Las entidades del campo que llamaron al cese de comercialización de granos y hacienda para faena, entre el lunes y el jueves próximo, señalaron que la medida de fuerza "no provocará aumentos sobre los precios ni desabastecimiento."
El jueves pasado, Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), la Sociedad Rural Argentina (SRA) y Coninagro resolvieron el cese de comercialización luego de que el Gobierno formalizara en el Boletín Oficial la suba de las retenciones a la soja, del 30 al 33%. Federación Agraria Argentina (FAA), otra de las entidades de la Mesa de Enlace, dio libertad de acción a sus bases en medio de una dura disputa interna donde hay sectores que simpatizan con el Gobierno. Para FAA, esa decisión fue una forma de evitar el quiebre interno y a la vez preservar la relación en el marco de la Mesa de Enlace.
En un comunicado, las entidades impulsoras precisaron que la medida de fuerza no incluye los productos perecederos, como la leche. En tanto, agregaron que "dada la inminencia de estas medidas, pedimos que continúe el normal desarrollo de las actividades programadas con antelación tales como exposiciones, remates, etc".
Ayer, ante el inminente paro, y en medio de la necesidad de los compradores por adquirir hacienda, en el Mercado de Liniers el índice de todas las categorías subió un 10,32%. En ese mercado es mínima la cantidad de cabezas que suelen ingresar los lunes, a veces sin llegar a las 200. Los jueves no hay ingresos o son de subastas especiales. En tanto, hay mayor volumen martes y miércoles, los dos días con los que coincidirá la medida de fuerza.
Las entidades destacaron que la protesta es para que se escuche el reclamo por el incremento de la carga tributaria. "Con esta carga tributaria no podemos producir y, de persistir esta situación, el futuro de la familia agropecuaria se verá muy comprometido", dijeron.
Vale recordar que en diciembre pasado las retenciones a la soja pasaron del 24,7 al 30 y ahora al 33%. En maíz y trigo se mantienen en el 12% luego de haber subido desde un 6,7%. Desde diciembre, las retenciones en términos porcentuales se incrementaron un 33% en soja, en tanto que las del trigo y el maíz lo hicieron un 79%.
Para tratar de contener el reclamo del campo, el Gobierno bajó productos de las economías regionales del 9 al 5%, el girasol del 12 al 7% y prometió un sistema para compensar la producción del 23% de la soja del país. Ese porcentaje, que lo hacen 42.406 productores, tendrá vía compensaciones alícuotas efectivas del 21 al 30%.
En tanto, queda afuera de la compensación el 77% de la soja. Ese porcentaje lo hacen 14.884 productores que tributarán la tasa del 33%.
"Lo que no entienden en el Gobierno es que el 70% de la facturación del campo es la soja y eso quedó afuera", explicaron en una de las entidades del sector.
El Gobierno esperaba que ingresaran este año unos 350 millones de dólares extra con la suba de las retenciones, pero la sequía que afecta a la región núcleo hizo que ya se perdieran dos millones de toneladas, equivalentes a un potencial ingreso de casi US$700 millones.
Con FAA habiendo dado libertad de acción a sus bases, en las últimas horas comenzaron a conocerse respaldos al paro de distritos de la organización, como en Entre Ríos.
"El Distrito III de la Federación Agraria Argentina informa que adhiere al cese de comercialización declarado a nivel nacional por el sector agropecuario. En Entre Ríos se mantiene la unidad de los productores y sus entidades, como un mandato indiscutido de las bases", dijeron en un comunicado.
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