Brasil cambia de libreto para atraer la inversión de corto plazo
RIO DE JANEIRO—Tras pasar años desalentando las inversiones de corto plazo en busca de altos retornos, Brasil está tomando medidas para atraerlas.
Pero muchos inversionistas no mordieron el anzuelo, lo que pone de relieve los desafíos que afrontan la sexta economía del mundo y las autoridades que tienen la tarea de contener la inflación, pese a la desaceleración del crecimiento.
Un día después de que el gobierno anunciara inesperadamente la eliminación del Impuesto Sobre Operaciones Financieras (IOF) aplicado a la compra de bonos con fondos extranjeros, el real se acercó a un mínimo de cuatro años. El impuesto fue implementado en octubre de 2010 para combatir los miles de millones de dólares que estaban inundando el sistema financiero y causando el fortalecimiento de la moneda, una situación que socavó la competitividad de las exportaciones del país.
La eliminación del impuesto inicialmente impulsó el real, el miércoles por la mañana, pero la cotización no tardó en precipitarse tan rápido que el Banco Central de Brasil tuvo que intervenir para apuntalarla. En horas de la tarde en Nueva York, cayó a 2,1277 por dólar, comparado con 2,1250 el martes.
El volátil comportamiento de la divisa el miércoles es la señal más reciente de que el gobierno y el banco central del país se están dando cuenta de que las herramientas habituales a su disposición no están estabilizando los mercados financieros. El real acumula un declive de 4% desde principios de la semana pasada, a pesar de que el banco central elevó las tasas de interés en medio punto porcentual e intervino en dos ocasiones en el mercado cambiario
El miércoles, el ministro de Hacienda de Brasil, Guido Mantega, calificó la eliminación del IOF como "una medida a largo plazo" que no tenía el propósito de apuntalar el real.
El gobierno ha gravado una lista de transacciones financieras desde octubre de 2010 que van desde compras en el exterior con tarjeta de crédito a préstamos internacionales. En cada uno de estos casos, el objetivo era evitar una apreciación indeseada del real, frenando el ingreso de capital foráneo.
Últimamente, sin embargo, Brasil ha estado sufriendo el problema opuesto. Los inversionistas han retirado US$916 millones este año, hasta el 29 de mayo, de fondos dedicados principalmente a comprar bonos brasileños, en comparación con la salida de casi US$20 millones durante el mismo período del año pasado. Los retiros podrían acelerarse si la Reserva Federal de Estados Unidos restringe la política monetaria este año, apuntan los analistas.
Las salidas de capital han golpeado al real. Recientemente, la debilidad de la moneda ha frustrado los esfuerzos del banco central para contener la inflación, que, en un nivel de 6,5%, está en el extremo alto de lo que la entidad estaría dispuesta a tolerar.
No obstante, la eliminación del IOF podría alentar la venta de bonos en el corto plazo, según algunos inversionistas. Han crecido los temores de que los altos rendimientos de Brasil no sean suficientes para compensar una rápida depreciación del real, un deterioro de los flujos comerciales y una inflación obstinadamente alta.
Aun así, hasta ahora, algunos inversionistas se han mostrado reacios a vender, ya que habrían tenido que pagar una sobretasa de 6% para volver a invertir en caso de que las condiciones mejoraran.
Eliminar el impuesto "no va a cambiar las cosas drásticamente de aquí en adelante", pronosticó Naveen Kunam, gestor de portafolio de ING Investment Management, que administra US$179.000 millones en activos. La firma posee bonos brasileños denominados en reales, pero ha empezado a reducir su exposición.
La economía brasileña se expandió apenas 0,9% en 2012 y los economistas prevén un crecimiento de 2,5% para este año. Al mismo tiempo, Brasil también sufre un nuevo brote inflacionario.
El gobierno apuesta a que los inversionistas "correrán el riesgo de invertir en Brasil en busca de mejores retornos", dejando de lado las preocupaciones sobre la debilidad de la economía para aprovecharse de mayores ganancias que las que ofrecen inversiones similares en otros mercados emergentes, como Chile, México y Turquía, dijo Durval Correa, un operador de la firma de corretaje de São Paulo MultiMoney.
—Tom Murphy, Erin McCarthy y Prabha Natarajan contribuyeron a este artículo.