Todo parecía transcurrir por los carriles normales. Conforme a su favoritismo, Novak Djokovic resolvió con solvencia su encuentro de octavos de final del Australian Open con una victoria sobre el checo Jiri Lehecka por 6-3, 6-4 y 7-6 (7-4), en dos horas y 39 minutos de juego, y firmaba así el pasaje a un partidazo, un cuarto de final electrizante contra Carlos Alcaraz. A los 37 años, el serbio va en busca de su 11ª corona en el Melbourne Park y su 25º título de Grand Slam, luego de un 2024 sin celebraciones en los cuatro grandes.