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La final de la URBA. Cómo viven el SIC y CUBA la pelea por el título: ansiedad, presión y convicciones de dos líderes antes de la batalla
Marcos Piccinini (SIC) y Segundo Pisani (CUBA) anticipan la gran definición de este sábado en el CASI
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La paz que irradia la Catedral los contagia en su andar. La tranquilidad con que Marcos Piccinini, subcapitán del SIC, y Segundo Pisani, capitán de CUBA, esperan la gran final del Top 12 de la URBA asombra. Fuera de toda bambolla, ajenos a la excitación, son un ejemplo de mesura y templanza. Se ríen, hablan cordialmente, posan para las fotos con mucha seguridad y miran la copa que adorna el encuentro con LA NACION con el mismo deseo.
“Ojalá nos toque a nosotros, sería una manera brillante de cerrar el año”, comenta el pilar zanjero. “Estamos muy confiados que tenemos el potencial para ser campeones”, se ilusiona el ala universitario. Juran que no son supersticiosos, pero se excusan en las cábalas y esas cosas de la fortuna, que trascienden la confianza y las ganas de hacerlo suyo. Son conscientes de que están a 80 minutos de la gloria y este sábado, a partir de las 17, en esa misma cancha del CASI, en San Isidro, dejarán todo por levantarla como campeón. Entre los sueños y la realidad, los dos sintetizan en sus conceptos las convicciones que identifican a SIC y a CUBA.
–¿Es verdad que esta semana es la más linda que puede vivir un jugador de rugby después de seis meses de esfuerzo?
Piccinini: –Es una semana muy especial y si te digo que no estoy ansioso, te miento. Todo el club está movilizado y eso lo disfrutamos mucho sin adelantarnos a lo que pase este sábado.
Pisani: –Toda la gente del club es consciente del proceso que nos trajo hasta acá. Después de haber sufrido tanto en los últimos años, ser protagonistas nos da otro empuje, otra fuerza para ilusionarnos. En el club te lo hacen sentir.
–¿Qué tuvieron a lo largo de la temporada para estar en la final del Top 12?
Piccinini: –Lo mejor que tuvo el SIC a lo largo del campeonato fue la defensa. Nos focalizamos mucho en eso para construir nuestro juego, sobre todo con los forwards en los scrum y los lines. A partir de ahí, con pelotas limpias, nuestros backs pudieron marcar diferencias.
Pisani: –Principalmente la confianza en el trabajo que estamos realizando. A partir de eso mejoramos mucho en la obtención y en los lines. La Flaca Uriarte y Lucas Piña son una tortura para los rivales y nos permite jugar el maul con muy buenos resultados.
–¿Se puede decir que el año y medio sin competencia los fortaleció mucho más de lo que los perjudicó?
Piccinini:–En nuestro caso no nos afectó demasiado. Obviamente, haber estado tanto tiempo sin jugar fue duro. Pero por suerte, desde el rendimiento, le dimos continuidad al logro de 2019.
Pisani: –En CUBA el parate nos ayudó a reconvertirnos como grupo. En 2019, cuando empatamos con Newman y nos salvamos del descenso, dijimos “basta”. Desde entonces asumimos el compromiso de empezar a trabajar con más seriedad en la parte física. Acá están los resultados.
–¿Qué representa para este equipo Lucas Piña?
Pisani: –La presencia de Lucas es vital, porque tiene una visión de juego y una cabeza distinta. Ayuda mucho con su conocimiento del juego desde adentro de la cancha. Es un entrenador más que, mientras juega, corrige los errores que vamos cometiendo. Tiene una ascendencia y un liderazgo natural muy necesario para el grupo.
–¿Dónde va a estar la clave del partido de este sábado?
Piccinini: –Creo que quién prevalezca en los puntos de contactos tiene grandes chances de quedarse con el partido. El más disciplinado va a ganar.
Pisani: –Coincido con Marcos. El que gane los puntos de contacto y cometa menos errores se lleva la final.
–¿Qué temen de CUBA?
Piccinini: –Los dos partidos de este año fueron muy similares y parejos, es un equipo muy físico y con un pack de forwards muy fuerte. Hay que evitar cometer penales.
