El inusitado optimismo de la industria de la maquinaria agrícola para 2025 tras un año de caída de ventas

Con 6515 unidades vendidas, para la industria de la maquinaria agrícola el 2024 culminó, pese a las expectativas, como un año de sinsabores. Según el último informe de la Asociación de Concesionarios de Automotores de la República Argentina (Acara), esa cifra representa un 7,4% menos en patentamientos de las 7034 concretados en 2023. Sin embargo, con mucha confianza a lo que viene, el mercado estima un crecimiento de alrededor del 15% por encima de este.

“Se fue el 2024, un año lleno de altibajos y cambios de humor, con expectativas altas pero con deseos incumplidos. La industria está baja, por debajo de los promedios históricos, y lejos de lo que necesita el país en términos de renovación tecnológica en el campo. El mercado se quedó sin nafta sobre el final”, expresó el informe de la entidad.

En detalle, en el último mes de 2024, las ventas de cosechadoras alcanzaron las 46 unidades, una variación negativa del 8% respecto a noviembre, cuando se vendieron 50 unidades y que comparado con el mismo periodo del año pasado tuvo una variación interanual positiva del 91,7%. En ese sentido, en el acumulado anual de 2024 se han registrado 616 unidades vendidas que, comparadas con 595 unidades en 2023, implica una variación acumulada positiva del 3,5%.

En cuanto a tractores, en diciembre, los patentamientos realizados fueron 445, lo que significa una caída del 5,9% respecto a noviembre de 2024 (473 unidades). En tanto, el acumulado anual de 2024 asciende a 5244 unidades, frente a 5887 unidades en 2023, lo que refleja una variación acumulada negativa del 10,9%.

En relación a las pulverizadoras, el mismo periodo registró una venta de 53 unidades nuevas, una variación positiva del 1,9%, respecto al mes anterior (52 unidades). Eso suma un acumulado anual de 655 unidades en 2024, frente a 552 unidades en 2023, lo que implica un crecimiento acumulado de 18,7 por ciento.

Leandro Brito, director ejecutivo de la Asociación de Fábricas Argentinas de Tractores (AFAT), explicó que esas bajas en la venta de tractores y las pequeñas subas en cosechadoras y pulverizadoras muestran que al sector le falta despegar todavía.

“En tractores, terminamos abajo 10%. En cosechadoras, pensábamos que íbamos a terminar igual que el año pasado, como máximo un 5% arriba y terminamos 3,5%. Siempre es una buena noticia terminar arriba del año anterior, aunque estamos de acuerdo que falta mucho. Y en lo que es pulverizadoras, creíamos que íbamos a estar por encima de un 15% respecto del año pasado y terminó un poco mejor incluso, casi el 19%, Lo cual es una buena noticia”, indicó a LA NACION.

Pero, más allá de que piensan que están en un nivel inferior respecto de podría ser un mercado normal en la Argentina (en la actualidad se está en “un 40% por debajo, dada la obsolescencia del parque y la necesidad de renovación tecnológica que existe”, dice Brito), se muestran esperanzados para el 2025 que recién comienza.

Como todos los años, el sector está sujeto a variables que no se pueden controlar, como el factor climático, la evolución de la cosecha y los precios de los commodities internacionales. Tampoco está a su alcance factores más estructurales que en algún momento esperan que se resuelvan. Entre ellos, Brito, entiende como fundamental “tener un sistema crediticio, un sistema de financiamiento estable a lo largo del año, créditos de largo plazo y créditos ajustados a las necesidades del sector”.

“No es lo mismo vender una máquina, un bien de capital, que vender un auto. Y, en ese sentido hay bastante para crecer. Creemos que, en la medida que se alinean estas variables: haya crédito, los precios de los commodities acompañen y la cosecha sea buena, podríamos pensar en terminar lo que es el 2025 por encima de este año. Tal vez todavía no logremos llegar a los números que nosotros pensamos que deberían ser. Pero somos optimistas y pegar un salto de alrededor del 15% respecto del año pasado”, destacó.

En un análisis más exhaustivo de segmento por segmento, el directivo explicó que la evolución de cada maquinaria tiene su ciclo propio cada campaña nueva: “Hay que ver cómo empieza el año para las cosechadoras y cómo evoluciona el resto del año el ciclo de las pulverizadoras. Los tractores se venden a lo largo de todo el año, que es un área donde hay bastante trabajo por hacer y hay optimismo en que se puede llegar a crecer: viene bastante retrasado el sector y es un bien de capital que se requiere mucho”.

Respecto de las pulverizadoras se muestran optimistas. “Para este 2025 el mercado lo ubicamos alrededor del 15% por encima del años pasado”, agregó.

En el mismo sentido, para Acara, en cuanto a las perspectivas, “el 2025 necesita de algún cambio de las variables que afectan al sector en forma favorable para recuperar al menos un 20% y volver a valores promedio”.

“La producción va a ser buena en cantidad, los precios [de los granos] están muy bajos y los márgenes ajustadísimos. Encima, en los últimos días, las complicaciones de cumplimiento de compromisos financieros de jugadores importantes del agro le ponen una incertidumbre más a un sector que viene golpeado. Veremos como se desenvuelve el año, pero como todo productor, hay que sembrar y mirar para adelante con buenos augurios”, finalizó Acara.

Conforme a los criterios de

Conocé más

“Precios caros”. Los contratistas agrícolas se quejan de lo que vale la maquinaria y piden más importación

“Medianamente optimistas”. El negocio de la maquinaria agrícola cierra un 2024 difícil y espera una revancha el próximo año

Día de la Maquinaria. La Inteligencia Artificial y la robotización están revolucionando la producción de alimentos