Banquera francesa. Tiene 90 años y eligió empezar de nuevo en el campo argentino
En el salón del living hay una computadora abierta sobre un escritorio lustroso, un diario LA NACION y un jarrón con flores. Detrás de la pantalla, una mujer se levanta y su pequeña figura se recorta contra el ventanal que da a la plaza Vicente López, en el corazón del barrio porteño de Recoleta. Es Gilberte Beaux que, como todos los días desde hace más de 70 años, está trabajando. "Estaba en una conferencia con toda mi gente. Nos vemos una vez por semana para que cada uno sepa lo que está haciendo el otro", dice Beaux, que después de haber presidido bancos, petroleras y hasta haber liderado el directorio de la firma alemana Adidas decidió abocarse ahora, a los 90 años, a la administración de sus estancias en la Argentina.
"Nada en mi entorno familiar me destinaba a la vida llena de aventuras que tuve", dice Beaux en el libro Una mujer libre, que escribió hace diez años y fue publicado en español recientemente por Ediciones del Zorzal. Nació en París, en 1929: el año de la Gran Depresión. Perdió a su padre a los nueve años y le tocó atravesar la escasez de la Segunda Guerra Mundial junto a su mamá y su hermano menor. "Es algo que quien no lo vivió ni siquiera puede imaginar", asegura ahora en su departamento de Buenos Aires, donde está de paso para presentar el libro e ir al dentista. Mañana volverá a su estancia en Corrientes.
A los 17 años, decidió que tenía que hacerse cargo de la situación y, si bien soñaba con convertirse en profesora de latín y griego, abandonó los estudios para empezar a trabajar. Hizo un curso y en el verano de 1946 fue tomada como estenotipista en el banco Seligman y Cía. Una década después, a los 27 años, Gilberte Beaux era directora del banco Compagnie Financière de París, del grupo Simca-Fiat. "Fue un verdadero desafío en un grupo donde las mujeres no éramos en absoluto bienvenidas", recuerda la mujer que declara haber trabajado siempre 60 horas por semana y tomado muy pocas vacaciones. Según dice, el motor de su energía fue el "amor al trabajo", que define como su "verdadera libertad".
A los 30 años fue enviada como jefa de una misión del grupo Simca-Fiat a Latinoamérica y conoció la Argentina por primera vez. Cuando en 1962 Chrysler tomó control de Simca, Beaux dejó su cargo y se sumó al holding Union Financière de París (UFP), donde administró el dinero de muchas empresas del grupo. Durante una de las operaciones conoció al multimillonario y político franco-británico Jimmy Goldsmith, que le ofreció trabajo y se convirtió en su "pareja de negocios" durante veinte años.
Entre las muchas operaciones que hicieron juntos, adquirieron el grupo inglés de alimentos Bovril, que tenía estancias y frigoríficos en la Argentina e incluso dio nombre a una localidad entrerriana. Durante sus visitas, la extensión de los campos enamoró a su marido, Édouard, que era hijo de rusos y encontró en los paisajes argentinos la amplitud de la tierra de sus ancestros.
Beaux también fundó el banco Banque Occidentale pour l’Industrie et le Commerce (BOIC), fue accionista y presidente del directorio de la compañía petrolera Basic. Además, incursionó en la política acompañando en su campaña al primer ministro francés de centroderecha Raymond Barre.
Ahora, Beaux elige estar de julio a noviembre en la Argentina, donde es dueña desde los años 80 de Rincón de Corrientes S.A., un grupo de explotación agrícola-ganadera que tiene 58.000 hectáreas en la provincia de Corrientes y casi 3300 en la provincia de Buenos Aires, cerca de la localidad de América. Entre ambos campos tiene 75 empleados con sus familias y año a año se esfuerza por modernizar la producción. "Tenemos manejo holístico y ahora estamos viendo la posibilidad de usar drones para monitorear las vacas", cuenta.
Ella comanda las operaciones y pasa la mayor parte del tiempo en Corrientes, donde recibe frecuentemente la visita de su única hija, Nathalie, que es egiptóloga, y sus dos nietos. "Yo quiero mucho a la Argentina. La gente tienen cualidades fantásticas y el país tiene una diversidad muy grande. Pero yo he visto también el tiempo de los coroneles, el tiempo peronista, el tiempo no peronista y es una lástima que hasta ahora no hayamos encontrado un gobierno que pueda manejarla bien", dice la mujer, para quien "la Argentina se puede convertir de nuevo en un país que tenga su importancia en el mundo".
Otras noticias de Qué pasa en los negocios
- 1
Ganancias: cuántos empleados y jubilados pagan ahora el impuesto y qué pasará en 2025
- 2
Supuesto ocultamiento de datos: la CNV denunció penalmente a la empresa Surcos que, además, afronta un millonario embargo
- 3
Plazo fijo: cuál es la tasa de interés banco por banco este jueves 26 de diciembre
- 4
El sindicato de Flybondi reclama mejores condiciones laborales ante la llegada de tripulaciones extranjeras