Viajes. Por el distanciamiento en el avión, podrían subir 50% los pasajes

Entre todas las medidas sanitarias que se evalúan aplicar en el regreso del transporte aéreo tras la pandemia de coronavirus, hay una que las compañías del sector quieren evitar a toda costa: la de respetar el distanciamiento social dentro de la cabina del avión. Según un informe de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), la obligación de dejar asientos vacíos alteraría profundamente la economía de las aerolíneas al llevar la ocupación máxima por debajo de los niveles de equilibrio para las empresas y las obligaría a aumentar las tarifas hasta en un 54%.

Según el informe del organismo, que representa 290 compañías que acaparan el 82% del tráfico aéreo mundial, el distanciamiento social dentro de la cabina reduciría el factor máximo de ocupación al 62%, cuando el punto de equilibrio financiero en la industria es alcanzado, en promedio, con el 77% de la capacidad cubierta. De hecho, el documento asegura que sobre una muestra de 122 aerolíneas a nivel mundial, solo cuatro podrían ser rentables con una ocupación del 62%.

De acuerdo con los cálculos presentados por Brian Pearce, economista jefe de IATA, con menos asientos para vender los costos unitarios aumentarían considerablemente. En comparación con 2019, las tarifas aéreas deberían elevarse "drásticamente", entre 43% y 54% dependiendo de la región, solo para alcanzar el punto de equilibrio.

En Latinoamérica, por ejemplo, el punto de equilibrio se alcanza con una ocupación del 79% y, si se forzara a las aerolíneas a mantener la distancia entre pasajeros, eso se reflejaría en una suba del ticket promedio de US$146 a US$219, según IATA.

Si bien la organización internacional señala que considera prioritaria la seguridad de pasajeros y tripulación, asegura que no es necesario mantener la distancia dentro de la cabina porque "la evidencia sugiere que el riesgo de transmisión a bordo de un avión es bajo". Según su explicación, esto es así por la disposición de los asientos (que evitan el cara a cara y hacen de "barrera" hacia adelante), la circulación del flujo de aire desde el techo hasta el piso y la utilización de filtros.

Además, señalan que dejar un asiento vacío entre pasajeros de la clase turista tampoco cumpliría con el régimen de distanciamiento social sugerido en tierra, que es de entre uno y dos metros, dado que los asientos tienen menos de 50 centímetros de ancho.

De todos modo, IATA apoya y sugiere el uso de barbijos tanto para los pasajeros como para la tripulación. "Tomaremos medidas, como el uso de cubiertas faciales por parte de los pasajeros y máscaras por parte de la tripulación, para agregar capas adicionales de protección. Debemos llegar a una solución que brinde a los pasajeros la confianza para volar y que el costo de volar sea asequible. Uno sin el otro no tendrá un beneficio duradero ", dijo Alexandre de Juniac, director general y CEO de IATA en conferencia de prensa.

De Juniac ya había expresado en otra oportunidad que, de concretarse la obligación de viajar con aviones menos cargados de pasajeros, sería "el fin de los vuelos accesibles".

Barbijos obligatorios para volar con Latam

Cuando todavía no está claro el protocolo final para la reactivación de la actividad, algunas aerolíneas ya comenzaron a tomar sus propias decisiones. Por caso, a partir del próximo lunes 11 de mayo Latam requerirá que los pasajeros y miembros de la tripulación utilicen barbijos o tapabocas durante las diferentes instancias del vuelo, con excepción de niños menores de once años o personas con dolencias acreditables que les impidan utilizarlas.

También implementará posiciones de check-in "intercaladas" y filas individuales en cada puesto para mantener una distancia de 1,5 metros entre los pasajeros y anticipó que reforzará la limpieza y desinfección de esos sectores.

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