Según el Sistema de Información sobre Sequías para el Sur de Sudamérica (Sissa), el 53,83% de la Argentina presenta diversos grados de afectación; hay lugares donde llovió 500 milímetros menos para la época
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En la Argentina, más de la mitad del país se encuentra en sequía y 2022 ya está entre los 18 años más secos desde 1961. Uno de los escenarios más complejos lo tiene la provincia de Buenos Aires, con casi 40% del territorio en sequía extrema. Allí en algunas localidades del norte y este llovió hasta 500 mm menos de lo normal.
De acuerdo al Sistema de Información sobre Sequías para el Sur de Sudamérica (Sissa), el 53,83% de la Argentina enfrenta diferentes grados de afectación por la falta de lluvias (más de 1,3 millones de kilómetros cuadrados). El dato es al 30 de octubre pasado.
Por categorías de análisis, el 12,88% del país está anormalmente seco. Son 322.585 kilómetros cuadrados. Después en sequía moderada se encuentra el 13,15%, con 305.272 kilómetros cuadrados. En sequía severa aparece el 12,19% del territorio, con 305.272 kilómetros cuadrados. Para el caso de la sequía extrema se consigna el 10,98% del país, con 275.162 kilómetros cuadrados. Finalmente, en la categoría de sequía excepcional se ubica el 4,63% de la superficie, esto es 116.084 kilómetros cuadrados.
En el Sissa también se puede hacer un seguimiento de la situación al interior de cada provincia, como el territorio bonaerense. Solo un 6,14% de la provincia no está seca. Luego hay un 38,35% con sequía extrema, un 24,57% en sequía severa y un 16,85% con excepcional. La sequía moderada es un 7,90% y existe un 6,20% anormalmente seco.
Por el lado de Santa Fe, la provincia no está seca solamente en un 5,32% de su territorio. Después presenta el siguiente escenario: un 19,51% con sequía extrema, un 18,44% con severa y un 29,61% moderada, entre otras categorías.
En Córdoba, en tanto, un 35,17% del territorio no está seco y luego se presentan las siguientes situaciones: 30,79% anormalmente seco, 19,87% en sequía moderada, 11,37% con sequía severa y 2,79% con sequía extrema.
En diálogo con LA NACION, Matías Reinoso, meteorólogo del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), comentó que, según el “Reporte Preliminar del Clima en Argentina 2022″, que elabora la institución, “este año ocupa el 18° lugar entre los años más secos desde 1961″. Asimismo, arrojó que se registró el segundo junio más seco desde dicho año y once localidades del centro del país “obtuvieron nuevos récords de precipitación acumulada mínima”.
Más en detalle, explicó que “entre enero y febrero prevalecieron condiciones de sequía extrema en el norte del Litoral y desde mayo se experimenta una sequía moderada a severa en el centro del país”.
“Las zonas con anomalías negativas de precipitación anual (desde enero hasta la fecha) se extienden por todo el centro y norte del país, con excepción de la provincia de Misiones (donde ya se registraron valores de precipitación acumulada de hasta 400 mm por encima del promedio anual) y también por el sur de la Patagonia”, indicó.
En rigor, según el especialista, “las áreas con el déficit más significativo son el norte y el este de la provincia de Buenos Aires, en donde llovió hasta 500 mm menos de lo normal en algunas localidades”.
También se destaca Corrientes (hasta 600 mm menos de lo normal en algunas localidades) y siguen las provincias de Entre Ríos, Santa Fe, Córdoba, San Luis, sur de La Rioja, este de Mendoza, Chaco, Santiago del Estero, Tucumán, Formosa y este de Salta (entre 300 y 400 mm menos de lo normal en algunas áreas).
“En comparación con el 2021, que también fue un año bastante seco a nivel país, el 2022 presentó un déficit de precipitación más significativo y generalizado, exceptuando solo a unas pocas provincias. Una de las diferencias más evidentes se observa en la franja central, donde en 2021 se llegaron a registrar incluso valores de precipitación acumulada levemente por encima de lo normal, como es el caso de Mendoza, La Pampa, San Luis, sur de Córdoba, centro de Santa Fe y también centro de la provincia de Buenos Aires”, alertó.
En este contexto, de acuerdo a la Oficina de Riesgo Agropecuario (ORA) de la Secretaría de Agricultura, “las reservas hídricas para lotes de maíz siguen siendo regulares a escasas en la zona núcleo pampeana y se mantienen los fuertes retrasos en el avance de siembra”.
En la provincia de Buenos Aires, en Junín, una de las zonas más afectadas por la sequía, hay un retraso de un 75% en la siembra de maíz y un avance solo del 3%. Según informaron en el INTA, en dicha área, si se compara el acumulado entre enero y octubre con el histórico (la serie 1981-2010), llovió un -38,1 menos.
En la localidad de Bolívar el retraso en la siembra del cereal con respecto a campañas anteriores es de un 57%.
“En la delegación Bragado la siembra de los maíces de septiembre se ha visto afectada por la falta de precipitaciones y por consiguiente por la sequedad de los suelos. Se han realizado en forma puntual, la siembra de maíces tempranos, aunque no supera el 10%”, indicó ORA. “En la zona de las delegaciones Pergamino y Junín la siembra del maíz se realiza muy lentamente y en los lotes bajo riego sobre todo”, agregó.
Por otro lado, en el territorio santafecino el panorama es similar. En Casilda el retraso en maíz es del 65% y en Venado Tuerto del 64%. En Córdoba, en Marcos Juárez, hay una demora del 22% y en Río Cuarto del 14%.
Por otro lado, detallaron que en el sur de Buenos Aires desaparecieron los almacenajes “algo excesivos”, siendo ahora predominantes los niveles de reserva adecuados a óptimos. También en el centro-oeste de la provincia se mantendrían sectores con reservas adecuadas. El resto del área considerada, incluyendo la zona núcleo, presentaría reservas “escasas a regulares” para lotes de maíz que se hayan llegado a implantar.
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