Entre Villa Cañás y Teodelina, en el sur de Santa Fe, y en la zona de Colón, en el norte bonaerense, se concentró un fenómeno que destruyó cultivos de maíz y soja
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Luego del severo temporal de fuertes vientos, abundante caída de agua e incluso granizo en algunos lugares, que ayer fue desde María Teresa, pasando por Teodelina y Villa Cañás, en la provincia de Santa Fe, hasta Colón y aledaños, en Buenos Aires, productores y técnicos se encuentran realizando un relevamiento de daños.
“Donde pasó la piedra la mayoría de los lotes tuvieron una pérdida del 100%, ya sea en soja o maíz. Detrás de Sarasa, que es partido de Colón hasta Villa Cañás, hubo una franja que afectó un 100%”, señaló el productor Alberto Marchionni.
Marina Barletta, analista de la Bolsa de Comercio de Rosario, precisó que donde hubo daños del 100% en maíces allí seguramente los productores realizarán resiembras. En tanto, donde las pérdidas no fueron totales los dejarían en pie pero asumiendo una fuerte caída en los rindes.
“El evento más severo abarcó desde María Teresa, Teodelina, Villa Cañás y llegó hasta Colón”, dijo. Indicó que en Venado Tuerto los daños no llegaron a ser tan severos.
Guillermo Garro, consultor de Teodelina, detalló que la zona afectada tuvo su epicentro en Villa Cañás y se desplazó de oeste a este con un ancho de 15-20 km provocando daños en muchos campos. Coincidió con otros productores que afectó a Teodelina y luego entró en la provincia de Buenos Aires llegando a Sarasa.
En muchos campos de Villa Cañás hubo pérdidas totales en los cultivos de soja, que estaban en V6-V7 o comenzando florecer. Esos lotes deberán sembrarse, indicó.
En maíz, hay pérdidas totales o del 30-50% según zonas. Según precisó, la mayor parte se resembrará luego de pasar un rolo pesado o una picadora. Aún los maíces más atrasados y con menor desarrollo resultaron afectados y deberán resembrarse porque la caña se quebró y las plantas se quedaron sin vida.
En tanto, para entre Colón y Teodelina, el asesor Juan Radrizzani, ejemplificó que el viento y la piedra trillaron 950 hectáreas de 1000 sembradas en un campo. El fenómeno se repitió en otros campos de la región con maíces “pelados” y las sojas por el piso.
En este contexto, Matías Amorosi, analista de AZ- Group, evaluó que, “más allá del fenómeno negativo localizado del sur de Santa Fe-norte de Buenos Aires, se observa una buena evolución de los maíces sembrados en la zona núcleo, motorizada por las últimas lluvias, con gran parte del ciclo del cultivo realizado en buenas condiciones y con posibilidades de lograr buenos rindes”.
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