A partir del 1° de enero de 2020, la provincia de Buenos Aires implementará el Documento Único Equino (DUE) y dejará de lado la guía única de traslado para el movimiento de caballos que viene rigiendo de hace tiempo.
En este sentido, la Asociación de Criadores de Caballos Criollos no está de acuerdo con la manera que se llevará a cabo la puesta en funcionamiento de la medida para los animales de pedigree, que se encuentran debidamente registrados en un organismo público.
Según la normativa, hasta el 31 de diciembre de este año convivirán ambas reglamentaciones. Se crea un nuevo Registro de Identificación Equina que reemplazará la marca a fuego. La medida tiene un alcance a todos los equinos radicados en la provincia, sean puros de raza o mestizos.
En diálogo con LA NACION, el presidente de la entidad, Gustavo Aguerre, contó que la ley que entrará en vigencia el año que viene existe desde que Felipe Solá era gobernador de la provincia, pero que nunca se pudo poner en funcionamiento.
"No estamos en contra del documento, lo que nos pasa es que los caballos de pedigree ya se encuentran registrados. Es más, la gran mayoría tiene hecho ADN inclusive", señaló. Agregó: " Queremos que en un principio se comience con los animales mestizos sin identificación alguna que carecen de registro y no en animales registrados porque incrementan los costos y una excesiva burocracia para el criador".
Sergio Robert, subsecretario de Calidad Agroalimentaria del Ministerio de Agroindustria de la provincia, señaló que de empezar con una categoría (mestizos ) y no con otra que está registrada por una asociación sería un acto de discriminación.
"A lo que se apunta es trabajar sobre la identificación de los animales y los dueños de esos caballos. La propiedad debe ser obligatoria y se la debe poder constatar", explicó. Añadió: "Solo se reconocerán aquellos animales que se encuentren en un registro y tengan chip".
En este contexto, según comentó el dirigente de Criollos al costo del chip, que varía entre siete y doce dólares, se debe sumar el valor de aplicación del veterinario autorizado por el Senasa. A su vez, adicionar el costo del documento.
La ley indica que es el veterinario acreditado quien debe recopilar las reseñas del caballo como ser pelaje, particularidades, edad, sexo. A su vez se deben tomar dos fotografías y colocar un microchip en el cuello del animal donde se suman los datos del propietario.
Aguerre dijo que la medida representa más dificultades. "La norma solo rige para la provincia de Buenos Aires y al no haber homologación no se aplica en el resto del país. El inconveniente es que la raza criolla está por todo el país o sea que cuando se sale de la circunscripción bonaerense se debe sumar, además, una guía de traslado ", dijo.
En este sentido, Robert aclaró que ya se envió la notificación al resto de las provincias y que una vez que empiece a regir el DUE definitivamente se reconocerá al documento tal como es reconocido el sistema actual.
Por su parte, Aguerre remarcó que no existe uniformidad de criterios en los distintos municipios de la provincia a la hora de emitir la guía de traslado. "Algunos municipios desconocen que la ley de marcas y señales se prorrogó hasta fin de año y no entregan la guía para el traslado. Otros directamente lo mandan a la policía para que sean ellos los que autoricen el movimiento de animales", indicó.
Voceros de la Sociedad Rural Argentina (SRA) dijeron que como entidad que alberga a los registros genealógicos de las diferentes asociaciones de criadores organizaron una reunión en su sede con las distintas partes. "Logramos avances que quedaron plasmados en un acta. La idea es hacer confluir los intereses de los criadores y usuarios del sistema con la necesidad de la provincia de ir hacia un sistema más ordenado que contemple también la última tecnología disponible", indicaron.