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Sigue la polémica: Nicolás Ramírez se equivocó en la jugada que terminó con el gol anulado a Boca
El superclásico terminó con una acción controvertida, que el árbitro no resolvió con la sanción adecuada
- 3 minutos de lectura'
LA NACION
La jugada que definió el superclásico entre Boca y River todavía es tema de debate en la calle y las redes sociales. El gol anulado a Milton Giménez con el que Boca hubiese empatado el partido en el sexto minuto de descuento generó una ola de comentarios entre los hinchas y en un referente del referato como Javier Castrilli, quien aportó una nueva perspectiva sobre la polémica: ¿hubo penal de Franco Armani?
Primero, la acción: a pocos segundos para el final, Giménez se elevó en el borde del área chica, se llevó el balón tras una serie de rebotes en su cuerpo y, tras impactar con el arquero de River, empujó desde el piso la pelota a la red. El árbitro Nicolás Ramírez convalidó el gol en primera instancia, pero luego retrotrajo su decisión a instancias del llamado del VAR. ¿El motivo? Un toque involuntario en el antebrazo derecho del atacante al momento de controlar el envío.
En ese sentido, la regla es clara: se considera infracción por mano si el jugador “marca un gol en la portería adversaria inmediatamente después de que el balón le toque en la mano o en el brazo, incluso de manera accidental”. Los jugadores de Boca protestaron la sanción, algunos compararon la jugada con el tanto de Miguel Borja para el 2-1 de River contra Atlético Tucumán, pero nadie se percató de un detalle: hubo un golpe de Armani sobre Giménez que pudo modificar el desenlace.
“Inmediatamente después de que Giménez impulsa el balón con la cabeza y su mano, antes de que el balón se introdujera en el arco de River, Armani impacta sobre Giménez. Técnicamente fue penal para Boca”, escribió Castrilli en X, desatando una nueva polémica. Lo cierto es que, en caso de que Ramírez hubiese considerado falta el golpe de Armani al delantero, correspondía cobrar penal más allá de la infracción involuntaria del goleador.
El motivo: según le confiaron a LA NACION desde la Dirección Nacional de Arbitraje, las manos casuales en ataque solo son sancionables en caso de que la acción termine en gol, pero todo lo que ocurra entre el toque involuntario del infractor y el momento en que la pelota traspasa la línea es considerado parte del juego y, por lo tanto, pasible de sanción.
Lo extraño del caso es que tanto Ramírez como Héctor Paletta, responsable del VAR, coincidieron en no sancionar penal más allá de la supuesta infracción de Armani. “Primero es el contacto con la mano y después se produce el contacto con el arquero”, coinciden en el audio publicado por la AFA. El juez de campo invalidó el gol y el equipo de Gallardo se llevó un triunfo clave de su visita a la Bombonera. Solo Castrilli lo vio y todo River lo festejó.
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