Acsoja consideró que es “imprescindible” una reducción de cara a la próxima campaña por las pérdidas que ocasionará la sequía y para que el cultivo pueda crecer
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La Asociación de la Cadena de la Soja (Acsoja) le pidió al Gobierno una “modificación” de las retenciones para el cultivo de cara a la próxima campaña agrícola, caso contrario, advirtió que el grano irá a una “crisis terminal”. La cadena de la oleaginosa es la principal aportante de divisas por exportaciones del país: en el ciclo 2021/2022 trajo más de US$25.000 millones.
Según el último informe de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), la cosecha de soja se ubicará en 34,5 millones de toneladas, una merma de 14,5 millones de toneladas versus los 49 millones de toneladas que se aguardaban en diciembre último. Además, se trata de una retracción del 18% respecto del volumen recolectado el año pasado. Todo es causa de la sequía.
Para tener una dimensión del impacto de la falta de precipitaciones, el volumen previsto por la entidad se trata del segundo peor registro en los últimos 15 años. La cosecha estimada es apenas superior a los 31,8 millones de toneladas de 2008/2009, un año también de fuerte golpe del clima.
“Un tema que no podía quedar fuera de la mesa son los derechos de exportación. Haciendo énfasis en su imprescindible modificación, ya que de lo contrario iremos camino a una crisis terminal para el cultivo de soja. Una modificación de estos derechos sería una ayuda fundamental de cara a la próxima campaña de fina y gruesa para poder afrontarlas con algo de capital”, señaló Acsoja en un comunicado.
En rigor, Luis Zubizarreta, presidente de la entidad, y Rodolfo Rossi, expresidente, fueron a ver al secretario de Agricultura, Juan José Bahillo, y a su segundo, Delfo Buchaillot, para hablar de esta situación. “Durante la reunión se planteó, entre otros, la enorme preocupación por la sequía catastrófica que está atravesando la producción argentina, la peor de los últimos 60 años que dejará la producción de soja más baja de las últimas 14 campañas, según datos recientes de la Bolsa de Comercio de Rosario. La cadena necesita un cambio de rumbo de las políticas que le permitan volver a crecer. Destacamos las pérdidas a nivel productor, exportaciones y las repercusiones que tiene y tendrá para el estado en términos de recaudación”.
Más allá del impacto de la sequía, el cultivo de soja se encuentra estancado en el país. Entre otros factores, la cuestión de las retenciones, hoy en el 33%, afectan su expansión. Sin retenciones y con estímulo a la actividad, Brasil, que en algún momento supo estar solo 20 millones de toneladas arriba de la Argentina, ahora aguarda un récord superior a los 150 millones de toneladas.
En el encuentro con Bahillo la cadena también dejó otras preocupaciones. “Los créditos blandos y escasos son insuficientes”, indicó. “A ello se suma el atraso en el SIRA para importar insumos ya críticos, como algunas de las tantas vicisitudes que desafían hoy al productor”.
En este contexto, en medio también de rumores sobre un eventual dólar soja III, que se aplicaría para acelerar el ingreso de dólares para el Banco Central (BCRA) una vez que se realice la cosecha, en mayo próximo, la entidad dijo que “reiteró su rechazo al dólar soja y a una posible III edición ya que este tipo de medidas coyunturales y distorsivas no suman soluciones”. Acsoja reclamó: “Es necesario un tipo de cambio real y una carga fiscal en consonancia con el resto de la economía”.
Impacto
Ayer, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, que en su caso aguarda una cosecha de 38 millones de toneladas de la oleaginosa, por debajo de los 41 millones de toneladas de previsión de enero último, indicó otros números negativos sobre la performance del cultivo en medio de la sequía.
Versus la campaña anterior, el Producto Bruto Sojero bajará de US$22.634 millones a 16.862 millones de dólares. Además, las exportaciones se reducirán de US$25.017 millones a 20.501 millones de dólares.
El Estado también se verá afectado. En rigor, versus ingresos fiscales por US$10.315 millones en 2022, en 2023 recaudaría US$8039 millones.
Al referirse al impacto de la sequía, afirmó: “Mermas esperadas de entre un 30 y un 40% sobre los núcleos sojeros del centro del área agrícola reducen nuestra proyección de producción a 38 millones de toneladas, 3 millones por debajo a nuestra previa estimación, reflejando una caída de 10 millones de toneladas con respecto a nuestra proyección inicial de lanzamiento”.
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