Argentinos exitosos afuera: se van a Europa, consiguen trabajo en menos de tres meses y cobran hasta 4000 euros
Aunque les iba bien económicamente en el país decidieron emigrar para tener otras garantías; además, se encontraron con más facilidades de las que esperaban
- 7 minutos de lectura'
Esteban Cervi aterrizó hace tres meses en Madrid, junto a su pareja e hija de un año y medio, para instalarse definitivamente en Europa para vivir. Viajó con pasaporte italiano y con la posibilidad de expandir su empresa de tecnología, Neolo, en el exterior. “Me fui en búsqueda de oportunidades afuera y de paso mejorar la calidad de vida”, cuenta el argentino, de 36 años, quien creó un grupo en la red social Slack para que se conecten todos los paisanos que viven en Europa y trabajan en tecnología.
Hoy son 725 argentinos parte de esa comunidad orientada al área tecnológica, que decidieron irse del país en busca de más seguridad, previsibilidad y mejores oportunidades económicas, pese a que trabajan en una industria a la que no le va mal en la Argentina. La pandemia aceleró en muchos casos la toma de decisión, por la extensa cuarentena que se aplicó y porque floreció la demanda de sus habilidades en todas partes del mundo.
“Creé el grupo porque, cuando uno emigra, desde afuera se ve todo genial, pero es doloroso y uno tiene que hacer el duelo del barrio, de la plaza donde íbamos a pasear, de los amigos, de la familia, y empezar a establecer un vínculo nuevo. Yo me fui en busca de reglas claras para emprender, estabilidad económica, más posibilidades de acceso al crédito y la oportunidad de hacer crecer mi empresa en un mercado más grande”, dice Cervi.
De una encuesta interna que realizaron en el grupo, se desprende que la mayoría se fue con pasaporte europeo (casi el 60%) o visa de trabajo (18,3%). Sin embargo, solo un poco más de la mitad (55%) tenía trabajo asegurado. Lo interesante es que ocho de cada 10 que respondieron que consiguieron un empleo en menos de tres meses.
“El argentino en general está muy bien considerado por el hecho de que somos buenos laburadores y tenemos buen nivel de inglés. Y el que no sabe el idioma, se las rebusca. Se valora mucho la resiliencia. En Estonia hay un boom de reclutadores porque no tienen talento de tecnología de sobra. Si el postulante tiene un título universitario y un nivel de inglés medio, las empresas hacen los papeles para relocalizarlos”, cuenta Yvonne Bonnet, de 34 años, quien se mudó a Barcelona el pasado 8 de junio.
Luego de adquirir experiencia en el mundo corporativo -donde trabajó en Total, Globant, R/GA y Mercado Libre, entre otras- decidió fundar su propia consultora de reclutamiento de talento IT (acrónimo de Information Technology), Resilient Co, junto con su socio Oscar Campos. “Vine a Europa con mi novio; yo tengo pasaporte francés y él pidió visado en la compañía para la que trabaja. Nos mudamos por la situación en la Argentina y para aprovechar que tenía varios clientes en el exterior. Damos asesoramiento en cuatro idiomas: francés, inglés, portugués y español. Tenemos 14 personas que trabajan con nosotras viviendo en distintas partes del mundo”, dice.
Según la encuesta que completaron, la gran mayoría cobra entre 1000 y 3000 euros por mes (63%), mientras que el 20% gana entre 3000 y 4000 euros. Los ingresos varían un poco dependiendo en dónde estén ubicados geográficamente, ya que el costo de vida en Alemania y en Gran Bretaña es más caro. Es por eso que la mayoría elige vivir en España, y cada vez son más los que se mudan al sur de ese país, donde “sos Gardel” con un ingreso en mano de entre 2000 y 3000 euros al mes.
Agustín Allera, de 36 años, se mudó a La Coruña, Galicia, hace tres meses. Viajó con su esposa e hija de un año y medio. “Nos vinimos para escapar de los problemas de inseguridad, educación y salud, y más que nada por el bienestar de mi hija”, cuenta.
En la Argentina fundó una empresa de desarrollo de software, Improve Soft, y el objetivo es expandirla en Europa. “Ya habíamos estado en Galicia porque mi esposa vino a hacer un máster becada y después nos regresamos a la Argentina porque extrañaba. Ahora decidimos volver e instalarnos definitivamente acá”, dice Allera.
