Encontrá resultados de fútbol en vivo, los próximos partidos, las tablas de posiciones, y todas las estadísticas de los principales torneos del mundo.
Otra muestra de que el rugby argentino sigue defendiendo sus valores
La Unión Argentina de Rugby (UAR), a través de su presidente, Gabriel Travaglini, remarcó que por ahora tiene cerradas sus puertas al ingreso de la publicidad de las casas de apuestas. En un tiempo en el cual las apuestas están perforando cada vez más las entrañas de deporte y, al mismo tiempo, están provocando en la sociedad un flagelo entre los adolescentes –con perfiles de ludópatas en edad escolar–, que el rugby se mantenga al margen es un hecho que vale resaltar. En una entrevista en septiembre pasado con LA NACION, Travaglini fue claro: “Nos interesa que el auspiciante tenga conceptos similares a los nuestros. No priorizamos la guita por sobre el perfil de la empresa. Por ejemplo, a las casas de apuestas no las veo dentro del rugby”.
Si bien en la Argentina las casas de apuestas están fuertemente vinculadas con el fútbol –28 por ciento de los clubes de primera A luce en sus camisetas publicidades de esas empresas–, el modelo de la timba viene avanzando sobre otros deportes. Por ejemplo, la misma compañía de apuestas que es auspiciante de la AFA también lo es de la Confederación Argentina de Hockey –Leonas y Leones incluidos– y de la Asociación Argentina de Tenis. Todo va acompañado por un bombardeo publicitario en medios y en redes en el cual también participan periodistas que tienen visibilidad a partir de la televisión. No se trata de santurronería ni de nada por el estilo: promocionar algo atenta contra la salud de la población –como lo es el juego– no es ético.
“Con la legalización del juego online en 17 provincias, Argentina abrió un casino en forma de webs y apps, a mano, en la cartera de la dama, el bolsillo del caballero y la mochila y el botinero de cualquier adolescente”, escribió el periodista Roberto Parrotino en una interesante y profunda nota publicada en el medio Cenital. Miembros de cuerpos docentes y directivos de escuelas y distintos especialistas en salud mental vienen alertando desde hace tiempo sobre cómo los chicos en edad escolar están manifestando conductas adictivas al juego por su teléfono celular convertido en un casino móvil: inventan estrategias, roban los datos de las tarjetas de crédito de sus padres y, sobre todo, se endeudan.
Para este flagelo, que se empezó a vislumbrar –nada es casualidad– en las escuelas de Rosario, y que se incrementó durante y después de la pandemia, nadie parece dispuesto a tomar medidas, ni para legislar ni prevenir sobre un sistema –ilegal en un gran porcentaje– que mueve muchísimo dinero. Por eso vale destacar que el rugby se mantenga al margen, al menos en lo publicitario. El patrocinio de apuestas en el deporte equivale hoy al que en su momento fue el del tabaco. En aquel entonces, cuando Travaglini jugaba, el rugby no se abstrajo: marcas de cigarrillos auspiciaron las series internacionales de los Pumas en la cancha de Ferro.
Quizás en algún momento, el rugby pueda revisar su estrecho vínculo comercial con el alcohol. También quizá pueda reforzar públicamente su defensa al sistema preciado de clubes que posee. El proyecto de sociedades anónimas –las SAD– que figura en el DNU aún vigente del presidente Javier Milei no apunta, como se cree, sólo al fútbol, sino a todas las federaciones deportivas del país, incluidos la UAR y sus clubes. Hay que leer y desmenuzar esa parte del DNU para entender su alcance a todos los clubes del país. En la Argentina, afortunadamente, los clubes siguen siendo de los socios. Se puede encontrar otros modelos en Europa y en Miami, no aquí.
Argentina sí importó el juego online en el deporte. En Inglaterra y en Brasil, por ejemplo, hubo futbolistas que terminaron siendo adictos al juego, la enfermedad de la adicción los atrapó. Está comprobado que el juego de las apuestas es como una droga. Y está bien que el rugby se mantenga al margen y que, en lo institucional, haya sentado un precedente en un tema tan serio.
Seguí leyendo
Crack del rugby. Para jugar al seven, nadie como Waisale Serevi: magia, depresión y el alma de un equipo que daba show
La segunda temporada de Full Swing. El surcoreano amante del chocolate, una debacle en la Copa Ryder y la traición a McIlroy
La victoria perfecta. Una goleada aplastante: la historia detrás del primer partido de los "80 goles" en el polo mundial
Otras noticias de UAR
Tras la apelación de UAR. World Rugby confirmó la sanción, pero existe una treta para que Isgró se pierda menos partidos en París
Biei. La cultura de club tiene un pionero: la gran transformación de un bañado y el récord de cinco generaciones
Nuevo sponsor. A 43 años de una presencia fantasma, los Pumas se reencuentran con una histórica marca de indumentaria
Más leídas de Deportes
Puntos, millones y butaca. Colapinto y Williams, ante un nuevo escenario: el múltiple juego de las presiones en Las Vegas
Scaloni sube la vara. Quiénes son los que necesitan mejorar en 2025 para no quedar abajo de la selección
Con movimientos. Así quedó la tabla de posiciones de las eliminatorias sudamericanas, tras la fecha 12
Se cerró el año. Tabla de posiciones de las Eliminatorias: así se jugó la fecha 12