La Federación Argentina de la Industria Molinera (FAIM) dijo que “cada empresario molinero” decidirá si participa o no de una compensación creada por la Secretaría de Comercio Interior; rechazo de la Cámara de Industriales Molineros (CIM) y de las pymes del sector
- 4 minutos de lectura'
Luego de que las pymes molineras dijeran ayer que no formarán parte del fondo para el trigo creado por la Secretaría de Comercio Interior, que conduce Roberto Feletti, para compensar la harina que llega a las panaderías, la Federación Argentina de la Industria Molinera (FAIM) señaló que queda “sujeta la decisión de participar o no a cada empresario molinero”. También presentó reparos la Cámara de Industriales Molineros (CIM).
La entidad deslizó que la herramienta creada no es útil para combatir la inflación. “Estamos convencidos que este no es un instrumento que combata esta problemática, por ello hemos presentado oportunamente distintas alternativas en búsqueda de una herramienta que se aplique como política pública que asegure el objeto final que se plantea en este modelo”, dijo la entidad.
FAIM señaló que reconoce “la gravedad de los fenómenos inflacionarios ya transitados en diversas etapas de la historia económica argentina, que golpean el poder adquisitivo de la sociedad afectando de manera más profunda a las familias vulnerables vía el precio del pan”.
“El fideicomiso [creado con la suba del 31 al 33 a la harina y el aceite de soja para recaudar 370 a US$400 millones] pretende estabilizar el valor del trigo debido a factores externos que aumentaron significativamente su precio, procurando evitar que se trasladen estos aumentos a la harina de trigo, a todas sus variedades y derivados”, dijo. Agregó: “El sistema no favorece ni perjudica a ninguna empresa en particular, puesto que las bondades y defectos del sistema aplican para todos los participantes de manera equitativa y proporcional a la molienda de cada uno; no obstante, las empresas observan con temor el funcionamiento del mismo dado las experiencias negativas con modelos que proponían soluciones similares”.
En este contexto, señaló que “la mayoría de las empresas nucleadas en esta federación ratifican su negativa a este fideicomiso e instalan la necesidad de abordar modelos alternativos de solución y dejan sujeta la decisión de participar o no a cada empresario molinero”.
Quejas
Ayer, la Asociación de Pequeñas y Medianas Industrias Molineras de la República Argentina, que agrupa a 38 firmas, rechazó el mecanismo y dijo que no participará.
“Los mecanismos de reintegros y los requisitos exigidos para participar del fideicomiso que se pretende son de imposible cumplimiento para las pymes. El régimen nuevamente propone vender la harina a precio subsidiado (por debajo del costo de fabricación), para luego recibir una compensación por parte del Estado sin considerar que el trigo es la variable con mayor riesgo de predictibilidad en el mundo de hoy”, señaló.
“Ninguna pyme puede vender por debajo de sus costos de producción y aguardar el pago incierto de los desembolsos”, agregó la cámara.
En tanto, la Cámara de Industriales Molineros (CIM) dijo que “el mecanismo decidido por el gobierno nacional no habrá de conducir a obtener los resultados para el cual ha sido diseñado”.
“Si bien el sistema ha sido diseñado de manera igualitaria para todas las empresas, no resulta indiferente para nuestro sector la inseguridad jurídica que acarrean la falta de precisiones sobre qué ocurrirá con la molienda de aquellos molinos que decidan no entrar al sistema, así como el hecho de que la potestad final de pagar o no el subsidio, y la oportunidad para hacerlo, dependerá solamente de la Secretaría de Comercio Interior. Ella deberá encarar la enorme e inquietante tarea de administrar la escasez de recursos frente al extraordinario volumen de dinero necesario, dinero a ser aportado por las arcas de un Estado con severas restricciones presupuestarias y que solo estaría en condiciones de recaudar alrededor de 400 millones de dólares, de acuerdo a las previsiones actuales”, apuntó.
Agregó: “El camino para lograr el abastecimiento de productos panificados a un precio asequible para la población vulnerable no resulta a nuestro criterio compatible con la reglamentación aludida. En razón de ello, y luego de analizada la misma, la molinería nucleada en nuestra institución expresó mayoritariamente que no está en condiciones de adherir al Fideicomiso propuesto”.
LA NACIONOtras noticias de Comunidad de Negocios
Más leídas de Campo
Premio. Las fotos de una noche de gran reconocimiento para los hacedores del agro
Opinión. Con los derechos de exportación se incumplen los principios constitucionales
Advertencia. El CEO de una cadena francesa de supermercados no quiere comprar carne del Mercosur
Excelencia Agropecuaria. A pura emoción, se consagraron los mejores del campo en 2024