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Andrey Rublev y un nuevo ataque de furia: pelotazo y botella contra el piso en Roland Garros, donde fue abucheado por el público

“Perdí la cabeza”, se excusó el tenista ruso, que ya tiene antecedentes de estos desbordes; será el rival de Delbonis en segunda ronda

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Rublev y su enojo que casi le cuesta ser expulsado de Roland Garros
Rublev y su enojo que casi le cuesta ser expulsado de Roland GarrosCaptura TV

Andrey Rublev fue el protagonista de un incidente que pudo haberlo dejado sin Roland Garros en el duelo de la primera ronda. Luego de caer en el tie break del primer set ante el surcoreano Soonwoo Kwon por 7-5, el tenista ruso perdió la razón por algunos segundos y se llevó los abucheos del público presente en la cancha 14. A pesar de su momento de bronca, luego ganó el partido cuatro sets, lo que le permitió acceder de ronda en la que se medirá ante el argentino Federico Delbonis.

Rublev le pegó mal a la pelota que le dio el punto del tie break a su rival y de inmediato comenzó con su ataque de furia. Primero, amagó a tirar una de las pelotas para la tribuna, pero se contuvo. Cuando se dirigía hacia su sitio de descanso no llegó a sentarse y le pegó con furia a una pelota contra el cartel de publicidad ubicado debajo del banco. Incluso, luego de rebotar la pelota casi impacta en uno de los colaboradores encargados de barrer el court.

Sin darse cuenta de que pudo lastimar al joven, el número 7 del ranking continuó con su enojo una vez sentado en el banco. Tras recibir una advertencia de parte del juez por conducta antideportiva partió una botella con agua contra el piso y allí el público comenzó a abuchearlo por su actitud.

Luego de ese arresto de furia en el set inicial, el ruso pudo reponerse y se impuso en sets corridos por 6-7, 6-3, 6-2 y 6-4. En la próxima ronda se cruzará ante el argentino Federico Delbonis, que venció al francés Adrian Mannarino por 6-1, 7-6 (7-1) y 6-2 y fue el único argentino que ganó el día martes en Roland Garros.

Tras el partido, Rublev tuvo la oportunidad de disculparse en conferencia de prensa: “En ese momento perdí la cabeza y por supuesto lamento lo que hice. Es inaceptable golpear la pelota de la manera en la que lo hice”, declaró el ruso. “Mejor hubiera sido golpear la raqueta contra la silla, ya que la pelota puede golpear a alguien y ahí es cuando empiezan los problemas. Fue poco profesional por mi parte, espero no volver a hacerlo”, agregó tras su victoria ante Kwon.

Historia repetida

No es la primera vez que Rublev tiene una conducta de este tipo. En la previa del Grand Slam habló sobre sus enojos en una profunda entrevista con el medio TennisMajors,. “A veces veo vídeos míos y pienso cómo puedo hacer eso. Es algo que estoy intentando erradicar, necesito ser más profesional y positivo en la cancha porque considero que es un factor clave para poder llevar mi carrera a un nivel superior. No puedo permitirme perder tiempo y energía en las tonterías que hago a veces, sino en el juego propiamente y en luchar por cada”, había expresado.

El número siete del mundo tiene en su expediente varios casos en los que demostró mucho enojo. El año pasado, en el torneo de Miami, también mostró su bronca por una actitud similar y pegó un pelotazo contra el piso en uno de los partidos ante Fucsovics.

En 2020, ante Rafael Nadal en el ATP Finals de Londres tiró su raqueta contra el piso tras perder un punto por una pelota que pegó la faja de la red y se le fue larga. Estas son algunas de las actitudes que mostró el tenista ruso que demuestra ser muy sanguíneo en cada partido que disputa.

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