Hijo de Harry, el fundador de Stine Seed en los Estados Unidos, Myron Stine, que se desempeña como presidente de la compañía, posa su mirada sobre la Argentina. Dice que en soja el país no está progresando en materia de rindes y tecnología como debería, cree que falta más competencia en el mercado, considera clave que haya una nueva ley de semillas y, entre otros puntos, traza los planes en el país con la soja Enlist y los objetivos: para 2024 quiere que la firma tenga el 5% de participación de mercado en maíz y 15% en soja.
La empresa, que empezó su programa de soja en los sesenta en EE.UU, llegó a la Argentina en 2017. Esta tarde, a las 16, Myron, junto a Ignacio Rosasco, referente de la empresa para la región, estará disertando en el Congreso virtual de Aapresid.
-¿Cuál es su análisis sobre la situación de la soja en la Argentina en materia de rindes y tecnología?
-En términos de rindes y tecnología se viene progresando, pero no al ritmo que deberíamos. Hay buenos materiales en el mercado pero no hay competencia suficiente para que se avance a un ritmo mayor con variedades superadoras. Típico de un mercado monopolizado sin presión de competencia.
-¿Qué cree le falta al país en materia del cultivo?
-Ley de semillas que promueva el pago de regalías. Una vez que se avance en este aspecto, seguramente, el mercado se dinamice, entren nuevos actores, y se avance con mejor ritmo en la introducción de variedades de germoplasma mejorador. Sin la ley funcionando, hay que evaluar la manera de captar el valor de la genética en la multiplicación para uso propio, por ejemplo contrato directo con productores. Controlarlo de una manera innovadora que no genere aversión a los productores al pago de la genética.
-¿Acá se dice que los rindes están estabilizados? ¿Es bueno o señal de alerta?
-Sin ninguna duda es una señal de alerta. Esto es un indicador directo de que el avance en mejoramiento no está siendo una prioridad en el mercado. En un escenario como el actual, donde la problemática de malezas se va complejizando y se va volviendo más costoso su control, tener los rindes estabilizados significa que el margen del negocio de soja se va erosionando.
-¿Cuáles son los planes de Stine en el país?
-El plan para Stine en la Argentina es similar al que tenemos acá (EE.UU.), cumplir con nuestra promesa de otorgarle al productor variedades e híbridos de gran estabilidad y rendimiento, basándonos en los mismos valores y la misma pasión por el trabajo, los datos y la generación de nuevos materiales con innovadoras tecnologías que logren brindar nuevas herramientas sin discriminar ningún ambiente. Como bien dije unos años atrás, buscamos llegar al 2024 con un market share del 5% en maíz y un 15% en soja. Esto es en lo que estamos trabajamos día a día. Este es el objetivo de acuerdo al cual estamos formando nuestra empresa.
-¿Qué puede decir sobre la tecnología Enlist en soja y los lanzamientos de Stine?
-No veo el evento Enlist como una tecnología disruptiva para el sector, pero sí como una herramienta de suma utilidad para controlar malezas con mayor eficiencia y menor costo. Los lanzamientos de Stine plantean y pretenden dinamizar el mercado y volverlo más competitivo. Con el foco y la prioridad en el mejoramiento genético, variedades de mayor potencial de rinde que a su vez sean estables.
Temas
Otras noticias de Actualidad
Más leídas de Campo
"Restaurar la legalidad". Diputados bonaerenses buscan arrebatarle a Kicillof el manejo discrecional con un impuesto
“Hasta la puerta”. Un productor usó una imagen de Normandía para mostrar un fuerte contraste con lo que busca una provincia argentina
Sorpresa en la Fiesta del Mate. El instituto que desreguló Javier Milei se retiró de un millonario sponsoreo para “asignar prioridades”
Golosinas. El desconocido negocio de exportación que trae millones de dólares y el rubro caramelos que hace historia