Encontrá resultados de fútbol en vivo, los próximos partidos, las tablas de posiciones, y todas las estadísticas de los principales torneos del mundo.
Una hermandad en busca de la gloria en Nordelta
Con la asistencia de su hermano Emilio como caddie, Rafael Echenique (67, -5) es uno de los punteros del Abierto junto con Ryan Blaum; Cabrera anotó 71 (-1) y figura 9°
El renacer golfístico siempre está latente en cualquier jugador. Es cuestión de activar ciertos mecanismos, de tocar algunos puntos sensibles, para que la mejoría surta efecto en la cancha. No es fácil, a veces el proceso puede durar años. Pero como el golf es un deporte de larga duración, que no apura tanto con la edad a sus protagonistas, el resurgimiento en tiempo y forma es bastante factible. Rafael Echenique la pasó mal durante todo el año en el Web.Com; se achaca a sí mismo que no tuvo una buena actitud y, además, convivió con otros factores que lo sacaron del juego. Hace dos meses se convenció de que debía recurrir a otras personas para salir del pozo y, de a poco, el panorama empezó a aclarársele. Ya había disfrutado de buenas sensaciones la semana pasada en el Personal Classic (finalizó 3º) y ayer picó en punta en el 108º VISA Open, con una vuelta de 67 (-5), en la misma línea que el norteamericano Ryan Blaum.
El excelente desempeño de Rafa en Nordelta dejó en un segundo plano a Ángel Cabrera, el defensor del título, que arrancó con 71 (-1). Lo que más necesita en estos tiempos Echenique es mantenerse en calma y ayer encontró ese estado al lado de su hermano, Emilio, que lo asistió como caddie. "Somos totalmente diferentes con mi hermano; él es muy tranquilo. Me sabe hablar, me da paz; mucho mérito es de él. Ya me llevó los palos en algunos torneos", contó el puntano, que redondeó una mañana libre de bogeys, matizada con un águila en el 13 y tres birdies (4, 8 y 17). "Me salvé dos veces para par, sobre todo en el hoyo 11, con un putt que emboqué de 4 metros, y otro de un metro y medio en el 12", comentó el puntero, que por sus magros resultados en 2013 se quedó sin categoría para jugar en cualquier circuito.
El principal desafío de Rafa Echenique es organizar su futuro profesional, ni más ni menos. Por lo pronto se apoya en su hermano y en Hernán Rey, a quien conoce de su época de jugador y que se ocupa de observarle el swing y de quitarle algunos bloqueos de la mente. "Mi carrera en función de 2014 dependerá del resultado final en este Abierto; veré si puedo acceder a la escuela del Sunshine Tour o del Canadian Tour, todavía no hay nada resuelto."
Rafa ganó el Abierto en 2006, un triunfo en el Pilar Golf Club que coincidió con el mejor año de su carrera. En esa temporada atesoró la tarjeta del Tour Europeo y se transformó en el primer producto surgido de la escuela de la AAG en obtener la cita más importante de nuestro país. Se insinuaba como un talento en ciernes y con grandes chances de lograr objetivos de jerarquía. Pero los avatares del golf le hicieron padecer un sinnúmero del altibajos en el exterior: estuvo cerca de la gloria en el Tour Europeo y también llegó a actuar en tres Majors. Rara vez tuvo la suerte como aliada y algunos temas extragolfísticos lo desviaron del foco en varios períodos. Hasta llegar a esta realidad, en la que no posee garantías para afianzarse en algún tour. El éxito en Nordelta puede darle un nuevo espaldarazo, ese despertar definitivo que tanto ansía.
Ryan Blaum, el otro puntero, se diferencia de Echenique porque exhibió una gran solidez a lo largo de la temporada del PGA Tour Latinoamérica; al punto que el oriundo de Miami aparece 2° en la Orden de Mérito y ya tiene asegurado un lugar en el Web.Com 2014, por más que no pase el corte hoy. "Jugué muy sólido y de hecho no cometí bogeys", reflejó Blaum, que refrendó su fama de gran metedor en el green con un putt para birdie de 7,5 metros en el último hoyo.
Ángel Cabrera era una incógnita antes del comienzo del certamen. Sus persistentes dolores en el hombro izquierdo hacían dudar de su rendimiento, pero no sintió molestias en todo el recorrido y tuvo un tramo de ida ideal. Abrió con un birdie en el 10 y sumó dos más en el 14 y 16. La situación se complicó con el bogey en el 5 y una muy mala salida en el 6 -cayó directo al agua-, que le costó un triple bogey. Pero el hombre que le pone el rostro al afiche del Abierto se recuperó con dos birdies en el 7 y 8 y firmó una tarjeta bajo el par, tal cual su intención para sentirse animador. "Pegué un solo golpe malo en toda la vuelta y me pude recuperar rápido. Ayudó que por la mañana estuvo tranquilo, sin viento. Y por suerte el hombro no me molestó para nada", señaló el Pato, que desde el miércoles próximo será el anfitrión del Ángel Cabrera Classic, en Córdoba. Los espectadores sueñan con que el doble ganador de Majors repita el desenlace ideal del año pasado, cuando se consagró en Nordelta con una vuelta récord de 64 (-8).
Varios están al acecho, como Miguel Carballo (-3), que finalizó 2º el año pasado, y Emiliano Grillo (-2), cuyo talento se destapó en Nordelta en 2009, cuando todavía era amateur. Después, el viento hizo de las suyas por la tarde y estropeó la jornada de Julio Zapata, que venía -5 a dos hoyos del final y cerró con un doble y un cuádruple bogey en el 8 y el 9, para concluir +1. En esta ronda de premios y castigos, hoy el corte clasificatorio pondrá condiciones: sólo pasarán los 55 primeros y sus empates.
lanacionarMás leídas de Deportes
Puntos, millones y butaca. Colapinto y Williams, ante un nuevo escenario: el múltiple juego de las presiones en Las Vegas
Scaloni sube la vara. Quiénes son los que necesitan mejorar en 2025 para no quedar abajo de la selección
Con movimientos. Así quedó la tabla de posiciones de las eliminatorias sudamericanas, tras la fecha 12
Se cerró el año. Tabla de posiciones de las Eliminatorias: así se jugó la fecha 12