Se trata de un productor ligado a Aapresid que se venía desempeñando como director Nacional de Agricultura
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Nicolás Bronzovich será el nuevo presidente del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) tras la salida de Juan Cruz Molina Hafford, uno de los pocos cordobeses que quedaban en el gobierno de Javier Milei luego que su gestión tuviera varias figuras de la provincia de Córdoba. El cambio se da luego de una serie de “diferencias” que el ahora exfuncionario tenía con el Ministerio de Economía por la propuesta de gestión que buscaba llevar adelante. También los objetivos de “recorte” del gobierno nacional que venían trascendiendo sobre el organismo.
El secretario de Agricultura, Sergio Iraeta, designó a Bronzovich, quien hasta ahora se desempeñaba como director Nacional de Agricultura. Ahora conducirá el organismo técnico encargado de contribuir al desarrollo del sector agropecuario, agroalimentario y agroindustrial a través de la investigación y la extensión, según señalaron.
Nacido en Ushuaia, Tierra del Fuego, se graduó como ingeniero agrónomo en la Facultad de Ciencias Agrarias en la Unidad Integrada Balcarce. Reconocido, indicaron, por su gran compromiso con el agro, es miembro de la Sociedad Rural y de la Asociación de Ingenieros Agrónomos de Balcarce. Además, es socio de la Regional Aapresid Mar Del Plata-Fangio y en Aacrea fue asesor del Grupo Crea Frontera. Asimismo, es socio de la empresa familiar de producción y servicios agropecuarios en el sudeste de la provincia de Buenos Aires. Fue gerente de Prospectiva de Aapresid.
María Beatriz “Pilu” Giraudo continuará como vicepresidenta de INTA y, trascendió, haría los recortes necesarios en el organismo. Vale recordar que vienen circulando versiones de despidos. Además, Guadalupe Covernton, exAuravant y Aapresid, se sumaría al equipo para la reestructuración.
A la salida de un evento por los 30 años de Fertilizar en Puerto Madero, Bronzovich habló con los medios, a quienes les respondió que el ofrecimiento para el nuevo cargo no tenía “ningún mandato” de ajuste. “Fue una pregunta si tenía ganas, tiempo y compromiso para trabajar por una institución que sabían que conozco. Estoy de acuerdo con que todos nosotros hagamos los esfuerzos que estamos haciendo para que la Argentina supere la situación en la que estamos”, indicó.
Bronzovich llegó al gobierno de la mano del exsecretario de Bioeconomía, Fernando Vilella, quien lo presentó oficialmente junto a todo su equipo. En Ghana, África Occidental, acompañó el desarrollo productivo en ese país. Según mencionaron las fuentes, esto se dio gracias a un convenio de vinculación tecnológica entre el Banco Africano de Desarrollo y Aapresid. Hasta allá llegó Bronzovich, donde trabajó con un equipo de investigación. Luego hizo lo mismo en Guinea, ambas zonas de la costa oeste africana, donde trabajó por seis meses en el desarrollo y transferencia de conocimientos con productores y técnicos locales.
La salida de Molina Hafford
Fuentes cercanas a Molina Hafford señalaron que hubo una gran diferencia con el secretario de Coordinación de la Producción, Juan Pazo, no solo en las formas y la mirada en la cuestión agrícola, sino en todo lo vinculado con el sistema de producción y trabajo. En un mensaje que le envió al equipo, Molina Hafford, señaló: “Estimados Consejeros y equipo de INTA agradezco todo el acompañamiento en estos 11 meses. Les informo que presento mi renuncia por encontrar algunas diferencias en el modelo de gestión que propongo para el INTA y los pedidos que tengo desde el Ministerio”.
El INTA tiene un plantel de 6900 empleados y en el último tiempo venían circulando versiones sobre un posible ajuste, incluyendo el desprendimiento de edificios. En el gobierno habrían pedido una lista de despidos de 900, de estos, llegaron a un acuerdo con más de 200, entre retiros voluntarios y jubilaciones.
Vale recordar que en agosto pasado, el organismo tuvo que ceder 41 hectáreas de un establecimiento en Cerrillos, Salta, para el Instituto Provincial de la Vivienda (IPV) con el fin de atender una situación habitacional para la población. A Salta le dieron 180 días para que prepare un proyecto de desarrollo para que la provincia compre, pero para que esto suceda tiene que estar el aval y firma del Consejo, algo que entre pasillos aseguran que no va a suceder.
Molina Hafford, dijeron, firmó “solo”, sin la aprobación del Consejo. “Todos los informes señalan que esa tierra no se puede entregar porque no se está usando”, contó una fuente a LA NACION. El otro problema, más allá de los recortes del personal, apunta a la venta del edificio de la calle Cerviño al 3101, que tiene más de 3000 mts2, y por la cantidad de personal podría ocupar solo 1500 mts2. El Gobierno plantea que este edificio se puede “subocupar”. De acuerdo con las fuentes consultadas, este bien edilicio está dentro de la lista de los más de 300 edificios que tiene en la mira el gobierno. Adentro hay tecnología, software y hardware de la Fundación e INTeA.
“Por medio de la presente me dirijo a usted con el fin de presentar mi renuncia a partir del día 15 de octubre de 2024 al cargo de presidente del INTA — Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria, quedo a su disposición y del Presidente de la Nación. Agradezco especialmente al Consejo Directivo Nacional del INTA y a nuestro equipo del INTA por su dedicación y compromiso. Me siento orgulloso de los logros alcanzados y confío en que el INTA continuará trabajando al servicio de la Argentina, por el bienestar de los productores y la sociedad toda”, dice la nota firmada por el exfuncionario en su despedida, dirigida al ministro de Economía, Luis Caputo. También al secretario de Agricultura, Sergio Iraeta.
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