Encontrá resultados de fútbol en vivo, los próximos partidos, las tablas de posiciones, y todas las estadísticas de los principales torneos del mundo.
Patronato - Independiente: el Rojo fue el peor en el festival del despropósito y sufrió una caída inesperada en Paraná
El equipo de Domínguez jugó 80 minutos con un jugador más por la expulsión de Valdéz Chamorro, pero ni eso supo aprovechar
- 5 minutos de lectura'
Independiente cometió todos los errores posibles y le entregó en bandeja a Patronato un triunfo (3-1) que necesitaba como el agua para mejorar su delgadísimo promedio. El encuentro fue una cadena interminable de errores de todo tipo en la que el Rojo (que jugó 80 minutos con un futbolista más) se llevó por lejos la peor parte.
El fútbol tiene la capacidad de convertirse en un espectáculo apasionante por razones insondables. Por ejemplo, un partido pésimamente jugado sobre un césped desparejo y con un arbitraje a tono con el juego puede quedar en la memoria y la retina gracias, y a pesar, de todos esos factores en contra.
Patronato, Independiente, Fernando Espinoza y el VAR se ocuparon de brindar una auténtica batalla de despropósitos, sobre todo en el primer tiempo, durante el cual el cuaderno de notas -tantas veces vacío de acontecimientos- se llenó desde el primero al último instante. Y no es una metáfora.
Iban 55 segundos cuando el conjunto entrerriano se puso en ventaja con un muy buen cabezazo de Axel Rodríguez mientras la defensa rival se quitaba las lagañas de la siesta. Transcurría el cuarto minuto de alargue cuando Lucas Romero clavó de zurda la pelota junto a un palo para descontar y cerrar la etapa con un 2-1 a favor del local, tan difícil de explicar como de entender. Porque en el medio pasó de todo.
Independiente es un equipo subido a una permanente montaña rusa. Resulta imposible predecir qué versión mostrará en cada partido y, en más de una ocasión, incluso dentro del lapso de los 90 minutos, una situación que se multiplica cuando afronta un encuentro con opciones de afianzar sus posibilidades en un torneo (de haber ganado en Paraná se hubiese colocado tercero).
Tan malo fue lo del Rojo en el arranque, que a 5 minutos del inicio Patronato ya había justificado con creces el 1 a 0 que indicaba la chapa. El equipo de Facundo Sava desbordaba por las dos alas, ganaba los anticipos, los rebotes, los mano a mano… En ese corto espacio de tiempo ya había visitado tres veces el área de Sebastián Sosa, además de la jugada del gol.
Sin embargo, apenas unos minutos más tarde tendría lugar el primer volantazo. A los 13, los dirigidos por Eduardo Domínguez encadenaron por fin cinco pases seguidos y el colofón fue un tremendo planchazo de Jorge Valdez Chamarro a la pierna de Romero. Espinoza, que estaba al lado, indicó tarjeta amarilla y el VAR lo corrigió: Patronato se quedó prematuramente con uno menos y dio varios pasos hacia atrás.
Lo mejor del partido
Dijeron presente entonces Romero para conducir, Alex Vigo para profundizar por derecha y la rebeldía de Leandro Fernández para obligar en cada jugada. Pasó a mandar la visita, y más allá de que Lucas González y Juan Cazares no aportaban nada en la construcción ni Leandro Benegas en el ataque, el juego se fue inclinando hacia el área de Facundo Altamirano.
En eso estaban cuando comenzó la catarata de imponderables. A los 25, Juan Manuel Insaurralde tocó atrás para su arquero. Parecía una acción de resolución sencilla, pero Sosa se complicó solo: quiso pisarla ante Jonás Acevedo y la perdió: 2-0. Cuatro minutos más tarde, Fernández armó una jugada de principio a fin. Picó a buscar una cortada, tocó con Vigo, capturó un rebote con el pecho y la clavó en un ángulo. Era el descuento, hasta que surgió otra vez el VAR “descubriendo” un fuera de juego demasiado milimétrico en el arranque de la acción.
La decepción no desinfló al Rojo, que sostuvo hasta el descanso su mejor momento de la tarde. Antes de que sobre la hora llegara el gol de Romero, Benegas falló dos ocasiones muy claras (en la primera ni siquiera supo aprovechar un resbalón del arquero local) y Francisco Álvarez le tapó a Fernández un remate en la línea cuando el delantero ya había eludido al arquero.
Al regreso del vestuario Sava sintió más que ninguno que ese tanto era una alarma y que en el aire había aroma a remontada. Mandó tres defensores a la cancha, estableció un 5-3-1 bien cerrado en defensa (más tarde incluiría otros dos marcadores), le entregó la pelota a Independiente y se encomendó a que el rival no encontrara los caminos para lastimarlo como lo había hecho en el cuarto de hora previo.
Con el resultado a la vista hay que aceptar que acertó en el planteo. Aunque contó con otra ayuda imprevista. A los 11, Rodrigo Márquez quiso meter un caño en la primera pelota que tocaba. No le salió, Sergio Ojeda buscó a Acevedo por izquierda, Insaurralde se desparramó en el suelo sin que nadie lo tocara y Axel Rodríguez pudo elegir dónde acomodar el disparo para poner el 3-1.
La doble desventaja fue demasiado para la orfandad de ideas, conceptos y calidad técnica que esta vez mostró Independiente. Como si hubiera entrado en la más profunda de las caídas que debe tener toda montaña rusa que se precie, de ahí en más la actuación del Rojo se hizo esperpéntica. A base de centros sin destino, errores infantiles en todas las fases del juego, pases forzados por controles imprecisos y retrocesos imperfectos, el equipo de Domínguez fue escenificando una obra maestra del terror futbolístico que acabó con una derrota de las que abren heridas.
Independiente podía encadenar tres victorias al hilo y prenderse en la parte alta de la tabla. El rival parecía accesible. Los últimos partidos indicaban que el carrito del Rojo iba en ascenso. Pero como tantas veces en tiempos recientes dejó pasar la ocasión, y más grave todavía, conoció la cuesta abajo más vertiginosa de la montaña rusa en la que vive, un regalo que por supuesto Patronato aceptó encantado.
Otras noticias de Liga Profesional de Fútbol
17° estrella. Así quedó la tabla de ganadores del fútbol argentino, tras el título de Estudiantes en el Trofeo de Campeones 2024
Lo que viene. Torneo Apertura y Clausura 2025: cuándo empieza la competencia en el fútbol argentino
Se sorteó la Liga Profesional. Cómo quedaron los dos grupos y cuándo se jugará el primer River-Boca del año
- 1
Diego Simeone, antes de Barcelona vs. Atlético de Madrid: “Nadie te asegura que ganando se abra la puerta para algo importante”
- 2
Yuta Minami, el arquero japonés que se metió un insólito gol en contra en su partido despedida... ¡y llamó al VAR!
- 3
Dibu Martínez y un partido especial ante Manchester City: pase de billar en el primer gol, discusión acalorada con Grealish y Haaland y saludo navideño
- 4
Simeone, De Paul, Álvarez, Molina: el Asadito mecánico del Atlético de Madrid cocinó un triunfo histórico en Barcelona