–¿De qué tienen que cuidarse del SIC?
Pisani: –El SIC es un equipo muy prolijo, disciplinado, que comete pocos errores y obliga al rival a jugar muy concentrado todo el partido. Tiene un pack forwards muy fuerte en el contacto y sus backs son muy hábiles. No te perdonan cuando te equivocás.
Las convicciones de uno y otro
Entre los sueños y la realidad, Piccinini y Pisani sintetizan en sus palabras las certezas propias en que se afirman SIC y CUBA.
–Por ser el último campeón y haber llegado mejor clasificado, ¿la presión la tiene el SIC?
Piccinini: –No, creo que es un plus que nos fortalece y nos da tranquilidad para hacer nuestro juego. Este campeonato lo arrancamos de cero y buscamos disfrutar partido a partido. Así nos pudimos llegar hasta acá.
Pisani: –Puede que ellos lleguen como favoritos, pero la presión es de ambos. ¿Quién no quiere jugar una final de Top 12 y ganarla? Después de haber pasado dos repechajes por no descender, no podemos jugar una final con presión. Al contrario…
–¿Qué diferencia a este equipo del que salió campeón en 2019?
Piccinini: –Más allá de los juveniles que se sumaron al plantel superior, la idea general del juego es la misma. Tal vez logramos ajustar algunos detalles y fortalecer nuestras bases, que son el scrum y la obtención.
–¿Cómo influye en la mentalidad del grupo la posibilidad de ser bicampeones en la cancha del CASI?
Piccinini: –Obviamente que tiene su morbo, pero no hay que pensar más allá de lo que pueda pasar en el partido. No te voy a negar que tiene un plus, pero primero hay que jugar.
–¿Imaginaban este presente de CUBA cuando arrancó el Top 12?
Pisani: –Más allá de la pandemia, siempre nos mantuvimos unidos y enfocados en que cuando volviese el torneo teníamos que ser protagonistas. Pero no sé si aspirábamos a tanto. Creo que nos fuimos convenciendo partido a partido.
–¿Cómo se imaginan este sábado a las 19?
Piccinini: –Espero que la tarde nos encuentre festejando con los amigos y la familia, que son los que nos bancan todo el año.
Pisani: –Lo único que te puedo asegurar es que vamos salir vacíos de la Catedral. Vamos a dejarlo todo para terminar logrando el objetivo por el que tanto luchamos.
Las formaciones
SIC: Juan Pablo Zervino; Jacinto Campbell, Carlos Pirán, Santos Rubio y Justo Piccardo; Gastón Arias y Juan Soares Gache; Tomás Meyrelles (C),Tomás Comissatti y Marcos Borghi; Federico Haedo y Lucas Sommer; Marcos Gatica, Andrea Panzarini y Marcos Piccinini.
Entrenadores: Santiago González Bonorino y Lucas Cilley.
Suplentes: 16. Lucas Rocha, 17. Ricardo Machiavello, 18. Gonzalo Hughes, 19. Alejandro Daireaux, 20. Mateo Albanese, 21. Joaquín Lamas, 22. Facundo Giorgiutti, 23. Mateo Madero.
CUBA: Marcos Moroni; Benjamín Ocampo, Bautista Casaurang, Felipe de la Vega y Marcos Young; Rodrigo Ávalos y Rafael Iriarte; Benito Ortíz de Rozas, Segundo Pisani (C) y Lucas Maguire; Lucas Piña y Santiago Uriarte; Estanislao Carullo, Enrique Devoto y Nicolás Solveyra.
Entrenadores: Tomás Cóppola, Agustín Benedicto y Federico Sala.
Suplentes: 16. Facundo Aguirre, 17. Juan Pedro Garoby, 18. Francisco Garoby, 19. Jerónimo Conte Grand, 20. Pedro Mastroizzi, 21. Facundo Fontán, 22. Francisco Patrono, 23. Benjamín Gutíerrez Meabe.
Árbitro: Pablo Deluca.
Cancha: Club Atlético San Isidro.
Hora: 17.
TV: ESPN 3 y ESPN en Star+
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