Para Alejandro “Topo” Rodríguez, “no es serio” el reciente envío de un proyecto de ley para fomentar la agroindustria mientras, a la vez, el oficialismo busca asegurarse el manejo de las retenciones hasta 2024
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Luego de que el Gobierno enviara anoche al Congreso el proyecto de ley para fomentar las inversiones en la agroindustria, el diputado nacional y presidente del Interbloque Federal, Alejandro “Topo” Rodríguez, advirtió sobre un contraste del oficialismo que, por un lado, impulsa esa iniciativa, pero que a la vez con el presupuesto nacional 2022 busca asegurarse la potestad del manejo de las retenciones hasta 2024, es decir un año incluso después de la finalización de su mandato.
La ley de fomento para las inversiones en el sector contiene diversos estímulos, como amortizaciones aceleradas, beneficios para la ganadería y un crédito fiscal para la adquisición de insumos, entre otros puntos.
“El gobierno nacional sigue sin cumplir con la devolución de retenciones a pequeños productores de soja de todo el país. Además, en el artículo 81 del proyecto de presupuesto 2022 el ministro Martín Guzmán impone aumentos de retenciones al campo hasta diciembre de 2024. En ese marco, no es serio y no es creíble que el Gobierno vaya a beneficiar al campo con desgravaciones e incentivos. Lo difunden hoy por estricto interés electoral. Hacen mal”, señaló el legislador nacional, cercano al exministro de Economía Roberto Lavagna.
Según la ley 27.541 de Solidaridad Social y Reactivación Productiva en el marco de la Emergencia Pública de 2019, con relación a las retenciones “el Poder Ejecutivo nacional podrá ejercer estas facultades hasta el 31 de diciembre de 2021″.
En tanto, para el presupuesto 2022 Guzmán busca la aprobación de este artículo: “Sustitúyese el noveno párrafo del artículo 52 de la ley N° 27.541 y su modificación por el siguiente: “El Poder Ejecutivo Nacional podrá ejercer estas facultades hasta el 31 de diciembre de 2024″.
En soja hoy las retenciones al grano están en el 33%, en tanto que se ubican en el 31% para la harina y el aceite. En trigo y maíz están en el 12% pero por ley el Gobierno tiene la potestad de un eventual incremento al 15%.
Proyecto
El diputado cercano a Lavagna consideró que “no es sano que el gobierno difunda este tipo de propuestas faltando sólo unas horas para el inicio de una veda electoral, como si no pudiera ocuparse de esto el lunes a la mañana”.
“Así, lo único que ha logrado es quitarle seriedad a la discusión, porque le pone sello proselitista”, agregó Topo Rodríguez.
En este contexto, remarcó que “la agenda del desarrollo agroindustrial argentino debería incluir también una revisión de la ley de biocombustibles que impuso el Gobierno, a contramano de la producción y de las necesidades ambientales, ya que perjudica especialmente a los productores de bioetanol de maíz de Córdoba y a los de biodiésel de Santa Fe y de la provincia de Buenos Aires”.
“Si el ministro de Economía le pone la firma a desgravaciones para el campo, entonces debería borrar ya mismo del presupuesto 2022 el aumento de retenciones al campo hasta diciembre de 2024, que también lleva su firma”, remarcó Topo Rodríguez.
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