Alfonso Prat Gay criticó a Axel Kicillof por sus negociaciones: “El Kicicostómetro está en US$50 mil millones”
El exministro de Hacienda de Macri volvió a cuestionar la estatización de YPF que se llevó a cabo durante la gestión del gobernador bonaerense como ministro de Economía; se refirió al dinero que podría costarle al Estado como “otro regalito” que el gobierno actual le deja al próximo
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En el tercer día del juicio que determinará cuánto deberá pagar la Argentina por la expropiación de la mayoría accionaria de YPF, el exministro de Hacienda de Mauricio Macri, Alfonso Prat Gay, criticó por sus negociaciones al exministro de Economía de Cristina Kirchner, Axel Kicillof, y calificó el pago de al menos US$4999 millones que el Estado argentino podría tener que hacer por la estatización de la empresa como “otro regalito” que el gobierno actual le deja al próximo.
Consultado en Radio Rivadavia acerca del fallo que el tribunal que lleva adelante el proceso daría a conocer en los próximos días y obligaría a la Argentina a pagar a sus demandantes un monto entre los US$4999 millones y los US$16.100 millones, Prat Gay dijo: “Y bueno, es otro regalito más que le deja este gobierno al próximo, con el agravante de que esto viene de mucho más atrás y tiene algunos detalles bastante tenebrosos”.
A continuación, el economista sostuvo que para dimensionar la gravedad de lo ocurrido es necesario remontarse al gobierno de Carlos Menem, cuando se estableció una regla en función de la cual “si en algún momento un accionista cruzaba la línea del 50% y tenía la mayoría, estaba obligado a comprar o a ofrecer al resto de los accionistas que les iba a comprar lo que faltaba”. “Después llega otro gobierno peronista, muchos años más adelante, y decide hacer exactamente lo contrario, que es estatizar una parte -la mayoría-, el 51%. Esa estatización va al Congreso, se aprueba con mayorías en el Congreso, pero después Kicillof, que estaba a cargo -era el viceinterventor-, decide hacer lo que se le da la gana. El Congreso lo autorizó a expropiar, pero no lo autorizó a hacer cualquier cosa en contra de la ley”, aseguró.
De esta forma, describió la estatización de la empresa como una “escena dantesca” y la enmarcó en el “momento del ‘vamos por todo’ del kirchnerismo. “Cuando el poder es impune cree que puede hacer lo que se le da la gana y que nunca van a llegar los resultados de esa impunidad. Ahora están llegando los resultados, pero el tema es que no está más Kicillof como ministro de Economía, ahora es el gobernador de la provincia de Buenos Aires y esta es una factura muy grande”, planteó.
Luego, siguió su descargo contra el actual mandatario bonaerense: “Más allá de los miles de millones de dólares, que es justamente lo que no tiene la Argentina, pensemos esto: Kicillof dijo también que no le iba a pagar un peso a Repsol porque Repsol debía daños ambientales, bueno, toda esta cuestión... Terminó pagando 5000 millones de dólares por la mitad de la compañía. Hoy esa compañía vale 6000 millones de dólares, o sea que pagó 5000 por algo que hoy vale 3000. Pero además lo van a multar por la forma en que realizó la expropiación, con una multa que puede ser entre una y tres veces el valor de la compañía hoy. Es el absurdo del absurdo del absurdo”.
En ese contexto, calificó de “increíble” que un funcionario con dicho historial “pretenda reelegir” como gobernador de la provincia de Buenos Aires. “Es increíble, con todo el daño que le ha causado Kicillof en tantos casos, no solamente el de YPF, que es el que estamos discutiendo ahora”, sostuvo e ironizó: “Yo tengo el Kicicostómetro, esto lo hemos hablado alguna vez: es el costo de las negociaciones para la tribuna de Kicillof (..) Bueno, el Kicicostómetro ya está bordeando los US$50.000 millones y solamente estamos hablando de malas negociaciones de Kicillof, no estamos hablando de malas decisiones de política y económica”.