La comuna de Cañada Rosquín, de 5300 habitantes y ubicada en el departamento San Martín en la provincia de Santa Fe, alcanzó la certificación de Municipio Verde y se sumó así a las ciudades cordobesas de Cosquín y Monte Buey que están en la misma condición.
El IRAM (Instituto Argentino de Normalización y Certificación) comunicó que Cañada Rosquín cumplió con todos los requisitos que establece el Sistema de Gestión bajo el esquema de la Asociación Argentina de Productores de Siembra Directa (Aapresid) que promueve la correcta aplicación de fitosanitarios en áreas periurbanas y que garantiza una producción sustentable para todos los involucrados en las comunidades.
A principio de este año, la ciudad santafesina inició su camino hacia la certificación, auditados por IRAM y certificó 3600 hectáreas de control, terrestre y aéreo. Incluye una zona rural protegida por motivos de una escuela rural.
Municipio Verde es una iniciativa de Aapresid que certifica las prácticas sustentables en la aplicación de fitosanitarios sobre las producciones periurbanas y en áreas sensibles, controlando la interacción de los distintos actores involucrados en la fiscalización, bajo un sistema de gestión de calidad.
María Eugenia Racciatti, vicepresidenta comunal de Cañada Rosquín, dijo que ser parte de Municipio Verde significa llevar tranquilidad a la población y a los productores: "Es limar los puntos en conflicto con la firme convicción de que estamos haciendo las cosas como se deben hacer.Trabajar bajo esta norma de Aapresid conlleva a la vinculación de todas las partes responsables del bien común".
Para llegar a la certificación, el municipio trabajó en mejorar los procesos que implicaban las aplicaciones del área periurbana. "A lo que ya se venía trabajando, se agregó la gestión del sistema de certificación para brindarle un marco de trazabilidad y transparencia a todos los procesos", explicaron en la entidad. "Todo queda debidamente registrado y evidenciado: recetas agronómicas, fiscalización por parte del municipio, condiciones de aplicación, responsables de la misma", agregaron.
Según dijeron, la comuna exige la utilización de maquinaria debidamente habilitada. Además controla a los operarios para que utilicen los elementos de protección correspondientes y brinda a los productores el marco general para trabajar en un sistema sustentable cuidando los recursos y las personas.
"La comunicación ha sido el eje que nos permitió llegar y, además, la voluntad política de hacerlo: comuna o municipio mancomunados con los actores del proceso. Creo que puede realizarlo cualquier localidad, la base fundamental es estar convencidos del camino. Cada municipio es un mundo por ello se deben valuar el territorio y validar las acciones, un detalle no menor para garantizar el éxito", concluyó Racciatti.
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