mercosur el 96% del agua usada por los sistemas de producción agropecuaria proviene de la lluvia y es un recurso que no compite con otros sectores de la economía, según destacó el especialista en base a un informe de 2011 de Mekonnen & Hoekstra.
En tanto, cuando se hace una comparación de indicadores de sustentabilidad entre la Argentina, Brasil y China saltan a la vista algunos puntos favorables para el Mercosur y en particular a la Argentina.
Mientras la Argentina tiene una erosión del suelo de 1,9 toneladas por hectárea/año, en China este indicador trepa a 7,5 toneladas/ha/año. La siembra directa ha jugado en favor de la Argentina en este índice. En tanto, en Brasil hay una erosión de 22 toneladas/ha/año.
Por el lado de las emisiones de carbono, el sector rural emite 0,21 toneladas de carbono por hectárea/año en la Argentina, 0,44 en Brasil y 0,36 en China.
Por otra parte, en la emisión de carbono por deforestación la Argentina está en 0,32 toneladas de carbono/hectárea/año versus 0,81 de China y 1,21 de Brasil.
Entre otros indicadores, el consumo de plaguicidas también es más bajo en el Mercosur. Ronda el equivalente a 5,17 kilos por hectárea/año en la Argentina y 4,57 en Brasil versus 13,06 de China.
Para destacar, China sola tiene el 27,88% de la emisión de gases de efecto invernadero global. Sumados, Brasil, la Argentina, Uruguay y Paraguay solo llegan al 2%.