Bonos, acciones o bitcoin: cuál fue la inversión ganadora de 2024 y cuánto obtuvieron quienes destinaron US$1000

Fue un año “excepcional” para las inversiones, según describen los analistas. Entre las elecciones de Estados Unidos, el recorte de las tasas de interés a nivel global y la consolidación fiscal en la Argentina, en 2024 los bonos soberanos duplicaron su precio en dólares, las acciones argentinas acumularon alzas de más de 280% y el bitcoin superó por primera vez la barrera de US$100.000.

Sin embargo, hubo algunas inversiones que se destacaron más que otras. Para contrastar, se puede hacer el ejercicio de qué pasó con aquellos inversores que compraron US$1000 a finales de diciembre del año pasado y lo guardaron debajo del colchón, versus aquellos que decidieron meterse en el mercado de capitales.

Las acciones argentinas fueron una de las mejores inversiones de este año, sobre todo los papeles bancarios. Por ejemplo, comprar un papel del Banco Supervielle en la Bolsa de Nueva York (ADR) costaba US$4,06 un año atrás, mientras que hoy cotiza a US$15,71. Es decir, aquel inversor que puso US$1000 en esta inversión hace 12 meses, actualmente vería en su portafolio US$3869 (+286,9%). Casi que cuadriplicó su capital inicial.

En cambio, si ese mismo ahorrista volcó los US$1000 en Grupo Financiero Galicia, actualmente cuenta con US$3732 (+273,2%). Algo parecido pasó con aquellos que se inclinaron por BBVA, quienes tendrían un total de US$3535 en cuenta (+253,5%) o Banco Macro, con US$3474 (+247,4%).

También le fue bien a quienes invirtieron por el sector energético, sobre todo en YPF, ya que tendría en cartera US$2492 (+149,2%); o con Edenor, US$2369 (+136,9%).

“El sector bancario fue la estrella del año. Vino de la mano de reformas estructurales impulsadas por el Gobierno y un proceso de inflación decreciente que atrajo inversores locales y extranjeros. Algunos bancos internacionales, como el Morgan Stanley, también presentaron informes de recomendación de compra, lo que ayudó a impulsar los precios”, señaló Fernando Rama, asesor de finanzas personales de Quicktrade SBS.

Los bonos soberanos de deuda también tuvieron un año de grandes subas. Por ejemplo, el título Bonar con vencimiento en 2029 (AL29D) pasó de valer US$38,3 el 29 de diciembre del año pasado, a los US$81,46 actuales. En este caso, el inversor que decidió poner US$1000 en bonos soberanos un año atrás, hoy tiene unos US$2126 en su cuenta comitente (+112,6%).

“En lo que respecta a los activos de renta fija, cerramos el año 2024 con rendimientos impensados un año atrás. Todos los bonos soberanos tuvieron rendimientos superiores al 80%, con los vencimientos en 2029 y 2030 con un retorno directo de más del 90%, lo mismo el 2035. Fue un año de transición, en el que las variables macroeconómicas tornaron su rumbo con respecto a 2023. La inflación bajó hasta niveles cercanos al 2% mensual, la actividad empezó a mostrar algunos síntomas de recuperación (luego de la recesión del primer semestre) y el Gobierno realizó un ajuste fiscal de más de cinco puntos del PBI”, explicó Maximiliano Donzelli, head de Estrategias de Inversión de IOL Inversiones.

Inversiones internacionales

No solo a las inversiones argentinas les fue bien este año. Por ejemplo, el bitcoin volvió a tener la atención de los inversores, luego de que en noviembre superara por primera vez en su historia la barrera de los US$100.000. Aunque hoy cotiza un poco más abajo, en US$98.538, aquellos que decidieron meterse en el mundo de las criptomonedas y pusieron US$1000 en bitcoin en diciembre del año pasado (cuando costaba US$42.291), hoy tienen en su billetera digital unos US$2329 (+132,9%).

“Más allá de dónde vaya a estabilizar su precio el bitcoin en los próximos meses, el hecho de que haya roto la barrera psicológica de los US$100.000 y llegado a las seis cifras marca un cambio de época definitivo”, consideró Sebastián Serrano, CEO y cofundador de Ripio. En ese sentido, mencionó que este año las criptomonedas se vieron impulsadas por varios factores, entre ellas el halving, la aprobación de que haya fondos cotizados de cripto en la Bolsa y la victoria de Donald Trump en Estados Unidos.

Los principales índices de Estados Unidos también tuvieron buenos retornos. Por ejemplo, aquellos inversores que decidieron poner US$1000 en el S&P500 (índice que reúne a las 500 compañías más importantes de Estados Unidos), hoy cuentan con un portafolio de US$1261 (+26,1%). Esta cifra es un poco más alta para quienes se volcaron por el índice tecnológico Nasdaq, ya que tendrían US$1290 (29%).

Para Donzelli, el mercado estadounidense se vio favorecido por las expectativas de un “aterrizaje suave” de la economía tras la política monetaria restrictiva de la Reserva Federal de Estados Unidos, la desaceleración de la inflación (y la consecuente baja de tasas de interés), y “cierto optimismo” sobre la nueva administración de Trump. “Su regreso a la presidencia generó un impulso alcista en algunos sectores del mercado, especialmente en aquellos que se esperaban beneficiarse de sus políticas, como la economía doméstica, el sector industrial y el financiero”, completó.

Para los inversores más conservadores, que decidieron quedarse posicionados en oro, la ganancia que tuvieron este año fue del 27,79% en moneda dura. En diciembre del año pasado, una onza costaba US$2064,40, mientras que hoy cotiza en zona de máximos históricos a US$2635. Visto de otra manera: quien invirtió US$1000 un año atrás en el metal precioso, actualmente tendría en cartera unos US$1277.

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