El clima dio un giro inesperado y temen un “gran golpe” en la principal región agrícola

En medio de las altas temperaturas de los últimos días, con un efecto que se potenció por la ausencia de nuevas lluvias, la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) alertó que en la zona agrícola núcleo, la más productiva del país y que comprende el sur de Santa Fe, el sudeste de Córdoba y el norte bonaerense, “hay un 25% del maíz regular a malo y un 15% de la soja de primera regular”. La BCR teme que por el cambio de escenario, ya que la campaña en general venía bien, se esté “ante las puertas de un gran golpe productivo en la región”.

Según la entidad, ya se necesitan al menos 50 mm para revertir una situación crítica donde el maíz de siembras tempranas -septiembre- se ve afectado porque el 75% de los suelos presenta escasez de agua y sequía. En rigor, ya hay lotes de maíz con pérdidas del 20 al 25% en el rendimiento.

El panorama no luce muy alentador en lo inmediato. Si bien para los próximos días se aguardan precipitaciones, serían insuficientes.

“La región debería recibir 45 a 75 mm según la estadística de los últimos 30 años analizando el periodo del 27/12 al 10/1 y no los 5 a 15 mm que se proyectan”, advirtió la entidad en un informe sobre el estado de los cultivos.

José Luis Aiello, un experto citado por la entidad, precisó: “Los próximos diez días no aportarán una oferta de agua que satisfaga los requerimientos de la región núcleo. El primer día del 2022 aumentarán las condiciones de inestabilidad y pueden desarrollarse algunos fenómenos menores pero muy puntuales y poco generalizados en cobertura y volumen”.

En materia de afectación, la entidad detalló que “en casi una semana se pasó a tener un 25% de lotes de maíz regulares a malos”.

En este contexto, indicó que 330.000 hectáreas pasaron a estado regular y 50.000 hectáreas se encuentran en malas condiciones. “Lo que llama la atención es que el cambio de condición se produjo de una manera drástica, ya que hace dos semanas todos los cuadros de maíz estaban entre buenas a muy buenas condiciones”, evaluó.

Los maíces que se hicieron entre fin de agosto y el 15 de septiembre pueden llegar a rendir de 80 a 90 quintales por hectárea cuando el año pasado rondaron los 130 quintales. En tanto, para los maíces sembrados en octubre ya estiman rindes de 60 a 80 quintales por hectárea.

Solo para mencionar uno de los tantos lugares, en Cañada de Gómez maíces que estaban para dar 100 quintales por hectárea ahora rendirían 60 quintales.

“Altísimas temperaturas, sin lluvias a la vista y reservas hídricas agotándose; el efecto de este combo letal saltó a la vista en los últimos días. El cultivo que más preocupa ahora es el maíz. El 75% de los suelos de la región núcleo ya está en condiciones de escasez de agua y sequía y el cultivo atraviesa su período crítico”, advirtió.

Según indicó la BCR, el único sector de la región con condiciones de humedad “adecuadas” para atravesar el periodo crítico es el suroeste, “en la intersección de las provincias de Córdoba, Santa Fe y Buenos Aires”.

En cuanto a la soja, el 15% del cultivo de primera (siembra de octubre) en la región está regular. Explicó que “son los lotes sembrados más tarde o los cultivados en suelos de inferior calidad o los más enmalezados”. Respecto del desarrollo, la mayoría de los lotes de la región núcleo se encuentran en floración mientras algunos ya comienzan a formar chauchas.

En tanto, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires señaló en un reporte semanal que “gran parte de los cuadros de maíz temprano, sembrados en el centro del área agrícola, se encuentran transitando el período de definición de rendimiento”.

“A la fecha, se relevan signos de estrés hídrico, como acartuchamiento y amarillentamiento prematuro de las hojas basales, en los lotes con reservas hídricas más ajustadas. Son necesarias nuevas lluvias durante las próximas semanas para atenuar el impacto que podría tener esta situación sobre los rindes potenciales del cultivo”.

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