Quienes trabajamos el campo todos los días no damos rodeos. Es por eso que hoy, en un nuevo Día Nacional de la Avicultura, nuestro sector hace un llamado abierto de cara a la opinión pública para que el Estado tome definitivamente la decisión de promover las transformaciones necesarias para acompañar el desarrollo de nuestra industria, y nos ayude a ofrecer soluciones alimentarias en este contexto único que atraviesa la humanidad y el país como consecuencia de la pandemia mundial por Covid-19. Nuesta inquietud es simple: ayúdennos a ayudar.
Este año ha sido por demás especial: el productor, casi en su totalidad explotaciones familiares, ha demostrado su inquebrantable compromiso con la sociedad, nunca ha cesado la producción, ha puesto el cuerpo para garantizar el abastecimiento con un incremento de la demanda del 40%, se ha visto perjudicado en la cadena comercial por el fijador de precios que le ha comprado barato y ha remarcado el producto al público con altos márgenes, ha afrontado incrementos de costos desde marzo a la fecha de entre un 15 y un 20% . Y, aún así, nunca se detuvo.
Más aún: buscó, busca y buscará soluciones mediante el diálogo y el consenso con las autoridades para que el huevo siga siendo la proteína animal esencial en la mesa de los argentinos.
Es por eso que no podemos ignorar la reciente decisión del gobierno nacional de prorrogar por 60 días la prohibición de actualizar precios de venta, que impacta fuertemente en el sector. Los productores se preguntan cómo hacer para seguir entregando mercadería a los mismos precios de febrero de este año, que en algunos casos es el precio de septiembre de 2019. Nos preocupa mucho esta situación.
Esta es la vocación del sector por encontrar soluciones equilibradas ante una problemática de desacople entre producción, comercialización y consumo registrada en medio de una situación de crisis.
Estamos ante la oportunidad histórica de cambiar estas inequidades, acompañar las necesidades alimentarias con buenas prácticas sectoriales, y en el proceso diversificar la matriz del agro nacional, hoy centrada exclusivamente en soja, trigo, maíz y carnes rojas.
Pero para poder ofrecer soluciones necesitamos ser escuchados por los decisores. Para crecer y producir un mayor impacto en la vida económica de la Argentina, el sector avícola, tal vez uno de los que generan mayor valor agregado a la producción del campo, necesita de medidas concretas por parte del regulador en materia impositiva, de precios, de fomento de las exportaciones, de financiamiento productivo y de simplificación de los procesos administrativos.
Tenemos la convicción de que trabajando en conjunto con las autoridades alcanzaremos las soluciones que la Argentina demanda. Ayúdennos a ayudar.
El autor es presidente de Capia
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