Mejor calidad de vida
Federico Polesel tiene 29 años y se mudó hace seis meses a Madrid con su novia y su perra Olivia, de cuatro años. “Hace casi cinco años me quedé sin trabajo y decidí vender mi moto para invertir toda esa plata en cursos de programación. En ese momento, mi pareja me bancó, se hizo cargo de los costos de la casa. Al poco tiempo, me contrataron como programador y en paralelo comencé los trámites para tener la ciudadanía italiana. Cuando la conseguí, la empresa me envió a España, donde estuve casi ocho meses hasta que decidí volver por el Covid”, cuenta.
“Mi padre es grande y prefería estar cerca en la Argentina. Pero cuando viví afuera me di cuenta las diferencias de estar en un país organizado: las posibilidades de crecimiento y de tener estabilidad son otras. En Buenos Aires no nos iba mal económicamente a mi pareja y a mí, pero aun así era imposible ahorrar y saber cuánto valen las cosas. El punto de quiebre igual fue un día que nos entraron en la casa. ‘¿De qué me sirve la plata que cobro si no puede salir el sábado a la noche a tomar algo o no puedo dormir tranquilo?’, pensaba. Con 29 años tenía una vida de 80. Ahí volví a buscar trabajo en España a la distancia y me contrataron en Flipeat. Me dieron 20 días para que hiciéramos la mudanza y nos fuimos”, agrega.
La historia de Lucía Aguilar es similar. En la Argentina estaba bien económicamente: tiene una agencia de marketing y habla de inversiones y finanzas en las redes (tiene casi 78.000 seguidores en su cuenta @luliinvierte en Instagram). Sin embargo, decidió mudarse a España con su marido y sus dos hijos de cinco y siete años en 2019.
“Tengo una mentalidad muy fuerte de querer crecer, mejorar y trabajar para ser una mejor persona. Pero en un momento sentí que en la Argentina no se premia eso, hasta se castiga. Hay un hostigamiento a quien emprende, a quien da trabajo, a quien le va bien. Muchos piensan que la economía es un juego de suma cero, que, si a mí me va bien, es porque a otro le va mal, y no es así. No está la mentalidad que hay en el resto del mundo de que los emprendedores generamos valor”, explica.
Alex Cosentino se diferencia de las primeras historias porque vive en Europa desde 1999. Viajó por el mundo por su empleo en Siemens, pero se radicó en Suiza, cuando le ofrecieron trabajar en la empresa que administra los ferrocarriles de ese país. Está a cargo de la operación, desarrollo y mantenimiento de la red de señalización para los trenes de alta velocidad (más de 250 Km/h).
“Desde 1995 estaba viajando y a los cuatro años me ofrecieron quedarme en Europa. Fue duro tomar la decisión, pero con mi esposa dijimos de probar dos años y después vemos. Lamentablemente los dos años se cumplieron durante la crisis de 2001 y la situación no estaba para regresar. Desde entonces, a medida que volvía de visita a la Argentina me di cuenta de que opinaba cada vez más distinto de mi familia y amigos sobre temas de corrupción. Me asombra cómo a veces se empiezan a tomar con tanta naturalidad algunas prácticas”, cuenta.
“En Suiza uno se acostumbra a una forma de vida donde el respeto no solo viene de vos, sino del gobernante y de tu jefe. Hay una filosofía de que ellos están para ayudarte a hacer más simple tu trabajo. Sentís que el jefe es un coordinador, no el dueño de tu tiempo”, cuenta.
Y opina sobre las declaraciones que hizo la exsecretaria de Seguridad Sabina Frederic sobre la vida aburrida en Suiza. “Nos reíamos con los otros argentinos que están acá. Es al revés, es calidad de vida pura y podés hacer muchas más cosas porque no tenés miedo a la inseguridad. Da mucha tranquilidad saber que mis hijos pueden ir solos al colegio y no les va a pasar nada, que tampoco tendrán un accidente porque los autos respetan a los peatones. Me ayuda en el día a día. No llego a casa estresado por los problemas y obviamente uno tiene la cabeza más clara y vive mejor”, concluyó.
Otras noticias de Comunidad de Negocios
Más leídas de Economía
Habrá cambios. Cuánto costará el dólar tarjeta en enero
Advertencia. El CEO de una cadena francesa de supermercados no quiere comprar carne del Mercosur
Excelencia Agropecuaria. A pura emoción, se consagraron los mejores del campo en 2024
Plazo fijo. Cuál es la tasa de interés banco por banco este miércoles 20 de noviembre