El avance de la "ruta de la cría"

VICTORICA.- Sobre la huella de las antiguas rastrilladas de los indios ranqueles, luego ocupada por la línea de fortines, corre la ruta provincial N° 105, un camino de tierra que en días de lluvia se convierte en un lodazal intransitable. Es precisamente ese trazado el que ha comenzado a cubrirse con pavimento para dar forma definitiva a la llamada "ruta de la cría", que unirá las ciudades de Victorica y General Acha, los dos polos de concentración de hacienda más importantes de La Pampa.

El proyecto partió de la fundación Loventué para el Desarrollo Local y ya fue aprobado por el gobierno provincial, que aporta los fondos para su realización. "Todos los partidos políticos lo incluyeron en su plataforma y cuando ganó el actual gobernador, Carlos Verna, lo puso en ejecución", comentó Hugo Kenni, viceintendente de Victorica y uno de los impulsores de la idea.

En total serán 150 kilómetros de asfalto. En la primera etapa, que abarca 37 kilómetros y que se terminará a fines de este año, ya se concluyeron 12 de pavimento y otros cinco de imprimación (primera cobertura de asfalto). Hace 20 días Vialidad Provincial terminó el estudio técnico de otros 28 kilómetros, que forman parte de la segunda etapa y que unirán la localidad de Carro Quemado con el paraje El Durazno (tramo que se terminaría a fines de 2007).

Una vez hecho eso, que demandará en total unos 27.000.000 de pesos, quedaría una tercera etapa de 90 kilómetros que daría punto final a la obra en el llamado "cruce del carancho", donde se empalma con la ruta Conquista del Desierto, por la que se llega a General Acha.

Esta vía solucionará un déficit provincial en lo que a transporte se refiere. "El que se ha criado acá sabe cómo son los caminos y que si llueve 80 milímetros no te conviene salir de tu casa. Por otro lado, cuando no hay agua por mucho tiempo se forman bancos de arena y huellones que hacen imposible el tránsito", explicó Luis María Orgales, intendente desde 1999 de Carro Quemado, un pequeño pueblo con 82 años de historia situado a un costado de la "ruta de la cría".

Si se observa el tendido de la red caminera pavimentada de La Pampa, se advierte rápidamente que no existe ninguna ruta de Norte a Sur desde la nacional 35 hasta la nacional 151, separadas por 250 kilómetros, y que no hay una vía provincial asfaltada en este sentido desde la ruta 3, paralela al límite de la provincia de Buenos Aires. "Esta situación atenta contra un desarrollo provincial armónico y equilibrado", explicó Roberto Torrado Porto, del INTA Victorica.

La "ruta de la cría" atravesará los departamentos de Loventué y Utracán, que, con 450.000 cabezas cada uno, son los de mayor existencia bovina en toda la provincia. Pero además este proyecto favorecerá el traslado de la producción de toda la zona del caldenar, que se extiende en sentido noroeste-sudeste y abarca los dos distritos mencionados más los de Rancul, Conhello, Toay, Lihuel Calel y Hucal.

En esta región, en la que hasta hace unos 70 años predominaba el ganado lanar y donde hoy la actividad principal es la cría y recría bovina, pasta el 44,7 por ciento de los vacunos de la provincia, es decir, 1.940.085 (según datos aportados por el Senasa). Y al concluirse la ruta quedarán unidas las dos ciudades más antiguas de La Pampa, que se destacan por contar con un movimiento de 1.200.000 animales por año, entre los que se concentran en los remates de feria y los que se comercializan en ventas particulares.

La zona y su producto han conseguido el reconocimiento de los invernadores, que identifican al ternero del caldenar como un animal de características zootécnicas especiales por el esfuerzo de mestización de los productores. "Pero el transporte y la comercialización no están desarrollados, por lo que la infraestructura vial toma vital importancia", señaló Kenni.

Otras contribuciones

La "ruta de la cría" también favorecerá el desarrollo de otras actividades. "Acá hay dos estancias muy importantes, como el atelier de Ortiz Echagüe y La Marianita, que se dedican al turismo rural y hoy tienen dificultades a la hora del arribo de sus visitantes. Asimismo, ésta es una zona donde hay muchos cotos de caza que reciben un gran número de cazadores al año", destacó Orgales.

En lo que respecta a Carro Quemado, también socialmente prestará una gran ayuda, puesto que simplificará su comunicación en los aspectos de salud, educación y comercio, en los que este pueblo depende de Victorica y Santa Rosa. La generación de empleo local que originó esta obra es otra gran ventaja, ya que se creó un importante movimiento de mano de obra. "Además, este camino le va a ahorrar unos 200 kilómetros a la gente que viaja desde el Norte hacia la costa atlántica", agregó Kenni.

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