Raúl Pérez, cerca del final de un ciclo: "El primer responsable soy yo"

Los jugadores de los Jaguares dejaron el estadio de Vélez sin hablar con la prensa. Algunos, raudamente. El único que dio la cara fue el entrenador Raúl Pérez, el más cuestionado en este momento, pero siempre frontal. La derrota del viernes 31-30 ante Kings, última presentación de la temporada en la Argentina, acentuó aún más la caída que se precipitó a partir de la segunda gira por Sudáfrica, por lo que Pérez eligió enfocarse en los últimos partidos en Australia (ante Waratahs el sábado y ante Rebels el viernes 14), antes que en su salida del equipo, confirmada hasta por declaraciones de los propios jugadores, como Emiliano Boffelli.

–¿Qué podés decir sobre tu alejamiento?

–Es lógico que empiecen a correr esas versiones, este año se me termina el contrato. La realidad es que queda una gira durísima, y, por cómo estamos, va a ser más dura todavía. Tenemos el foco en eso. Tenemos que revertir inmediatamente esta situación, que también pasa por lo mental, y tratar de llegar lo mejor posible. El primer responsable soy yo. Pero eso también lo dije el año pasado. Asumo el papel que me tocó. Cuando termine este torneo sacaremos conclusiones y tanto los dirigentes como yo vamos a tener un diagnóstico de lo que fueron estos dos años.

-¿Tenés ganas de seguir?

-Nunca mis situaciones fueron tranquilas. Siempre salí con laburo y haciendo un esfuerzo. Esto es lo mismo. Por supuesto que hay situaciones que frustran. Trabajar toda la semana y después no poderlo reflejarlo en la cancha es frustrante. Pero uno es hombre de trabajo, y hay que seguir trabajando.

-¿Por qué les está costando tanto?

-Es una mochila pesada el final de este torneo para los jugadores. El resultado está imperando ahí y lo hace más pesado todavía, porque los entrenamientos son muy buenos, la intensidad de ellos es muy buena, tienen la voluntad para llevar adelante entrenamientos muy físicos. Lo vamos a tener que buscar por otro lado, porque es necesario terminar bien estos dos partidos y que puedan expresar durante 80 minutos lo que por pasajes muestran. Lo principal es que no estamos disfrutando del partido, y por eso se nos hace difícil terminarlo. Disfrutar del esfuerzo, de un rugby físico y dinámico como éste, de ayudar al compañero.

-Cuando se pusieron la camiseta de los Pumas jugaron mucho mejor. ¿Por qué tanta diferencia?

-No voy a comparar porque me parece que son dos rugbies diferentes. La verdad es que el equipo se cae en los últimos 15 minutos y esos baches los venimos teniendo durante todo el año. Es madurez en el torneo. La intensidad de las franquicias que enfrentamos y las características de este torneo todavía no se nos hicieron callo en las acciones que necesitamos. Ahora es más mental que otra cosa. Tenemos que hacer callo la intensidad mental y física de este torneo, más allá de algunas situaciones. Es lo que pasó después del segundo año de Rugby Championship: el equipo empezó a tomar el desafío y la intensidad y les ganó a Australia y a Sudáfrica.

-¿Qué tan difícil es llevar adelante un equipo como los Jaguares, pero pensando en el seleccionado?

-Es la realidad. El objetivo de todo el proyecto es llevar jugadores de calidad a los Pumas. La competencia del Super Rugby nos sirve para eso también. Siempre tuve libertad. Si bien el plan de juego es parecido, no es el mismo. Es cierto que tenemos un plantel grande y tienen que estar la mayoría de los jugadores en la cancha y probados. Pero en ningún momento fue una dificultad, porque yo lo entiendo así. Cuanto más grande sea el plantel, más posibilidades van a tener los Pumas. El Huevo [Hourcade] nunca presionó por ningún jugador. Cada dos o tres meses nos juntábamos y analizábamos, pero nunca sentí una presión extra.

-¿Qué opinás de la posibilidad de volver a convocar al seleccionado a los que actúan en Europa?

-Tiene que ver con la madurez de nuestra competencia. Si es para reforzar el equipo, no estaría mal. Son decisiones de los dirigentes. También hay que tener en cuenta el esfuerzo de esta competencia en la que hay viajes de 12 a 19 horas cada tres o cuatro semanas.

Los malos resultados derrumbaron el promedio de espectadores

Las 4122 personas que presenciaron la derrota del viernes de los Jaguares fue la cifra más baja de la temporada en el Súper Rugby. Al menos, esta vez no hubo silbidos como en las últimas presentaciones, un pedido que se hizo institucional con el hashtag #YoNoSilbo. ?Según las cifras oficiales, el promedio de asistencia fue de 9000 personas por partido, aunque los malos resultados fueron alejando al público en las últimas jornadas.

El cierre de la temporada, de visitante

A Jaguares le quedan dos partidos, ambos fuera de la Argentina: el sábado próximo se enfrentarán con Waratahs, en Sydney, y finalizarán su participación el viernes 13, en Melbourne, ante Rebels.?Anoche, Pérez anunció la lista de 27 convocados.

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