Se suicidó el jugador de San Lorenzo Mirko Saric

El futbolista de San Lorenzo de Almagro Mirko Saric, de 21 años, se ahorcó ayer al mediodía en su vivienda del barrio porteño de Flores, ubicada en Fabre 1241.

Aproximadamente a las 12, la madre del jugador, Ivana, fue hasta la puerta de la habitación de su hijo, que está en la planta alta, y le avisó que le iba a preparar el desayuno. Minutos después, luego de varios llamados, la madre subió a buscarlo y se encontró con la tragedia: Mirko se había ahorcado con una sábana que estaba atada a una barra de gimnasia que el futbolista tenía en su habitación.

La información fue confirmada dos horas después de la muerte por el comisario de la seccional 38» de la Policía Federal, Ricardo Rodríguez. "El hecho ocurrió cerca de las 12 y el cuerpo de Saric fue encontrado en el cuarto del jugador por su mamá, quien un rato antes venía de avisarle que ya estaba listo el desayuno", explicó el comisario.

Según Rodríguez, la madre pidió a gritos el auxilio de los vecinos. Dos de ellos la ayudaron a bajar el cuerpo del jugador de San Lorenzo e intentaron revivirlo con ejercicios de respiración boca a boca. Al no encontrar respuestas positivas se llamó de inmediato a la ambulancia del SAME (Servicio de Asistencia Médica de Emergencias), que llegó en cinco minutos. Pero lamentablemente no había nada más que hacer.

"Aún estamos tratando de esclarecer los hechos que llevaron al jugador a quitarse la vida ahorcándose con una sábana. Pese a que por secreto de sumario no se pueden hacer públicos algunos datos registrados por los peritos, todo confirma que es un caso de suicidio", dijo Rodríguez.

A las 16.30, el cuerpo del futbolista del club azulgrana fue trasladado a la morgue judicial de la ciudad de Buenos Aires. Una vez que se le realizó la autopsia, los familiares fueron autorizados a retirar sus restos. La causa está en el Juzgado de Instrucción Nº 22, a cargo del juez Ismael Muratorio, y hasta el momento fue caratulada como "averiguación de suicidio". La secretaría que comandará la investigación será la del doctor López Cabanilla.

Saric, que nació el 6 de junio de 1978, debutó en primera división el 19 de febrero de 1998, ante Gimnasia y Esgrima La Plata, en el Nuevo Gasómetro, a los 19 años, y jugó 41 partidos, en los que convirtió cuatro goles. Mirko se recuperaba de la rotura en el ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha, una de las lesiones más graves que puede sufrir un futbolista, que se produjo el 19 de diciembre último, en el match de reserva frente a River, por la última fecha del Apertura. Para muchos de sus familiares, ésa fue una de las causas de su estado depresivo. Su hermana Mirna, de 24 años, lo confirmó: "La depresión fue consecuencia de la lesión. Mi hermano estaba en un pozo y decía que no quería vivir más".

Hace un mes, aproximadamente, Saric había sufrido un violento accidente con su Fiat Palio, del cual resultó ileso. Ayer, durante toda la jornada, los familiares y varios compañeros del jugador se acercaron a la casa de la calle Fabre.

Entre los futbolistas estuvieron Horacio Amelli, Eduardo Tuzzio, Pablo Michelini, Guillermo Franco y Fernando Ortiz.

Procedente de Paraguay, anoche llegó al país el hermano del futbolista fallecido, Martín Saric, quien fue dejado en libertad de acción por San Lorenzo en diciembre último y ahora juega en Sportivo Luqueño. Según un despacho de la agencia EFE, el hermano menor de Mirko se enteró del suicidio durante la práctica de la mañana.

Los restos de Saric son velados desde anoche en Treinta y Tres Orientales al 1000, en el barrio de Boedo. La inhumación será hoy, a las 11, en el cementerio de Flores.

Imágenes del dolor

Demostraciones de dolor, los gritos desgarradores y el llanto desconsolado fueron las imágenes que reflejó cada una de las personas que se acercaron hasta la casa de la familia Saric, en el barrio de Flores. Los padres de Mirko, Ante e Ivana, no dejaron su hogar hasta la noche, cuando asistieron al velatorio. Sus dos hermanas, Mirna y Mariana, salían a cada rato con lágrimas que lo decían todo.

Según el comisario de la seccional 38» de la Policía Federal, Ricardo Rodríguez, cuando llegó a la vivienda de la calle Fabre 1241, los padres del futbolista fallecido estaban en una crisis de nervios. Tanto que no pudieron prestar declaración en la jornada de ayer y sólo lo hicieron los vecinos que ayudaron a bajar el cuerpo de Saric.

A las 17.20, la llegada de los abuelos de Mirko al lugar fue traumática. Casi sin poder caminar, la abuela era acompañada por algunos de sus nietos. El cuadro fue desgarrador. A tal punto que los jugadores de San Lorenzo Horacio Amelli, Eduardo Tuzzio, Pablo Michelini y Fernando Ortiz, que juntos se acercaron hasta la casa de los Saric, optaron por no ingresar en el lugar para no invadir la intimidad de los familiares del futbolista muerto.

Apenas se enteraron de la noticia, los amigos del club y varios juveniles de San Lorenzo, entre ellos Guillermo Franco, se consolaban mutuamente en la puerta de la casa.

La policía cerró la calle Fabré hasta las 16.30, y después se retiraron las cintas de prohibido pasar. Fue allí cuando la mayoría de los medios se instaló en la vereda de enfrente del domicilio de Mirko Saric. Algo que no cayó muy bien entre los familiares y vecinos. Como consecuencia de ello, el fotógrafo de La Nación Fabián Marelli fue agredido por uno de los vecinos, que se sumó a la queja que minutos antes había hecho un familiar a un camarógrafo.