El Gobierno tiene bajo análisis una rebaja de retenciones de varios productos cuyos derechos de exportación aumentaron en septiembre pasado. Además, evalúa incrementar reintegros a productos que tuvieron una poda en esa ayuda.
En septiembre pasado, en medio de las necesidades de cumplir con las metas fiscales pautadas con el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Gobierno aplicó derechos de exportación de $3 y $4 pesos por dólar exportado según los productos.
El esquema, con el cual se estimó una recaudación de $280.000 millones, entre productos del campo y de otros sectores de la economía, sobrevino tras una rebaja, además, de reintegros a las exportaciones.
El trigo, el maíz, la carne y productos de economías regionales cuyas retenciones el mismo Gobierno había bajado a 0% en diciembre de 2015, cuatro días después de asumir, sufrieron la vuelta de los derechos. El trigo y el maíz quedaron con $4 por dólar, en tanto que la carne, entre otros productos, con $3 por dólar. Para el caso de la soja, quedó con una tasa fija del 18% más los $4 por dólar.
Tras la suba de los derechos de exportación, desde diversas producciones regionales hubo críticas al nuevo esquema. Productos como frutas, verduras y legumbres, además de otras producciones especiales como el maíz pisingallo (maíz para pochoclo) quedaron tributando el valor más alto del impuesto. Y llovieron las críticas sobre la pérdida de rentabilidad y la advertencia por quebrantos.
En este contexto, según pudo saber LA NACION de varias fuentes, en el Ministerio de Producción y en la cartera de Hacienda se está trabajando en la posibilidad de una rebaja de retenciones para frutas, verduras y ciertas economías regionales, como el maní, entre otras. Inclusive, no se descarta la corrección para el complejo soja. Hoy con el nuevo esquema tanto el grano de soja como sus subproductos del aceite y la harina de soja pagan $4 por dólar, pero los subproductos podrían pasar a $3 por dólar.
El dato sobre las retenciones trasciende luego de las quejas del sector privado. Por el momento, en el Gobierno no niegan la información, si bien se limitan a decir que "no hay novedades" o que se está esperando la confirmación de Hacienda sobre si se puede llevar adelante la modificación.
Desde el sector privado vienen buscando un cambio ante lo que en varios rubros consideran que las retenciones generaron un impacto fuerte y distorsiones.
En el caso del maní, que en Córdoba da empleo a 12.000 familias y genera divisas por US$1000 millones en un año con clima normal (tras la sequía de la última campaña eso ahora bajará a US$650/680 millones) se presenta una fuerte disparidad.
El maní crudo tributa $4 por dólar y la pasta de maní, el maní tostado o sin piel deben pagar $3 por dólar. Sin embargo, en la práctica termina ocurriendo que el producto con mayor valor agregado tiene que abonar más. Así, sobre un precio de US$1100 la tonelada, el maní crudo con $4 por dólar paga unos 115 dólares por tonelada de retenciones. En tanto, la pasta de maní con $3 por dólar en su caso tiene que pagar 158 dólares con un precio del producto en unos US$2000 la tonelada.
"Lo conveniente es sacar las retenciones para los productos con mayor valor agregado (como la pasta). No debería haber retenciones. En tanto, el maní crudo es algo que se descascara, selecciona y limpia y debería tener 3 pesos", señaló Eduardo Nervi, vicepresidente de la Cámara Argentina del Maní.
"Tuvimos el peor año de los últimos 32 en términos de cosecha; se cayó 33% la producción. Lo necesitamos rápido (al cambio en retenciones)", agregó el ejecutivo. Señaló que la caída en los precios internacionales más las retenciones y las altas tasas pusieron en problemas a la actividad.
"Si no es una opción eliminar todas las retenciones, que el maní crudo pase de $4 a $3 y para la pasta de maní hay que eliminar las retenciones para ser competitivos", remarcó. Alertó que el producto ya tiene que afrontar un arancel del 12% para ingresar en Europa y, encima, ahora el tributo de las retenciones le agregan una carga de más del 7% en términos porcentuales.
En el caso del complejo soja, hay expectativa de que tras la quita de un diferencial del 3% que había entre el grano y los subproductos para favorecer la industrialización ahora se beneficie el valor agregado bajando los subproductos de $4 a 3 por dólar.
"Los $3 darían un alivio. En vez de pagar 10 dólares más por tonelada exportada de harina (de soja) se pasaría a pagar solo dos dólares más, todo en relación al poroto de soja. Igualmente sería lesivo a la industrialización en el país, pero al menos reduciría bastante el castigo impositivo", opinó Gustavo Idígoras, presidente de la Cámara de la Industria Aceitera y el Centro de Exportadores de Cereales (Ciara-CEC).
Un menú en tres pasos
- Baja de retenciones: Apenas asumió, en 2015 el Gobierno bajó a 0% las retenciones a las exportaciones de trigo, maíz, carne y productos de varias economías regionales, promesa que Mauricio Macri había asumido en la campaña electoral
- La vuelta más temida: Ante las urgencias fiscales que lo obligaron a aplicar un plan de ajuste acordado con el FMI, en septiembre el Gobierno reimplantó las retenciones en aquellos sectores. El trigo y el maíz pasaron a pagar $4 por dólar exportado, y la carne, entre otros productos, tiene ahora una carga de $3 por dólar. La soja quedó con una tasa fija del 18% más $4 por dólar
- Revisión: Tras la suba de los derechos, miembros de economías regionales criticaron el nuevo esquema. Ahora, el Ministerio de Producción y Trabajo analiza reducir las retenciones a frutas, verduras y el maní, entre otros productos
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