Rumbo a las etapas clave del cultivo se recomienda un concienzudo seguimiento de los lotes para optimizar el resultado económico del negocio agrícola
- 2 minutos de lectura'
A pesar de que hace 60 días que no hay lluvias importantes y solo eventos de 10-20 milímetros, más el rocío, los trigos van evolucionando razonablemente en la zona núcleo, aunque con mucha heterogeneidad espacial. “La mayor parte de los cultivares resistieron bien las heladas y enraizaron correctamente durante junio y julio”, observa un técnico de Rufino.
Los lotes más tempranos están finalizando el macollaje y se encaminan hacia la elongación de los entrenudos, y necesitan chaparrones importantes en las próximas semanas para conservar su potencial de rinde. Hacia adelante, los productores tienen dos temas a los cuales ponerles los reflectores: por un lado, vigilar los ataques de enfermedades criptogámicas y, por el otro, completar la nutrición de los cultivos. En algunos lotes ya se ve presencia de mancha amarilla y se están dando las condiciones climáticas para el desarrollo de roya. Por lo tanto, en las próximas semanas habrá que revisar frecuentemente los lotes y actuar.
“Se ve mancha amarilla en la última hoja, sobre todo en los lotes más pobres. Presencia de roya todavía no se observa, pero hay condiciones predisponentes para que aparezca y muchas de las variedades usabas masivamente son susceptibles”, previene.
Monitoreo de cultivos
Para los tratamientos están los productos sobre la base de estrubirulina y triazol, y las carboxamidas. La revisación de los hongos tiene especial importancia en la cebada, que es atacada por la mancha en red, que también comienza a verse en algunos lotes. Se debe controlar “porque la cebada es muy sensible a la mancha en red y su ciclo corto exige que el fungicida le pavimente el camino para llegar a la cosecha con todas las hojas”, recomienda el profesional.
La otra cuestión por vigilar la nutrición del cultivo. En esta etapa se debería completar la fertilización con urea si hay humedad suficiente durante agosto. Y el segundo paso podría ser una fertilización foliar en hoja bandera, antes de floración, con aplicaciones estratégicas de nitrógeno.
En esta operación se puede aprovechar para agregar boro, que fija la floración y puede aumentar la cantidad de granos. Otra posibilidad es aplicar nitrógeno más adelante para fortalecer el llenado del grano. Todo esto se puede hacer si ocurren lluvias durante las próximas semanas, porque el trigo mantiene un valor en torno de los 220 dólares por tonelada y se necesita una buena cosecha para capturar recursos pronto.
Otras noticias de Agricultura
- 1
Primero en el mundo: un orégano con alta concentración de aceites esenciales quedó a un paso de un sello único
- 2
Se vende: un fiscal detectó irregularidades en la inminente subasta de un edificio del INTA y pide evitar “posibles hechos de corrupción administrativa”
- 3
Recuperación: las exportaciones del principal complejo argentino tocaron en volumen su nivel más alto en cinco años
- 4
¿Rosa pálido?: las demandas disruptivas en el consumo de carne vacuna que llegan al exclusivo negocio de exportar