El presidente recibió múltiples muestras de afecto durante una recorrida por la muestra; el planteo que le recomendaron por las retenciones
- 4 minutos de lectura'
SAN NICOLÁS.- “Te imaginás si pasa por aquí”, le dijo una señora a su acompañante mientras caminaba por la calle principal de Expoagro: por allí estaba circulando el presidente Javier Milei. Un carrito de seguridad abría paso entre la muchedumbre que buscaba expresarle su apoyo y muestras de cariño. Los visitantes esperaron cerca de dos horas, después, afuera, cuando el jefe de Estado en un auditorio le hablaba a productores y empresarios. La gente igual aplaudía como muestra de apoyo al Gobierno.
“¿Ya viene?”, preguntaban ansiosos los curiosos que habían decidido soportar el sol. “Bajanos las retenciones. ¡Vamos peluca! Olé, olé, olé”, vociferaban en tono unas 500 personas que estaban a la salida. Milei le dio la mano a los que pudo. La seguridad era estricta. La secretaria General de la presidencia, Karina Milei, había salido brevemente minutos antes del auditorio para saber cómo sería la dinámica de desplazamiento hasta el único stand que tenía previsto visitar Milei: el Ministerio de Economía en conjunto con la Secretaría de Agricultura.
“[El campo] es el sector productivo más fuerte de la Argentina, si no más productivo de todo el mundo y con la carga fiscal que tienen, que puedan seguir produciendo es fruto de un milagro, es porque son los mejores del mundo. Felicitaciones a todos, yo sé los que se encuentran en este lugar y son el corazón de la Argentina”, dijo durante su discurso en el auditorio. El presidente calificó de “héroes” a los productores.
La visita
Ataviado con su campera negra, el presidente se bajó de un carrito eléctrico en el stand oficial que también tenía un espacio dedicado al Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) y el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA). Lo esperaban el secretario de Agricultura, Fernando Vilella; el subsecretario de Fortalecimiento Productivo y Sustentable para Pequeños y Medianos Productores Agroalimentarios, Pedro Vigneau y las autoridades del Senasa y el INTA. Milei llegó junto a su hermana Karina; y el ministro del Interior, Guillermo Francos, quien estaba en la muestra desde muy temprano.
“¡Ay, regalos! Sigo recibiendo regalos”, dijo Milei mientras un grupo de expositores le entregaba pochoclos, vinos, alfajores y dulces. Karina, a su lado, también saludaba de manera amigable a los expositores que le entregaban cada uno de los productos que elaboran. Una expositora intentó colocarle un prendedor sobre la ropa. Enseguida Milei se percató del cuidado de la campera y le pidió que no lo haga. Acto seguido, se lo entregó a su hermana para que se lo “guarde”.
Tras una consulta de LA NACION sobre qué opinión tenía del sector agropecuario, respondió: “Es el motor de la Argentina; es el sector más competitivo mundialmente, y además es el mejor de mundo”.
En la selecta comitiva que había logrado entrar al stand estaba el diputado Luis Espert. “Qué ricos dulces, señor secretario”, gritó del otro lado Espert en referencia a la organización de la Secretaría de Agricultura.
Mientras los expositores le daban un apretón de mano al primer mandatario, el resto del equipo disfrutaba de los dulces de la mesa. “Fuerza, templanza”, lanzó una mujer cerca del presidente. “Estos a mí me encantan, estos me los llevo”, dijo Milei mientras tomaba unos dulces y los metía en el bolsillo de la cuidada campera negra. Los más tradicionales también le entregaron una boina para que use, aunque prefirió guardarla junto al puño de regalos de los expositores.
El secretario de Agricultura lo acompañó en todo momento mientras saludaba. Entre la gente también estaba Sebastián Alconada, director nacional de producción lechera. En medio de un saludo, Vilella le sopló al presidente: “Aumentamos el 17% la exportación de lechería en enero. En ganadería tuvimos el mejor mes en 51 años por las desregulaciones”.
“Vamos carajo”, le respondió el Presidente. Mientras escuchaba atentamente los desarrollos de otros emprendedores, saludaba a los funcionarios que se acercaban.
A la salida, Espert dijo a LA NACION que recién cuando haya una reducción del gasto público y se logre el equilibrio fiscal podría comenzar a bajar las retenciones. “El déficit cero no se negocia. Tiene que haber superávit para empezar a bajar impuestos. Por primera vez en décadas, hay un presidente y un Gobierno que tiene claro que las retenciones son un mal impuesto. Empecemos por ahí que es un avance enorme, y que no tiene que haber retenciones. Va a haber retenciones mientras el déficit no sea cero y sostenible”, afirmó.
Consultado sobre una posible reducción gradual de las retenciones, considerando, por caso, que el poroto de soja hoy paga el 33% de retenciones, dijo: “Antes de que termine el primer mandato Javier Milei va a comenzar la baja de retenciones”.
Otras noticias de Javier Milei
- 1
Nuevas tecnologías: un fondo del agro juntó US$2,8 millones e invirtió en 10 empresas
- 2
“Moderna y equilibrada”. Beneplácito en el agro de Entre Ríos por la nueva ley de aplicaciones de fitosanitarios
- 3
Opinión. Zonas de exclusión: no es el glifosato sino el asfalto el que mata la vida biológica de los suelos
- 4
Premio: un reconocido toro Angus argentino se coronó subcampeón del mundo