Arranca mañana: las claves del nuevo blanqueo y las diferencias con el de Macri

Luego de la reglamentación del Poder Ejecutivo del proyecto de ley de Medidas Fiscales Paliativas y Relevantes, la AFIP hizo lo propio hoy con el procedimiento para adherir al Régimen de Regularización de Activos, más conocido como blanqueo.

El Gobierno busca con esta herramienta aumentar la recaudación y sumar reservas al Banco Central (BCRA). Estimaciones privadas señalan que podrían ingresar US$2000 millones al fisco, que se verían reflejados mayoritariamente en la recaudación de agosto, aunque en el Gobierno evitaron hacer proyecciones.

A diferencia del blanqueo que lanzó el gobierno de Mauricio Macri, en 2016, el monto desde el que se puede regularizar sin pagar impuestos es mayor, de US$100.000, mientras que el anterior estaba en torno a los US$23.000 ($350.000 a un tipo de cambio oficial que cotizaba cerca de $15).

De hecho, si se regulariza dinero en efectivo y se lo deja en el sistema financiero hasta el 31 de diciembre de 2025, no se paga ninguna multa. La fecha límite para regularizar dinero es el 30 de septiembre. Otra opción es invertir ese efectivo en algunas de las colocaciones autorizadas por el Ministerio de Economía, que se detallarán en los próximos días.

Según fuentes oficiales, se incluirá dentro de las inversiones autorizadas para hacer sin pagar el tributo la mayoría de los activos financieros trazables, como emisiones de bonos del Tesoro, provinciales y municipales, y de obligaciones negociables (ON). Además, en el Ministerio de Economía evalúan incluir inversiones en desarrollos inmobiliarios, como por ejemplo, en fondos de pozo hasta un límite máximo de avance de obra.

“El objetivo es que haya reinversión en el sector productivo. Se podrá invertir parcial o totalmente lo regularizado, siempre y cuando se mantenga una trazabilidad”, dijeron.

Para el resto de los activos que se quieran regularizar, el Gobierno estableció tres alícuotas de pago sobre el excedente de los US$100.000, que irán aumentando a medida que se tarde más tiempo en adherir al régimen.

La primera etapa arranca desde las cero horas de mañana hasta el 30 de septiembre próximo y se abona una alícuota del 5% sobre el excedente de US$100.000. La segunda es hasta el 31 de diciembre próximo y la alícuota es del 10%, mientras la tercera es hasta el 31 de marzo de 2025 y la alícuota asciende al 15%. El Poder Ejecutivo, sin embargo, está habilitado a poder extenderlo hasta el 31 de julio de ese año, de ser necesario.

“Este blanqueo es más barato que el que lanzó Macri, que tenía dos etapas. En la primera se cobraba una alícuota del 10%, que era desde su vigencia hasta diciembre de 2016, y superado ese plazo, aumentaba a 15%. En este blanqueo hay tres etapas, con la alícuota que arranca en 5%”, dijo César Litvin, CEO de Lisicki Litvin & Asociados.

A diferencia del blanqueo de 2016, ahora el pago del impuesto, de corresponder, se hace en dólares, al tipo de cambio oficial comprador del Banco Nación ($902). El tipo de cambio de regularización de activos es $1000; es decir, el que se usará para valuar la base imponible, que quedará fijo hasta el fin del régimen. En el blanqueo de 2016 se regularizaron US$116.800 millones.

Para los contribuyentes que regularicen efectivo en el exterior, no hay obligación de traerlo al país. Si se trae y se deja inmovilizado hasta el 31 de diciembre de 2025 o invertido en algunos de los instrumentos que determina el Poder Ejecutivo, no se paga el impuesto.

La fecha de corte para los activos que se pueden regularizar es el 31 de diciembre pasado, cuando se diseñó el proyecto. “Esta es una diferencia con el blanqueo de Macri, que tenía como fecha de vigencia del corte de los activos la promulgación de la ley, que fue el 22 de julio de 2016. En este régimen establecieron como corte el 31 de diciembre de 2023. Por lo tanto, el que compró un bien entre enero y julio, si lo compró con dinero no declarado, no lo puede regularizar”, dice Litvin, quien señaló que ya recibieron varias consultas para ingresar en el régimen.

“Tiene que ver mucho con el intercambio de información con Estados Unidos [acuerdo Facta], que está vigente desde el 1 de septiembre de 2023. El primer reporte que llegará de manera automática a la AFIP va a ser en septiembre próximo. Quedaron alineados los planetas, porque los que tiene cuentas no declaradas en Estados Unidos y las tienen que informar, tienen la posibilidad de regularizarlas a un bajo costo”, agregó.

El acuerdo Fatca entre la Argentina y Estados Unidos se firmó en diciembre de 2022 y, desde entonces, la AFIP trabaja para hacer efectivo el primer intercambio de información, que se hará de manera anual cada septiembre.

Además del blanqueo, el Gobierno también impulsó un programa para adelantar el pago de una vez de los próximos cinco años de Bienes Personales con un alícuota de 0,45%, y la posibilidad de no tener que presentar declaración jurada durante ese plazo. Esto incluye el pago de 2023, con la foto de los activos de ese año. También se unifica la alícuota para los bienes en el exterior con los que están en el país.

Para los que ingresan a la regularización de activos y deciden adelantar el pago del tributo, deben pagar cuatro años, ya que el de 2023 queda incluido con el blanqueo. La alícuota, sin embargo, es levemente mayor, de 0,5%.

El impuesto a los Bienes Personales correspondiente a 2023 alcanza a quienes tuvieron al 31 de diciembre último activos gravados por un valor de más de $100 millones, en tanto que la vivienda está exenta hasta los $350 millones (no se consideran los precios de mercado, sino las valuaciones según normas que rigen para este tributo).

“No es un simple formulario el que hay que llenar, ya que es una reflexión que tiene que hacer el contribuyente para la planificación financiera, impositiva y familiar, porque se puede armar una estrategia para pagar también Bienes Personales”, dice Litvin.

En la ley que aprobó el Congreso también se incluyó una nueva moratoria impositiva, que será la quinta en 15 años; es decir, una cada tres años. Cada moratoria permite la condonación de intereses y multas. Por ejemplo, podrán ingresar aquellos contribuyentes que adeudan el pago del impuesto Solidario, que diseñó el gobierno anterior durante la pandemia.

“Hay muchas moratorias porque hay mucha presión fiscal, porque hay mucha informalidad. En la medida que mejore el sistema tributario o baje la presión fiscal, va a ser innecesario tener tantas moratorias seguidas”, dijo Litvin.

El próximo mes se espera que aumente fuertemente la recaudación del Estado, porque se programaron los vencimientos de Ganancias y Bienes Personales para agosto, que incluye el pago adelantado de los próximos cinco años, además del blanqueo y la moratoria.

“Queremos reconquistar a los contribuyentes que entraron en el blanqueo anterior y después se fueron a vivir al exterior. El país ahora cambió y queremos que vuelvan”, dijeron fuentes oficiales, con relación a los empresarios que viven en Uruguay, como Marcos Galperin, fundador de Mercado Libre, y los artistas, como Susana Giménez.

También aseguraron que invirtieron en mejorar la seguridad del sistema de la AFIP. Buscan que no ocurra como sucedió durante el blanqueo de Macri, cuando se filtró una lista de 500 empresarios que ingresaron en el régimen. “Estamos trabajando desde el inicio de la gestión en la seguridad de los datos”, dijeron.

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