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River avanza muy lentamente hacia la clasificación a los cuartos de final de la Copa de la Liga porque en los últimos dos partidos se complicó contra rivales que cierran las posiciones. Tras la derrota en Córdoba ante Talleres, si bien tuvo el atenuante de jugó con varios suplentes, le siguió un resultado más sorpresivo: no pudo en el Monumental con el alicaído Atlético Tucumán, que viene de golpe en golpe, hundido en el último puesto.
El 1-1 ni siquiera le dejó a River el consuelo de haber jugado un buen partido o de haber desperdiciado muchas situaciones de gol. Ni una cosa ni la otra. Salvo en los primeros minutos del segundo tiempo, el equipo de Gallardo estuvo confundido, sin claridad. Lejos del River que le impone condiciones a los rivales. Y como consecuencia de eso, tampoco generó muchas ocasiones para convertir. Un combo negativo para River, que sigue segundo, en puesto de clasificación, pero con el lamento de haber dejado pasar la posibilidad de dar un paso firme a los cuartos de final. En la próxima fecha deberá ir a Junín para enfrentar a una de las revelaciones, Sarmiento.
Un tiro libre de Ferreira en forma de centro. Un córner. River, negado por abajo, busca por arriba. El nerviosismo acompaña cada uno de sus pasos.
Se ingresa en la recta final y River ataca con más furia que ideas. En la desesperación, una definición dentro del área tucumana rebota en un compañero. Atlético trata de estirar los tiempos muertos por interrupciones, con jugadores caídos que reclaman atención médica. El Decano está cansado por el desgaste y se aferra al empate.
Se le suman las complicaciones a River. Enzo Pérez pelea una pelota con Menéndez en el círculo central y cae dolorido en el muslo posterior derecho. Hace señas al banco para el cambio. Ingresa Bruno Zuculini.
Completo en su capacidad, el Monumental sube el aliento para empujar a un equipo que vuelve a estar desorientado. Apura el reloj y las soluciones no llegan.
Gallardo busca una reacción porque el equipo, tras un buen comienzo en el segundo tiempo, vuelve a caer en un bache, como si hubiera sentido el golpe del empate. Entran Pochettino, Romero y Ferreira, que reaparece en el club tras el préstamo en Colón. Salen Suárez, Simón y Palavecino.
River tiene una pérdida de pelota cerca de una banda, en su campo. La jugada se abre hacia el sector derecho, por donde entra Ciro Rius, que no es tapado por Casco. El remate cruzado del delantero es rechazado por Armani y el balón le queda a Ruiz Rodríguez, que lo empuja de frente al arco. Sorpresa en el Monumental. River debe volver a empezar.
Tras un primer tiempo bastante tedioso, el segundo es más prometedor. Atlético no se desarma tras la desventaja. Solo concedió una ocasión y lo pagó, pero se mantiene en su plan ordenado, mientras que River se activa, es más vertical y profundo.
Como si el gol lo hubiera despertado, River comienza el segundo tiempo con otra disposición, más enérgico y dinámico. Llega por elaboración y capacidad para distraer. Campisi saca al córner un remate combado de Palavecino.
Se iba el pobre primer tiempo de River. El 0-0 era una consecuencia lógica de su juego plano, sin sorpresa. Pero bastó un rapto de lucidez para romper el cerrojo tucumano. Como ocurrió en Lima por la Copa Libertadores, funcionó la conexión Julián Álvarez-Matías Suárez. El pase filtrado del juvenil transferido a Manchester City dejó al cordobés de cara a la definición, pero antes fue derribado por Capasso y el arquero Campisi. Penal, sin discusión. Se encargó Enzo Fernández con una ejecución que pasó por debajo del cuerpo de Campisi. Gol con suspenso. Quinto penal que convierte el volante en la Copa de la Liga, más uno en la Copa Libertadores.
Sin fluidez en el juego, River apuesta a la pelota detenida. De un córner, la pelota le llega a Palavecino en el segundo palo; engancha para burlar a un defensor, pero su remate es defectuoso.
No hay creatividad en River. Simón encuentra espacios entre la última línea y los volantes visitantes; desde ese hueco saca un remate que sale desviado.
