Aunque por ahora sin generalizarse, volvió la lluvia a la región pampeana
En las últimas horas comenzaron a registrarse lluvias en varias zonas de la provincia de Buenos Aires, aunque heterogéneas. Llegaron tímidamente por ahora a algunos sectores de Córdoba, la provincia que más sufre la falta de agua. Resta que también se produzcan sobre Santa Fe, entre otras regiones. Donde se están presentando las precipitaciones sirven para frenar pérdidas de rindes en trigo y ayudar al desarrollo del maíz sembrado.
Esta mañana, el Servicio Meteorológico Nacional emitió un comunicado diciendo que "se esperan valores de precipitación acumulada entre 60 y 80 milímetros, principalmente en el noroeste de la provincia de Buenos Aires, norte de La Pampa, sur de Córdoba y sur de San Luis, pudiendo ser superiores en forma localizada". Luego agregó que "las condiciones de inestabilidad se mantendrán al menos hasta el domingo 27, con mejoramientos temporarios".
Según algunos de los datos de precipitaciones de productores, técnicos y Zeni, ya se registraron 20 mm en América, 65 mm en 25 de Mayo, 45 mm en Pellegrini, 50 mm en 25 de Mayo, 22 mm en Carlos Casares, 36 mm en Pehuajó, 92 mm en 9 de Julio, 15 mm en Saladillo, en Buenos Aires.
"Acá nos pasó por el costado, veremos si llueve a la tarde", indicó Juan Pablo Ioele, asesor de productores en la zona de Marcos Juárez, en el sudeste cordobés.
En Córdoba, algunos primeros registros dan cuenta de 9 mm en Buchardo y 25 mm a 10 km de Villa Valeria.
Anteayer, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires calculó en 17,5 millones de toneladas su previsión de cosecha de trigo. Se trata de una merma del 6,9% versus el año pasado.
Ayer, en un informe la entidad precisó para el trigo que "en una semana la condición hídrica regular a mala aumentó 10 puntos porcentuales y la condición de cultivo de normal a excelente cayó 4 puntos". Según indicó, el 57 % del cultivo transita de encañazón en adelante.
La condición de humedad regular a sequía abarca el 60% de la superficie de trigo, concentrada sobre el margen oeste del área productiva.
"En el norte del país las expectativas a cosecha se ven cada vez más comprometidas y sin posibilidades de recuperación. No obstante, en el centro y sur de la región agrícola, si bien se esperan mermas de rinde debido al fuerte déficit hídrico, de concretarse los pronósticos de lluvia para este fin de semana se favorecería el desarrollo de las espigas, compensando parcialmente la falta de macollos en lotes tempranos y permitiendo una mejor recuperación en cuadros tardíos", apuntó.
En tanto, precisó que "al sur de la región debido a la falta de lluvias y los fuertes vientos, el cereal manifiesta signos de estrés. Sin embargo, aún no se esperan mermas importantes de rinde y, de contar con las lluvias pronosticadas, las expectativas se mantendrían estables".
LA NACION
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