El gesto adusto de Gallardo, que por un momento se sienta en el banco de los suplentes, es un reflejo del flojo nivel de River. El 73 por ciento de posesión es inocuo, no se traduce en situaciones de gol. El equipo atraviesa por un apagón.
Por unos minutos, el equipo de Pusineri sale del repliegue y arma un par de contraataques que no llegan a zona de definición, pero que le sirven para continuar la jugada en campo rival. Un respiro para el Decano.
Atlético Tucumán está bastante coordinado en la presión. No se deja meter en su área y en el achique provoca la posición adelantada en un par de avances de River, que no le encuentra la vuelta al partido.
River necesita darle un mayor ritmo a su dominio. Simón intenta con un cambio de frente. Controla Palavecino, que al sacar un centro con el empeine derecho se desvía en un defensor y la pelota cae llovida, cerca del segundo palo, lejos de la intervención del arquero Campisi.
“Estamos mal con los pases”, le comenta Gallardo a su ayudante de campo, Matías Biscay. No hay apariciones individuales en River y colectivamente no termina de conectar. En este contexto, no creó situaciones de gol en el primer cuarto de hora.
A partir de un 4-4-2 para defender, Atlético Tucumán se agrupa en una franja de 35 metros, en su campo. No lo deja maniobrar con comodidad a River, que le facilita la tarea por su imprecisión en los pases.
Dentro de lo previsto: River tiene la iniciativa y se posiciona en campo rival. Proyecta a sus dos laterales, Herrera y Casco, casi al mismo tiempo. Abre la cancha para definir por adentro. Enzo Fernández ya es un recurso habitual con la media distancia: su remate sale por encima del travesaño.
A River se le viene una semana de doble competencia. El miércoles viajará a Santiago para enfrentar a Colo Colo por la tercera fecha del Grupo F de la Copa Libertadores. Ambos equipos son líderes, con seis puntos, en una zona que completan Alianza Lima y Fortaleza, sin unidades.
Tras la rotación aplicada en la derrota frente a Talleres (”no nos salió lo que pensábamos”, reconoció Gallardo), en River vuelven los titulares. Habrá ocho cambios respecto de la caída en Córdoba. Se mantienen en la alineación Armani, Simón y Palavecino. Quedó fuera del banco Nicolás De la Cruz, con una molestia en la rodilla derecha, y entre los suplentes estará Cristian Ferreira, tras su pasó en préstamo por Colón.
¡Equipo confirmado para recibir a Atlético Tucumán! ✅#VamosRiver ⚪️🔴⚪️ pic.twitter.com/n1GuvGr6Qn
— River Plate (@RiverPlate) April 24, 2022
Atlético Tucumán es el equipo de primera división que acusa el declive más pronunciado, que lo pone en la zona roja de los Promedios. Acumula siete partidos sin ganar, es el que más goles recibió (21, junto con Barracas Central) y hace 13 encuentros que no gana de visitante. Tras una danza de directores técnicos en los últimos meses, sin que ninguno lograra rescatarlo, desde hace un par de cotejos lo dirige Lucas Pusineri, que debutó con un empate con Defensa y Justicia, a lo que le siguió una derrota ante Argentinos.
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— Atlético Tucumán (@ATOficial) April 24, 2022
📋 ¡Formación confirmada!
➡️ Estos son los elegidos por Lucas Pusineri para el partido de esta tarde, frente a River Plate.
⚠️ Bruno Bianchi quedó descartado por una dolencia muscular en el gemelo sufrida en el entrenamiento de ayer.#VamosDecano 💪💙🤍 pic.twitter.com/LDtUo6FA1B
Bienvenidos a la cobertura del partido que desde las 19 disputan River y Atlético Tucumán en el estadio Monumental, por la fecha 12 de la Copa de la Liga Profesional. El equipo local viene de perder por 1-0 en su visita a Talleres, en Córdoba, en un duelo en el que el entrenador Marcelo Gallardo dispuso una formación alternativa, mientras que el Decano está último en la Zona 1, con apenas una victoria en el campeonato y acumula siete partidos sin éxitos, con dos empates y cinco caídas.